Justicia En Mundo Quotes

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Me gusta pensar que los recuerdos no mueren con la carne, que todo aquello que hacemos, que todo a lo que atribuimos un valor se queda escrito con tinta indeleble en la memoria del mundo, que los hombres inventaron el concepto de justicia para tener presente la fragilidad del bien, la indolencia del equilibrio y para tratar de corregir los errores de Dios.
Eduardo Sánchez Rugeles (Liubliana)
Una mujer puede tener igualdad de derechos y ser verdaderamente libre sólo en un mundo de trabajo socializado, de armonía y justicia.
Alexandra Kollontai (Mujer y lucha de clases)
Yo no soy entendida en política ni economista. Soy simplemente una mujer que padeció, que perdió a su marido, a sus padres, a sus hijos y a sus amigos. Yo sé que el mundo tendrá que compartir colectivamente la responsabilidad. Los alemanes pecaron criminalmente, pero lo mismo hicieron las demás naciones aunque sólo sea por negarse a creer y a afanarse día y noche en salvar a los desventurados y desposeídos, por cuantos medios estuviesen a su alcance. Sé que si la gente de todo el mundo se propone que de ahora en adelante reine una justicia indivisible y que no haya más Hitlers, algos se conseguirá. Indudablemente, todos aquellos cuyas manos se hayan manchado con sangre nuestra, bien sea directa bien indirectamente, tienen que pagar por los crímenes que han cometido, lo mismo si son hombres que si son mujeres.
Olga Lengyel
La democracia es un lujo del norte. Al sur se le permite el espectáculo, que eso no se le niega a nadie. Y a nadie molesta mucho, al fin y al cabo, que la política sea democrática, siempre y cuando la economía no lo sea. Cuando cae el telón, una vez depositados los votos en las urnas, la realidad impone la ley del más fuerte, que es la ley del dinero. Así lo quiere el orden natural de las cosas. En el sur del mundo, enseña el sistema, la violencia y el hambre no pertenecen a la historia, sino a la naturaleza, y la justicia y la libertad han sido condenadas a odiarse entre sí.
Eduardo Galeano
Yo soy mi adivinanza. Señor, no pretende usted bondadosamente aliviar ni secuestrar mi soledad. Es una cosa que a las mujeres se nos enseña a temer: oh la torre terrible, oh las zarzas que las circundan; no un nido sociable, sino un calabazo. Pero nos han mentido, sabe usted, en esto como en otras tantas cosas. El calabozo podrá ser severo y amenazador, pero dentro de él estamos muy seguras, dentro de sus confines somos libres de una manera que ustedes, que tienen libertad para correr el mundo, no necesitan imaginar. Ni yo recomiendo imaginarla; pero hágame la justicia de creer que mi soledad es mi tesoro, lo mejor que poseo. No me decido a salir. Si abriera usted la puertecilla, no escaparía; pero ay, cómo canto en mi jaula de oro...
A.S. Byatt (Possession)
El feminismo es la linterna que muestras las sombras de todas las grandes ideas gestadas y desarrolladas sin las mujeres y en ocasiones a costa de ellas: democracia, desarrollo económico, bienestar, justicia, familia, religión... Las feministas empuñamos esa linterna con orgullo por ser la herencia de millones de mujeres que partiendo de la sumisión forzada y mientras eran atacadas, ridiculizadas y vilipendiadas, supieron construir una cultura, una ética y una ideología nuevas y revolucionarias para enriqueces y democratizar el mundo.
Nuria Varela (Feminismo para principiantes)
Dios nos creó cuando no tenía necesidad de nosotros y Dios nos salvó cuando podía habernos condenado ejerciendo Su justicia. En
Miguel Núñez (Enseñanzas que transformaron el mundo: Un llamado a despertar para la iglesia en Latino América. (Spanish Edition))
Está muy bien decir que el mundo se rige por los valores de la razón, la compasión y la justicia, pero si nada de lo que hay en realidad refleja esas palabras, carecen de sentido.
N.K. Jemisin (Clarkesworld Magazine, Issue 50, November 2010)
Francamente hablando: hay en este mundo desigualdades que asustan
Gustavo Adolfo Bécquer (Cartas desde mi celda)
No hay en este mundo suficiente de nada para todos. No hay suficientes alimentos, suficiente amor, suficiente justicia y nunca hay suficiente tiempo.
Robert McKee (El guion. Sustancia, estructura, estilo y principios de la escritura de guiones)
¡El mundo está fuera de quicio!... ¡Oh, suerte maldita!... ¡Que haya nacido yo para ponerlo en orden! ¡Listo, venid, vámonos juntos!
William Shakespeare (Hamlet)
9 Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia.
Casiodoro de Reina (Reina Valera 1960)
Exhibía una expresión tan seria a la luz de la luna… Como si de verdad creyese que en el mundo reina la justicia, que a las buenas personas les suceden cosas buenas y que lo contrario solo es la excepción que confirma la regla.
Robyn Schneider (Estrellas fugaces)
La justicia, situada entre estos dos extremos, es aceptada no como un bien, sino como algo que se respeta por impotencia para cometer la injusticia; pues el que puede cometer­la, el que es verdaderamente hombre, jamás entrará en tratos con nadie para evitar que se cometan o sufran in­justicias. ¡Loco estaría si tal hiciera! Ahí tienes, Sócrates, la naturaleza de la justicia y las circunstancias con mo­tivo de las cuales cuenta la gente que apareció en el mundo.
