Helen Hayes Quotes

From your parents you learn love and laughter and how to put one foot before the other. But when books are opened you discover that you have wings.

The expert at anything was once a beginner.

If you rest, you rust.

Only the poet can look beyond the detail and see the whole picture.

Love is perhaps the only glimpse we are permitted of eternity.

From your parents, you learn love and laughter and how to put one foot in front of the other. But when books are opened, you discover that you have wings.

The story of a love is not important. What is important is that one is capable of love. It is perhaps the only glimpse we are permitted of eternity.

My mother drew a distinction between achievement and success. She said that 'achievement is the knowledge that you have studied and worked hard and done the best that is in you. Success is being praised by others, and that's nice, too, but not as important or satisfying. Always aim for achievement and forget about success.

Age is not important unless you're a cheese.

We rely upon the poets, the philosophers, and the playwrights to articulate what most of us can only feel, in joy or sorrow. They illuminate the thoughts for which we only grope; they give us the strength and balm we cannot find in ourselves. Whenever I feel my courage wavering, I rush to them. They give me the wisdom of acceptance, the will and resiliance to push on.

When books are opened, we discover that we have wings

The faster we travel, the less there is to see.

¿Por qué, cuando las personas dejan a sus parejas porque están teniendo un lío con otra persona, creen mejor hacer ver que no hay nadie más involucrado? ... Es lo mismo que esas personas que inventan una mentira como excusa en lugar de decir la verdad, aunque la verdad sea mejor que la mentira.

Always aim for achievement, and forget about success.

We relish news of our heroes, forgetting that we are extraordinary to somebody too.

The good die young—but not always. The wicked prevail—but not consistently. I am confused by life, and I feel safe within the confines of the theatre.

Actors work and slave and it is the color of your hair that can determine your fate in the end.

You rest, you rust.

HELEN HAYES: “Which part of The Divine Comedy do you like the most, Tiziano?” TIZIANO CONTI: “The fifth Canto.” HELEN HAYES: “The Hell, huh?” TIZIANO CONTI: “L’inferno depicts the truth.

The hardest years in life are those between ten and seventy.

- Helen, ¿por qué te quedas con una niña que todos creen que es una embustera? - ¿Todos, Jane? Vaya, sólo ochenta personas han oído que te llamasen así, y hay cientos de millones en el mundo.

...Sayangi dan cintailah dirimu apa adanya, karena yang paling penting dalam hidup ini adalah kemampuan seseorang untuk mencintai, karena mungkin itulah setitik keabadian yang bisa kita miliki...

There were many times in my life, until I was left alone, that I wished for solitude. I now find that I love solitude. I never had the blessed gift of being alone until the last of my loved ones was wrested from me. Now I can go sometimes for days and days without seeing anyone. I’m not entirely alone, because I listen to the radio and read the newspapers. I love to read. That is my greatest new luxury, having the time to read. And oh, the little things I find to do that make the days, as I say, much too short. Solitude — walking alone, doing things alone — is the most blessed thing in the world. The mind relaxes and thoughts begin to flow and I think that I am beginning to find myself a little bit. — HELEN HAYES AMERICAN ACTRESS

Hay unas palabras del Dalai Lama que creo que resumen todo lo escrito: Lo que más me sorprende del hombre occidental es que pierde la salud para ganar dinero, después pierde el dinero para recuperar la salud. Y por pensar ansiosamente en el futuro, no disfruta el presente, por lo que no vive ni el presente ni el futuro. Y vive como si no tuviese que morir nunca, y muere como si nunca hubiera vivido.

5 No hay un dador y un receptor en el sentido en el que el mundo los concibe. 6 Hay un dador que conserva lo que da, y otro que también habrá de dar. 7 Y ambos ganarán en este intercambio, pues cada uno de ellos dispondrá del pensamiento en la forma que le resulte más útil.

