Nohadon Quotes

Every decision we make influences others, and sometimes harms them. That’s not the way of kings. That’s the way of life.

As I fear not the child with a weapon he cannot lift, I will never fear the mind of a man who does not think. -From The Way of Kings, fourth parable

Al menos tienes razón en una cosa, Nohadon. Ser humano es querer lo que no podemos tener.

Am I a coward?" he wondered. Nohadon challenged him, in the book, to examine himself. To never become so certain or high that he wasn't willing to seek truth.

Hardly,” Nohadon said. “But maybe you shouldn’t be looking for life to be easier because you choose to do something that is right! Personally, I think life is fair. It’s merely that often, you can’t immediately see what balances it.

All things exist in three realms, Dalinar,” Nohadon said. “The Physical: what you are now. The Cognitive: what you see yourself as being. The Spiritual: the perfect you, the person beyond pain, and error, and uncertainty.

—Has pronunciado los juramentos —dijo Nohadon alzando la voz—, pero ¿comprendes el viaje? ¿Entiendes lo que requiere? Has olvidado una parte esencial, algo sin lo que no puede haber viaje alguno. Los monstruos lanzaron sus puños hacia Dalinar, que gritó. —¿Cuál es el paso más importante que puede dar alguien?

—Entonces, ¿todo es negativo? —replicó Dalinar—. ¿Insinúas que nadie debería tener principios porque no se deriva un beneficio de ellos? —En absoluto —dijo Nohadon—. Pero quizá no deberías pretender que la vida fuese más fácil porque escogiste hacer lo correcto. Personalmente, creo que la vida es justa. Lo que pasa es que muchas veces no ves de inmediato con qué se equilibra.

—Tiene razón —respondió Nohadon— y también está muy equivocado, muchísimo. —Apretó el brazo de Dalinar—. Es cierto que a veces tenemos que tomar decisiones horribles. Y serán decisiones imperfectas porque nosotros somos imperfectos. Pero eso no es motivo para renunciar a buscar soluciones mejores. Y el destino… —… no debe socavar el viaje. —Dalinar asintió—. Pagaré el precio. Envíame de vuelta.

—¿Qué es esto? —preguntó Dalinar, que sentía que todo era demasiado… irreal. La calidez, la estancia que parecía mullida, una suavidad en cada esquina o canto—. ¿Lo he creado yo? Ahora soy Honor. ¿Estoy creando visiones? —¡Ja! —rio Nohadon mientras se sentaba—. Llevas siendo un dios menos de cinco minutos y ya te crees que lo controlas todo.