Plato (La República)
Cuando las grandes organizaciones democráticas han fracasado escandalosamente en afrontar la profunda transformación de la sociedad en el nuevo mundo globalizado, y las élites han desertado de sus responsabilidades, surgen por lógica las fuerzas que apuestan por imponer, no justicia, sino castigo a toda costa.
Hermann Tertsch (Días de ira (Actualidad) (Spanish Edition))
Quien ha nacido y venido a este mundo para conocer la verdad, no puede perseverar en la ignorancia, el impulso es real en él, es indómito y rebelde. Sufre enórmemente bajo el peso y dominio de la falsedad, la calumnia, el engaño, la muerte continua; está sediento de libertad, de justicia, de vida real y de verdad
C.G. Jung
El pensamiento productivista, auspiciado por Occidente, ha arrastrado al mundo a una crisis de la que hay que salir a través de una ruptura radical con la escapada hacia delante del "siempre más", en el dominio financiero pero también en el de las ciencias y las técnicas. Ya es hora de que la preocupación por la ética, por la justicia, por el equilibrio duradero prevalezcan.
Stéphane Hessel
No podemos alegar ignorancia, solo indiferencia. Los que vivimos hoy sabemos más. Tenemos la oportunidad y la responsabilidad que nos da vivir en un momento en que la crítica hacia las granjas industriales ha llegado a la conciencia pública. Somos aquellos a quienes se nos preguntará, con toda la justicia del mundo: ¿Qué hiciste cuando te enteraste de lo que implica comer animales?
Jonathan Safran Foer (Eating Animals)
Sólo de ti podía esperar socorro, aunque no me despertaba otro sentimiento que el del odio. ¡Insensible, despiadado creador! ,e habías dotado de percepción y de pasiones, y luego me habías arrojado al mundo para desprecio y horror de la humanidad. Pero sólo de ti podía recabar piedad y desagravio, y en ti decidí buscar esa justicia que en vano trataba de obtener de cualquier ser con forma humana.
Mary Wollstonecraft Shelley (Frankenstein)
Aquel pensamiento le estremecía el alma. Su doctrina tenía como objetivo intensificar los vínculos de amistad y respeto entre hombres y entre gobiernos. El sueño final de Pitágoras era un mundo en el que no hubiera diferencias de trato ni de derechos jurídicos por pertenecer a diferentes razas o naciones. Una comunidad mundial basada en los principios de hermandad, espiritualidad y justicia. Tambi
Marcos Chicot (El asesinato de Pitágoras)
Aquí, en este mundo que dejaste atrás, a Dios lo han secuestrado los hombres. Han creado unas religiones disparatadas, que no entiendo cómo han sobrevivido durante siglos y siguen expandiéndose. Son implacables, predican amor, justicia y caridad, y para imponerlas cometen atrocidades. Los señores muy principales que propagan estas religiones juzgan, castigan, fruncen el ceño ante la alegría, el placer, la curiosidad y la imaginación.
Isabel Allende (La suma de los días)
El tema del amianto…, a ella le imprime cierto rumbo. Hace que el cáncer parezca algo más importante que una pequeña desgracia personal, que parezca algo más que pura y absurda mala suerte. La conecta con el mundo. Con la historia, con la política, con la justicia. Y entiendo por qué se aferra a eso. Porque creo que ésa es la parte más dura cuando uno enferma, vivir en un universo separado de todos los demás, como exiliado en un país extranjero.
Lionel Shriver (So Much for That)
Su fruto debiera ser, puede ser y será un humanismo con ribetes religiosos, inspirado por el sentimiento del secreto trascendente del hombre, por la orgullosa conciencia que el hombre tiene de ser algo más que un fenómeno biológico, de estar ligado por una parte esencial de su ser a un mundo espiritual, de que la noción de lo absoluto le ha sido dada con las ideas de Verdad, de Libertad, de Justicia, de que le ha sido impuesto el deber de ir en busca de la perfección. En ese patetismo, en esa obligación, en esa veneración del hombre por sí mismo descubro a Dios. Pero soy incapaz de encontrarle en cien mil millones de vías lácteas.
Thomas Mann (Doktor Faustus)
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. 18 Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación; 19 que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación. 20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios. 21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
Casiodoro de Reina (Reina Valera 1960)
a actos que violan la castidad; es igualmente probable que se trate de actos contra la justicia, o faltas de caridad contra el mundo de los demás. A ellos les parecerán muestras de fervor y piedad hacia el eros. La pareja puede decirse—el uno al otro—casi con el tono de quien ofrece un sacrificio: «Es por causa del amor que he descuidado a mis padres… que he dejado a mis hijos… engañado a mi socio… fallado a mi amigo en su mayor necesidad». Estas razones en la ley del amor pasan por buenas. Sus fieles hasta pueden llegar a sentir que hay un mérito especial en estos sacrificios, porque ¿qué ofrenda más costosa puede dejarse en el altar del amor que la propia conciencia?