Son únicamente tus pensamientos los que te causan dolor. 2 Nada externo a tu mente puede herirte o hacerte daño en modo alguno. 3 No hay causa más allá de ti mismo que pueda abatirse sobre ti y oprimirte. 4 Nadie, excepto tú mismo, puede afectarte. 5 No hay nada en el mundo capaz de hacerte enfermar, de entristecerte o de debilitarte. 6 Eres tú el que tiene el poder de dominar todas las cosas que ves reconociendo simplemente lo que eres.

Son únicamente tus pensamientos los que te causan dolor. 2 Nada externo a tu mente puede herirte o hacerte daño en modo alguno. 3 No hay causa más allá de ti mismo que pueda abatirse sobre ti y oprimirte. 4 Nadie, excepto tú mismo, puede afectarte. 5 No hay nada en el mundo capaz de hacerte enfermar, de entristecerte o de debilitarte. 6 Eres tú el que tiene el poder de dominar todas las cosas que ves reconociendo simplemente lo que eres. 7 Conforme percibas su inocuidad, ellas aceptarán como suya tu santa voluntad. 8 Y lo que antes inspiraba miedo se convierte ahora en una fuente de inocencia y santidad.

The Helen Hayes Theater was considered prestige drama, but it was heard sporadically and never built the reputation or the audiences of the great theaters of the air. Appearances with Orson Welles’s Mercury troupe in 1939 confirmed her belief that, “next to the stage, radio is the best medium for drama.” Her Lipton Tea series, beginning the following year, was her best and longest forum. She supervised the entire production, playing the leads, helping with casting and sound effects, and even participating in the tea commercials. But it became the first casualty of World War II when, three weeks after Pearl Harbor, Lipton announced its cancellation in anticipation of tea shortages from India.

la adversidad puede ser una herramienta que te ayude a alcanzar mayores logros y mayor felicidad. «Si en el mundo solo existiera la alegría, nunca aprenderíamos a ser valientes y pacientes», escribió Helen Keller. El liderazgo consiste en aprovechar los tiempos difíciles para utilizarlos en tu propio favor. Hay que ver los obstáculos como bendiciones disfrazadas. Hace falta un poco de práctica para pensar así, pero sé que lo conseguirás, Blake. Estoy convencido.

Tu papel consiste únicamente en recordar esto: no quieres que nada que tú consideres valioso sea lo que tiene lugar en una relación. 2 No decides hacer nada a tu manera para deteriorarlas o para crear armonía en ellas. 3 No sabes lo que es curar. 4 Todo lo que has aprendido acerca de la empatía procede del pasado. 5 Y no hay nada del pasado que desees compartir, pues no hay nada del pasado que desees conservar. 6 No te valgas de la empatía para otorgarle realidad al pasado y así perpetuarlo. 7 Hazte a un lado tranquilamente y deja que la curación se lleve a cabo por ti. 8 Mantén un solo pensamiento en la mente y no lo pierdas de vista, por muy grande que sea la tentación de juzgar cualquier situación, y de determinar tu reacción basándote en los juicios que has hecho de la misma. 9 Concentra tu mente sólo en esto:                10 No estoy solo, y no quiero imponer el pasado a mi Invitado.                11 Lo invité y Él está aquí.                12 No tengo que hacer nada, excepto no interferir.

I genitori ti insegnano ad amare, ridere e correre. Ma solo entrando in contatto con i libri, si scopre di avere le ali.

From your parents you learn love and laughter and how to put one foot before the other. But when books are opened you discover that you have wings.” —Helen Hayes

And hear across the moan of many seas The whisper and the laughter of my brook.

Hay tiempo en la vida en que esperas que el mundo esté siempre lleno de cosas nuevas. Y luedo llega el día en que te das cuenta de que no será así en absoluto. Ves que la vida se convertirá en una cosa hecha de agujeros. De ausencias. De pérdidas. De cosas que estuvieron allí y ya no están. Y te das cuenta, además, de que tienes que crecer alrededor y entre los vacíos, aunque si alargas la mano hacia donde estaban las cosas sientas esa tensa, resplandeciente opacidad del espacio que ocupan los recuerdos

every professional was once a beginner

From your parents you learn love & laughter & how to put one foot in front of the other. But when books are opened, you discover you have wings.