C.S. Lewis (Los Cuatro Amores (Spanish Edition))
¿Queréis vivir «según la naturaleza»? ¡Oh nobles estoicos, qué embuste de palabras! Imaginaos un ser como la naturaleza, que es derrochadora sin medida, indiferente sin medida, que carece de intenciones y miramientos, de piedad y justicia, que es feraz y estéril e incierta al mismo tiempo, imaginaos la indiferencia misma como poder — ¿cómo podríais vivir vosotros según esa indiferencia? Vivir — ¿no es cabalmente un querer—ser—distinto de esa naturaleza? ¿Vivir no es evaluar, preferir, ser injusto, ser limitado, querer—serdiferente? Y suponiendo que vuestro imperativo «vivir según la naturaleza» signifique en el fondo lo mismo que «vivir según la vida» — ¿cómo podríais no vivir así? ¿Para qué convertir en un principio aquello que vosotros mismos sois y tenéis que ser? — En verdad, las cosas son completamente distintas: ¡mientras simuláis leer embelesados el canon de vuestra ley en la naturaleza, lo que queréis es algo opuesto, vosotros extraños comediantes y engañadores de vosotros mismos! Vuestro orgullo quiere prescribir e incorporar a la naturaleza, incluso a la naturaleza, vuestra moral, vuestro ideal, vosotros exigís que ella sea naturaleza «según la Estoa» y quisierais hacer que toda existencia existiese tan sólo a imagen vuestra — ¡cual una gigantesca y eterna glorificación y generalización del estoicismo! Pese a todo vuestro amor a la verdad, os coaccionáis a vosotros mismos, sin embargo, durante tanto tiempo, tan obstinadamente, con tal fijeza hipnótica, a ver la naturaleza de un modo falso, es decir, de un modo estoico, que ya no sois capaces de verla de otro modo, — y cierta soberbia abismal acaba infundiéndoos incluso la insensata esperanza de que, porque vosotros sepáis tiranizaros a vosotros mismos — estoicismo es tiranía de sí mismo —, también la naturaleza se deja tiranizar; ¿no es, en efecto, el estoico un fragmento de la naturaleza?... Pero ésta es una historia vieja, eterna: lo que en aquel tiempo ocurrió con los estoicos sigue ocurriendo hoy tan pronto como una filosofía comienza a creer en sí misma. Siempre crea el mundo a su imagen, no puede actuar de otro modo; la filosofía es ese instinto tiránico mismo, la más espiritual voluntad de poder, de «crear el mundo», de ser causa prima [causa primera].
Friedrich Nietzsche (Más allá del bien y del mal)
La autoridad del Estado no puede ser un fin en sí misma, porque ello significaría consagrar la inviolabilidad de toda tiranía en el mundo. Si por los medios que están al alcance de un gobierno se precipita una nacionalidad en la ruina, entonces la rebelión no es sólo un derecho, sino un deber para cada uno de los hijos de ese pueblo. La pregunta: "¿cuándo se presenta este caso?", no se resuelve mediante disertaciones teóricas, sino por la acción y por el éxito. Como todo gobierno, por malo que sea y aún cuando haya traicionado una y mil veces los intereses de una nacionalidad, reclama para sí el deber que tiene de mantener la autoridad del Estado, el instinto de conservación nacional en lucha contra un gobierno semejante tendrá que servirse, para lograr su libertad o su independencia, de las mismas armas que aquél emplea para mantenerse en al mando. Según esto, la lucha será sostenida por medios "legales" mientras el poder que se combate no utilice otros; pero no habrá que vacilar ante el recurso de medios ilegales si es que el opresor mismo se sirve de ellos. En general, no debe olvidarse que la finalidad suprema de la razón de ser de los hombres no reside en el mantenimiento de un Estado o de un gobierno: su misión es conservar su Raza. Y si esta misma se hallase en peligro de ser oprimida o hasta eliminada, la cuestión de la legalidad pasa a un plano secundario. Entonces poco importará ya que el poder imperante aplique en su acción los mil veces llamados medios "legales"; el instinto de conservación de los oprimidos podrá siempre justificar en grado superlativo el empleo de todo recurso. Sólo así se explican en la Historia ejemplos edificantes de luchas libertarias contra la esclavitud (interna o externa) de los pueblos. En este caso el derecho humano se impone sobre el derecho político. Si un pueblo sucumbe sin luchar por los derechos del hombre, es porque al haber sido pesado en la balanza del Destino resultó demasiado débil para tener la suerte de seguir subsistiendo en el mundo terrenal. Porque quien no está dispuesto a luchar por su existencia o no se siente capaz de ello es que ya está predestinado a desaparecer, y esto por la justicia eterna de la Providencia. ¡El mundo no se ha hecho para los pueblos cobardes!
Adolf Hitler (Mi Lucha)
Las palabras, dependiendo del tono y la intención, cobran significados distintos. Si se dicen con mala fe, intentando herir, incluso las palabras aparentemente más sencillas pueden volverse horrorosas. Pero en el fondo, no son más que palabras. —Pero hay algunas que cuando se dicen, todo el mundo se escandaliza. —Porque no saben lo que significa. La gente le tiene muchísimo más miedo a las palabras que a los cañones. Las palabras han hecho revoluciones, puentes, caminos. Han logrado que la gente se enamore o se odie para siempre. Hay palabras grandes como monocotiledónea o gastroenterólogo y pequeñitas pero poderosas como paz. Importantes como justicia, imprescindibles como vida, valiosas como sueño, muy poco significativas como dinero… Lo importante es cómo se usan y qué se quiere decir cuando se usan.
Benito Taibo (Persona normal)
Ayúdalo a entender que “nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales” (Efesios 6:12). Oro para que esté fuerte en el Señor y que se ponga toda la armadura de Dios, para que pueda hacer frente a las artimañas del diablo en el día malo. Ayúdalo a ceñir sus lomos con el cinturón de la verdad y protegerse con la coraza de justicia, calzados sus pies con la disposición de proclamar el evangelio de la paz. Ayúdalo a tomar el escudo de la fe, con el cual pueda apagar todas las flechas encendidas del maligno. Oro para que tome el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, la cual es la Palabra de Dios, orando siempre en el Espíritu con toda oración y súplica, vigilando y manteniéndose
Stormie Omartian (El Poder de la Esposa que Ora)
Has oído decir que ésta es una época de crisis moral. Tú mismo lo has dicho, con temor y a la vez con la esperanza de que esas palabras no tuvieran un significado real. Te has quejado de que los pecados del hombre están destruyendo al mundo y has llegado a maldecir a la naturaleza humana por negarse a practicar las virtudes que le exigías. Como para ti la virtud consiste en el sacrificio, has exigido más sacrificios ante cada sucesivo desastre. En el nombre de la vuelta a la moralidad, has sacrificado todo aquello que creías era la causa de tus sufrimientos. Has sacrificado a la justicia por la misericordia. Has sacrificado a la independencia por la unidad. Has sacrificado a la razón por la fe. Has sacrificado a la riqueza por la necesidad. Has sacrificado a la autoestima por la negación de ti mismo. Has sacrificado a la felicidad por el deber.
Ayn Rand (La Rebelión de Atlas)
Ayúdalo a entender que “nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales” (Efesios 6:12). Oro para que esté fuerte en el Señor y que se ponga toda la armadura de Dios, para que pueda hacer frente a las artimañas del diablo en el día malo. Ayúdalo a ceñir sus lomos con el cinturón de la verdad y protegerse con la coraza de justicia, calzados sus pies con la disposición de proclamar el evangelio de la paz. Ayúdalo a tomar el escudo de la fe, con el cual pueda apagar todas las flechas encendidas del maligno. Oro para que tome el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, la cual es la Palabra de Dios, orando siempre en el Espíritu con toda oración y súplica, vigilando y manteniéndose fuerte hasta el fin (Efesios 6:13-18).
Stormie Omartian (El Poder de la Esposa que Ora)
–¿Cómo impone un hombre a otro su poder, Winston? Winston pensó. –Haciéndole sufrir. –Exacto. Haciéndole sufrir. La obediencia no es suficiente. Si no sufre, ¿cómo puedes estar seguro de que la otra persona obedece a tu voluntad y no a la suya? El poder se basa en infligir dolor y humillación. El poder consiste en hacer pedazos el espíritu humano y darle la forma que elijamos. ¿Empiezas a ver ahora el mundo que estamos creando? Es justo lo contrario de las bobas utopías hedonistas que imaginaron los antiguos reformistas. Un mundo de miedo, traición y torturas, en el que pisoteas y te pisotean, y que se volverá más despiadado a medida que vaya refinándose. Em nuestro mundo, el progreso será un progreso hacia el dolor. Las civilizaciones antiguas decían estar basadas en el amor o la justicia. La nuestra se funda en el odio. En nuestro mundo no habrá más emociones que el miedo, la rabia, el triunfo y la degradación. Destruiremos todo lo demás.... todo.
George Orwell (1984)
La pobreza de que se habla en el Evangelio nunca es un simple fenómeno material. La pobreza puramente material no salva, aun cuando sea cierto que los más perjudicados de este mundo pueden contar de un modo especial con la bondad de Dios. Pero el corazón de los que no poseen nada puede endurecerse, envenenarse, ser malvado, estar por dentro lleno de afán de poseer, olvidando a Dios y codiciando sólo bienes materiales. Por otro lado, la pobreza de que se habla aquí tampoco es simplemente una actitud espiritual. La Iglesia, para ser comunidad de los pobres de Jesús, necesita siempre figuras capaces de grandes renuncias; necesita comunidades que le sigan, que vivan la pobreza y la sencillez, y con ello muestren la verdad de las Bienaventuranzas para despertar la conciencia de todos, a fin de que entiendan el poseer sólo como servicio y, frente a la cultura del tener, contrapongan la cultura de la libertad interior, creando así las condiciones de la justicia social.
Pope Benedict XVI (Jesus of Nazareth: From the Baptism in the Jordan to the Transfiguration)
La historia ha contemplado el auge y caída de muchas religiones, imperios y culturas. Tales trastornos no son necesariamente malos. El humanismo ha dominado el mundo durante trescientos años, que no es un período muy extenso. Los faraones gobernaron Egipto durante tres mil años y los papas han dominado Europa durante un milenio. Si le hubiéramos dicho a un egipcio de la época de Ramsés II que un día los faraones desaparecerían, probablemente se habría quedado de piedra. «¿Cómo vamos a vivir sin un faraón? ¿Quién garantizará el orden, la paz y la justicia?» Si hubiéramos dicho a personas de la Edad Media que al cabo de unos pocos siglos Dios estaría muerto, se habrían horrorizado. «¿Cómo vamos a vivir sin Dios? ¿Quién dará sentido a la vida y nos protegerá del caos?» En retrospectiva, muchos creen que la caída de los faraones y la muerte de Dios fueron acontecimientos positivos. Quizá el hundimiento del humanismo también sea beneficioso. Por lo general, la gente teme el cambio porque teme lo desconocido. Pero la única y mayor constante de la historia es que todo cambia.