...podre ir yo a Inglaterra y explorar misma a mi librería. Si me veo con el valor para hacerlo, claro. Vengo escribiéndoles cartas de los mas descaradas desde la seguridad que me dan 5000 kilómetros que hay de por medio. Probablemente entrare un día en esa tienda y saldré de ella al cabo de un rato sin decirles quien soy.

Helen Bishop, the young newlywed from Dowagiac, Michigan, claimed that she and her husband, Dickinson, were pushed into Boat 7 after an officer took her arm and told her to be very quiet and to get in immediately. Helen had earlier left her lapdog Frou Frou in their room, even though the little dog had tugged at the hem of her dress while she was putting on her life preserver. Thinking it would be inappropriate to take her pet, Helen had closed the stateroom door to the sound of her tiny dog’s high-pitched barks. But another young woman was not going anywhere without her Pomeranian. Twenty-four-year-old Margaret Hays of New York had taken her little dog along on a European tour she had just completed with a school friend and her mother. When the three women decided to dress and go up to the boat deck, Margaret wrapped her pet in a blanket and took it with her. Near the staircase on C deck they were greeted by Gilbert Tucker, a young magazine editor and writer from Albany, New York, who had developed a crush on Margaret. Tucker was holding three lifebelts which he proceeded to help Margaret and the two others to put on. When Jim Smith passed by and saw this, he quipped, “Oh, I suppose we ought to put a life preserver on the little doggie, too!” Tucker and the three women then proceeded to the boat deck, where all four, along with the little doggie, were permitted to enter Lifeboat 7.

Hay más cosas en esta vida que el amor, Helene Aquilla. Está el deber. El Imperio. La familia. Los hombres a los que lideras. Las promesas que haces.

I was a working mother, and making films is a time-consuming job, but I found time to expose children to all facets of life, all sorts of experiences. […] They learned all sorts of sports to find out what they liked the best. Helen Hayes once said that the essential thing was to introduce children to life, and then let them make their own decisions.

Life is a succession of lessons which must be lived to be understood. —Helen Keller

Hotchner has also written for theater. His play The White House, starring Helen Hayes, was performed on Broadway, and in 1996 it was performed in the East Room of the White House for President and Mrs. Clinton and an audience of distinguished guests.

Ellery me ha subido a 250 dólares por guión; si la cosa se mantiene hasta junio, podré ir yo a Inglaterra y explorar yo misma mi librería. Si me veo con valor para hacerlo, claro. Vengo escribiéndoles cartas de lo más descaradas desde la seguridad que me dan los 5.000 kilómetros que hay por medio. Probablemente entraré un día en esa tienda y saldré de ella al cabo de un rato sin decirles quién soy.

Según entienden ellos la cosa, compras un libro, lo lees, lo colocas en la estantería y jamás vuelves a abrirlo en toda tu vida, ¡PERO NUNCA LO TIRAS! ¡JAMÁS DE LOS JAMASES SI ESTÁ ENCUADERNADO EN TAPA DURA! Pero… ¿por qué no? Personalmente creo que no hay nada menos sacrosanto que un mal libro e incluso un libro mediocre.

Qué tonta, Helene —pienso—. Cuando amas, siempre hay más dolor.

At a press conference in Washington, D.C., in 1957, actress Helen Hayes claimed that her son (later known as James MacArthur, sidekick of Jack Lord in “Hawaii Five-O”) had been well on the path to juvenile delinquency, brought on by rock-and-roll records. She cured him by playing a Beethoven record.

One has to grow up with good talk in order to form the habit of it. —Helen Hayes