Yuval Noah Harari (Homo Deus: Breve historia del mañana)
La aparición de problemas que son en esencial globales, como el deshielo de los casquetes polares, socava cualquier legitimidad que les quede a los estados-nación independientes. Ningún Estado soberano será capaz de librarse por sí solo del calentamiento global. El Mandato del Cielo chino lo confirió el Cielo para resolver los problemas de la humanidad. El Mandato del Cielo moderno lo dará la humanidad para resolver los problemas del cielo, como el agujero de la capa de ozono y la acumulación de gases de efecto invernadero. El color del imperio global bien pudiera ser verde. En 2014, el mundo todavía está fragmentado políticamente, pero los estados cada vez tienen menos independencia. Ninguno de ellos es realmente capaz de ejecutar políticas económicas independientes, de declarar y sostener guerras a su antojo, ni incluso de gestionar sus propios asuntos internos como le plazca. Los estados se hallan cada vez más abiertos a las maquinaciones de los mercados globales, a la interferencia de las compañías y organizaciones no gubernamentales globales, y a la supervisión de la opinión pública global y al sistema judicial internacional. Los estados se ven obligados a amoldarse a los estándares globales de comportamiento financiero, política ambiental y justicia. Corrientes enormemente profundas de capital, trabajo e información remueven y modelan el mundo, con una desatención creciente por las fronteras y las opiniones de los estados. El imperio global que se está forjando ante nuestros ojos no está gobernado por ningún Estado o grupo étnico particulares. De manera muy parecida al Imperio romano tardío, está gobernado por una élite multiétnica, y se mantiene unido por una cultura común e intereses comunes. En todo el mundo, cada vez hay más emprendedores, ingenieros, expertos, eruditos, abogados y gestores que son llamados a unirse al imperio. Tienen que sopesar si responder a la llamada imperial o permanecer leales a su Estado y su gente. Y cada vez son más los que eligen el imperio.
Yuval Noah Harari (Sapiens. De animales a dioses: Una breve historia de la humanidad)
Agustín[83] dice: “La justicia de los santos en este mundo consiste más en el perdón de los pecados que en la perfección de la virtud”[84]
Chapel Library (El evangelio de la gracia de dios (Spanish Edition))
El hambre, junto con la obesidad, el desperdicio obsceno y la degradación ambiental atroz, es el subproducto de nuestro sistema alimentario descompuesto
Kate Kilpatrick (Cultivar un futuro mejor: Justicia alimentaria en un mundo con recursos limitados)
Inversores que toman los mercados de materias primas por un casino, para quienes los alimentos son simplemente un activo financiero más -como las acciones, los bonos o los títulos hipotecarios
Kate Kilpatrick (Cultivar un futuro mejor: Justicia alimentaria en un mundo con recursos limitados)
Cuando un abogado defiende al inocente, está mostrando la justicia de aquel que define lo bueno. Cuando una madre arrulla a su hijo, refleja el cuidado del Padre perfecto. Cuando un conserje limpia una habitación, expresa que el Dios que diseñó el universo es un Dios de orden. Cada labor, remunerada o no, visible o privada, es una oportunidad de hacer resplandecer en el mundo la imagen de aquel que lo creó y lo sostiene.
Ana Avila (Aprovecha bien el tiempo: Una guía práctica para honrar a Dios con tu día (Spanish Edition))
La mercantilización de la agricultura. Una peligrosa obsesión romántica con la agricultura campesina. Insuficiente inversión en soluciones tecnológicas, como la biotecnología. El crecimiento desbocado de la población.
Kate Kilpatrick (Cultivar un futuro mejor: Justicia alimentaria en un mundo con recursos limitados)
Quizas prete el lector: "¿Que podre hacer to personalmente para que estas cosas horrendas no se repitan?" Yo no soy entendida en política ni economista. Soy simplemente una mujer que padeció, que perdió a su marido, a sus padres, a sus hijos y a sus amigos. Yo sé que el mundo tendrá que compartir colectivamente la responsabilidad. Los alemanes pecaron criminalmente, pero lo mismo hicieron las demás naciones, aunque solo fuera por negarse a creer y no afanarse dia u noche en salvar a los desventurados y desposeídos por cuantos medios estuviesen a su alcance. Sé que si la gente de todo el mundo se propone que de ahora en adelante reine una justicia indivisible y que no haya más Hitlers, algo se conseguirá. Indudablemente, todos aquellos cuyas manos se hayan manchado de sangre nuestra, bien sea directa o indirectamente, tienen que pagar por los crímenes que han cometido, lo mismo si son hombres que si son mujeres. Si no se hace así, constituirá un verdadero ultraje para millones de muertos inocentes.
Olga Lengyel (Los hornos de Hitler (Spanish Edition) by Olga Lengyel (2013-02-28))
Sabiosultan, El Soneto Me preguntan ¿creo en el destino? Claro que sí, lo estás mirando. Yo soy el destino, de la humanidad; Yo soy el destino del mundo entero. Yo soy el puente – entre todo, Ciencia, poesía, filosofía, todo. Yo soy el puente entre todo y todos, Soy el puente entre corazones vivos. No soy un siervo del intelecto, No soy un siervo de la tradición. Soy un soldado del valle de la vida, Más allá de las riñas del sentido muerto. ¿Quién soy? O mejor aún, ¿qué soy? Soy una chispa de razón templada por la calidez. Yo soy valentía atemperada por la humildad, Yo soy la justicia atemperada por la conciencia. No soy ni hombre ni mujer, No soy ni mente ni máquina; No soy ni cabeza ni corazón, No soy ni cuerpo ni columna. Sólo soy esa - esa verdad eterna, Que supera todos los prejuicios y falacias. Sólo soy esa - esa luz incorruptible, Que brilla como prueba de la humanidad unida.
Abhijit Naskar (Bulletproof Backbone: Injustice Not Allowed on My Watch)
¡Viva la Familia Mundial! (Soneto 1142) Naskar el científico dice que, La ciencia que no eleva la condición humana, no es ciencia, es superstición. Naskar el monje dice que, La inclusión es iluminación, la discriminación es engaño. Naskar el filósofo dice que, Es mejor perder la verdad que perder la humanidad - Es mejor perder la verdad que perder el amor. Naskar el sufí dice que, Siéntete a ti mismo hasta que no sientas nada pero el amor. Naskar el humanista dice que, No me importa tu creencia o incredulidad, solo importa, tu comportamiento con los demás. Naskar el humanitario dice que, Los humanos debemos ganarnos nuestra admisión en la raza humana con acciones humanas. El espíritu de amor habla de amor, más allá de toda fe y razón; El odio es sólo una señal de estrechez. Cuando te expandes en corazón y alma, el mundo entero se vuelve pariente.
Abhijit Naskar (Bulletproof Backbone: Injustice Not Allowed on My Watch)
No midas las proporciones de mi cuerpo. No te fijes en mi forma de hablar. Si descubres todo y me comparas, siempre pierdo. Siempre soy la foto en negativo. Por eso siempre me mantengo alejada de los grupos de personas. Siento que si me comparan yo soy la peor, una deforme criatura monstruosa. Siempre es pelos más o pelos menos. Calculo la musculatura y la grasa corporal. Nunca aprendí lo que el resto aprendió. Si ahora mismo me muriera, ni los gusanos se atreverían a comerme. Mido mi cuerpo, centímetros de más y centímetros de menos. Nunca es como los demás. Mido los colores de mi cuerpo, mi piel, mi cabello, mis lunares. Sé de memoria todas las líneas que dibujan mi cuerpo, sé donde hay borrones donde tuvo que haber trazo y no hubo nada. Cuento y veo la forma de mis dientes, la forma, el color y la textura de mis labios, la forma de mi cara y la dificultad de mis ojos. Entre comparar y comparar descubro mi rara resistencia corporal y mi tolerancia al dolor irregular. No quiero que te fijes en mí y en mi extravagancia, porque sé que no vale nada, no es nada especial, no vale la pena ni el esfuerzo. No quiero que compares mi movimientos y gestos con los de los demás, ya sé que nunca serán los mismos. No me pidas que toque tu cuerpo, no puedo, no sé, y si lo hago, al comparar descubrirás que lo hago todo mal. No lo puedo hacer como los demás, como a ti te gusta, lo haría de un modo equivocado y diferente, como todo lo que hago. No me dirijas la palabra, no sé cómo contestar a un saludo. Nunca sé qué contestar a las preguntas. No puedo ordenar mi propia historia para contarla, hasta se me confunde y olvido que en algún momento tuve que nacer. Siempre que me comparan, soy la peor opción, ese errar que da vergüenza. Siempre recuerdo que moriré sola y espero hacerlo bien. Estar junto a mí es pérdida segura sin posibilidad de recobrar ninguna cosa. Conmigo no es nada seguro y todo es riesgo. No puedo hacer grandes cosas. No puedo con mis manos derribar árboles ni construir edificios. No puedo hacer grandes cosas. No puedo resolver ecuaciones complicadas ni tengo un pensamiento innovador que ilumine el camino al resto. No soy un ejemplo a seguir. Nadie se atreve a mirarme, a hablarme, a tocarme, a nombrarme. Los entiendo totalmente. Comparo las ventajas que todos tienen sobre mí por tener un sexo definido. Todo ese error, todo ese desvío, toda esa fatalidad, toda esa toxicidad, soy yo. Valiente de existir y pedir tu cariño sin esperar nada, sin ofrecer nada. No tengo miedo. Sé que mi presencia es la falta, el abismo tremendo. Mi existencia es deconstrucción, potencia corrosiva; la multiplicación cero soy yo. Valiente al mirar tu cara y pedir que te quedes un momento más junto a mí, sabiendo que si me comparas pierdo siempre. Pienso en esas ventajas insuperables, como la genética, el dinero, la salud, el acceso al conocimiento, la política y la justicia. Ventajas tan grandes como la suerte que no tengo y nunca tendré. No puedo hacer grandes cosas. No puedo con mis piernas correr muy rápido ni muy lejos y con mis ojos no tengo buena puntería. No puedo hacer grandes cosas. No puedo salvar al mundo de una bomba atómica ni mucho menos de la contaminación. Todo ese error, todo ese desvío, toda esa fatalidad, toda esa toxicidad soy yo. Valiente de existir y pedir tu cariño sin esperar nada, sin ofrecer nada. No tengo miedo. Sé que mi presencia es la falta, el abismo tremendo. Mi existencia es deconstrucción, potencia corrosiva; la multiplicación cero soy yo. Valiente al mirar tu cara y pedir que te quedes un momento más junto a mí, sabiendo que si me comparas pierdo siempre. Sé que te arrepentirás, pero tengo que intentarlo, entiéndeme, lo sé: perderé.
Mara Rita (Me Arde)
Basta ya! ¡Basta ya de risas! ¡Que no se ría nadie! ¡Que no se ría nadie! Mi sangre de Clown vale tanto como la sangre de los cristos. ¡Yo no soy un payaso! ¡Yo Soy Prometeo! Vengo de la casta de los viejos redentores del Mundo, y he dado mi sangre, no para hacer reír a los Hombres y a los Dioses, sino para fecundar el yermo. ¿Entendéis ahora? Don Quijote es el poeta Prometeico que se escapa de su crónica y entra en la Historia hecho símbolo y carne, vestido de payaso y gritando por todos los caminos: ¡Justicia! ¡Justicia! ¡Justicia!… Sólo la risa del Mundo, abierta y rota como un trueno, le responde. ¡Oh, paradoja monstruosa!
León Felipe (Nueva Antología Rota)
En la redefinición de Iglesia se acentuó la visión como pueblo de Dios, y no como simple sociedad jurídica: todos los católicos y no solo la jerarquía tienen responsabilidad de la vida de la Iglesia, con lo que se pasaba de una visión más piramidal y autoritaria a otra más fraternal y comunitaria. De este estrechamiento humano o acentuación más «democrática» surgió la importancia dada a las conferencias episcopales y a la colegialidad. Se creaba el Sínodo en Roma, como consulta episcopal del Papa, y los consejos presbiterales y pastorales en las diócesis. La liturgia se acercó al pueblo con las reformas y traducciones a la lengua vernácula. De una postura de encasillamiento dentro de la institución eclesial se pasó a un reconocimiento de la autonomía de las realidades humanas, haciendo suyos «los gozos, las esperanzas, las tristezas y las angustias» de los hombres, con una proyección hacia los derechos humanos y compromiso con la justicia. El giro no se daría sin dolor. Y enseguida se inició la crisis interna, que se inscribía dentro de la crisis mundial: crisis en la obediencia, las vocaciones, la identidad del sacerdote, la vida familiar y sexual. Se estrenaba libertad y se ejercía contestación. Comenzaba a estallar un mundo nuevo.
Pedro Miguel Lamet (ARRUPE. Testigo del siglo XX, profeta del XXI (Jesuitas) (Spanish Edition))
Si por lo menos se le hubiesen reventado los oídos y no pudiese escuchar hacia dónde disparan los cañones… O si le hubiesen vaciado los ojos y no pudiese decir quién es el verdadero asesino de la justicia… O si le hubiesen cortado los brazos y no pudiese tocar el cadáver agarrotado del mundo… ¡Ah! ¡Si yo estuviese ciego y sordo y con las mangas de la camisa vacías, movidas por el viento, clavado en medio de una viña, asustando a los pájaros!… ... Os entrego mi silla, mis honores y… mis honorarios. O mejor, degradadme vosotros, honradme, degradándome vosotros,
León Felipe (Nueva Antología Rota)
Yo no soy nadie. Y no obstante, estas manos, mis antenas de hormiga, han ayudado a clavar la lanza en el costado del mundo y detrás de la lupa de la luna hay un ojo que me ve como a un microbio royendo el corazón de la Tierra. ... El agua, por ejemplo, es más noble que yo. Por eso las estrellas se duermen en el mar y mi frente romántica es áspera y opaca. Detrás de mi frente —filósofos, escuchad esto bien—, detrás de mi frente hay un viejo dragón: el sapo negro que saltó de la primera charca del mundo y está aquí, aquí, aquí… agazapado en mis sesos, sin dejarme ver el Amor y la Justicia.
León Felipe (Nueva Antología Rota)
si no es ahora, ahora que la justicia tiene menos, infinitamente menos categoría que el estiércol; si no es ahora… ¿cuándo se pierde el juicio? Respondedme, loqueros, ¿cuándo se quiebra y salta roto en mil pedazos el mecanismo del cerebro? Ya no hay locos, amigos, ya no hay locos. Se murió aquel manchego, aquel estrafalario fantasma del desierto y… ¡Ni en España hay locos! ¡Todo el mundo está cuerdo, terrible, monstruosamente cuerdo!… ¡Qué bien marcha el reloj! ¡Qué bien marcha el cerebro! Este reloj…, este cerebro, tic-tac, tic-tac, tic-tac, es un reloj perfecto…, perfecto, ¡perfecto!
León Felipe
. Graba esto en tu memoria, muchacho: un mundo se sostiene por cuatro cosas. —Alzó cuatro nudosos dedos—: la erudición de los sabios, la justicia de los poderosos, las plegarias de los justos y el coraje de los valerosos. Pero eso no vale nada... —Cerró los dedos en un puño— sin un gobernante que conozca el arte de gobernar. ¡Haz de esto tu ciencia!
Frank Herbert (Dune (Dune, #1))
E han de considerar los curiosos que esto leyeren tan grandes hechos que entonces hicimos: dar con los navíos al través; lo otro, osar entrar en tan fuerte cibdad, teniendo tantos avisos que allí nos habían de matar desque dentro nos tuviesen; lo otro, tener tanta osadía; osar prender al gran Montezuma, que era rey de aquella tierra, dentro en su gran cibdad y en sus mismos palacios, teniendo gran número de guerreros de su guarda; y lo otro, osar quemar sus capitanes delante de sus palacios y echalle grillos entre tanto que se hacía la justicia. Muchas veces, agora que soy viejo, me paro a considerar las cosas heroicas que en aquel tiempo pasamos, que me parece las veo presentes, y digo que nuestros hechos que no los hacíamos nosotros, sino que venían todos encaminados por Dios. Porque ¿qué hombres habido en el mundo que osasen entrar, cuatrocientos soldados, y aun no llegamos a ellos, en una fuerte cibdad como es México, que es mayor que Venecia, estando apartados de nuestra Castilla sobre más de mil y quinientas leguas, prender a un tan gran señor y hacer justicia de sus capitanes delante dél?
Bernal Díaz del Castillo (Historia verdadera de la conquista de la Nueua España 1632 [Leather Bound])
Y don Raúl, doblegado y aturdido y herido de muerte por un revoltijo de enfermedades, sólo atinó a contestarle «ustedes lo que están es metiéndome venenos e infectándome con sus virus a mí porque saben muy bien que si yo sigo vivo voy a seguir denunciando que a mi hijo me lo mataron porque él un día me llamó a contarme que acababa de tener a una hija que ya no quieren dejarnos ver y no sabemos dónde está y también a decirme “papá: yo me voy a salir del ejército porque esto se está poniendo muy feo” y “papá: aquí quieren que yo mate a unos muchachos que no han hecho nada para hacerlos pasar por guerrilleros y yo eso sí no lo voy a hacer”, y yo le contesté “mijo: usted es el que sabe bien qué hacer”, y entonces, como él se negó a matar a los hijos de las madres de Soacha, a él lo empezaron a envenenar como ustedes me están envenenando a mí y se lo llevaron a El Tarra maniatado y atontado con drogas para pegarle un tiro en la cabeza que le destrozó el cráneo, y luego el puntero de la cuadrilla le pegó un tiro al puntero que me lo mató para echarle tierra al asunto, y todo era para que mi hijo no saliera a la calle ni a la justicia a decirle a la gente, que la gente cree lo que quiere creerse, que los soldados de Colombia, por órdenes de los altos mandos militares en colaboración con los presidentes de la república que hemos tenido en los últimos años, han estado asesinando muchachos inocentes con el objetivo de decirle al mundo que están ganando esta guerra pero esta guerra son ellos matando inocentes nada más para que esto no se acabe nunca y se nos vaya la vejez a las unas y a los otros pidiéndole a Dios por las almas de todos y para que se me vaya a mí la eternidad diciéndoles a todos que he denunciado el crimen del Mono en El Ubérrimo y en la Plaza de Bolívar y en el Capitolio y en la Casa de Nariño y en la Fiscalía y en la Procuraduría y en la Defensoría y en la Personería y en las organizaciones de derechos humanos y en la ONU y en la Corte Penal Internacional, que en ninguna parte del Estado han querido investigar nada de nada porque todos son vendidos y todos son cómplices callados con plata detrás de este derramamiento de sangre como yo digo con mis volantes y con las pancartas —que yo puse en mi camión que me compré después de vender todo lo que trabajé yo en la vida y lo tuve que parquear en Bogotá porque ya me había ido por todo el país—, y siempre han querido callarme a mí, a Raúl Carvajal Pérez, con platas y con calabozos y con amenazas de muerte, pero ya están es matándome porque están convencidos de que lo único que les queda es mi muerte».
Ricardo Silva Romero (El libro del duelo)
El cambio en el mundo comienza con el cambio en tu vecindario. Y el cambio en tu vecindario comienza con un cambio en ti, un cambio de la indiferencia a la responsabilidad, un cambio de la supervivencia sin propósito a una vida plena y llena de propósito.
Abhijit Naskar
Las virtudes no mantienen la misma relación con los bienes internos que con los externos: “la posesión de las virtudes, y no solo su apariencia y simulacro, es necesario para lograr los bienes internos (...) en cambio, la posesión de las virtudes muy bien puede impedirnos el logro de los bienes externos”65. Lo anterior se presenta entonces como un desafío para quienes de verdad quieran asumir vivir honestamente, puesto que las virtudes se presentan como un obstáculo potencial para esta cómoda ambición como lo afirma MacIntyre: “los bienes externos no son típicos objetos de deseo, sino bienes auténticos que nadie puede despreciar sin caer en cierto grado de hipocresía (...), pues el cultivo de la veracidad, la justicia y el valor, siendo el mundo como es contingente, a menudo nos impedirá ser ricos, famosos y poderosos.
Alasdair MacIntyre (After Virtue)
Hay a todas horas en el mundo una incógnita que ha de despejarse, una X, una grande X que desafía todos los recursos del álgebra. Quería la esfinge antigua que no hubiera respuesta. Hay una respuesta, y podemos matar a la esfinge. ¿Qué hacer para adivinarla? ¿Se aproxima un pobre en demanda de hospitalidad? ¡Si fuese el ángel del Señor! Pero, también, ¡si fuese un asesino! ¿Qué hacer para adivinarlo? ¿Es menester un esfuerzo mental, un acto asombroso de inteligencia? No, he ahí el secreto. Adivinar, es amar. Preguntad a cuantos han amado cómo lo han hecho. Han amado, ahí está todo. La inteligencia, entregada a sí misma, se lanza a navegar por un océano de pensamientos. Se plantea ante ella el problema de la vida, y, si la aguja imantada ha perdido la ciencia del norte, si la brújula está loca, puede muy bien llegar la inteligencia, prácticamente, a la duda; teóricamente, a la fatalidad. La esfinge antigua, es la inteligencia impotente concluyendo en la desesperación y precipitándose en la muerte. Mejor sabe el amor su camino. Prácticamente, llega a la luz; teóricamente, a la justicia.
Ernest Hello (L'homme: La Vie--La Science--L'art)
Isaías 64 1[*]¡Oh, si irrumpieras desde el cielo y descendieras! ¡Cómo temblarían los montes en tu presencia! 2[*]Así como el fuego hace que arda la leña y que hierva el agua, tu venida haría que las naciones temblaran. ¡Entonces tus enemigos se enterarían de la razón de tu fama! 3 Cuando descendiste hace mucho tiempo, hiciste obras temibles, por encima de nuestras mayores expectativas. ¡Y cómo temblaron los montes! 4 Desde el principio del mundo, ningún oído ha escuchado, ni ojo ha visto a un Dios como tú, quien actúa a favor de los que esperan en él. 5 Tú recibes a quienes hacen el bien con gusto, a quienes siguen caminos de justicia. Pero has estado muy enojado con nosotros, porque no somos justos. Pecamos constantemente; ¿cómo es posible que personas como nosotros se salven? 6 Estamos todos infectados por el pecado y somos impuros. Cuando mostramos nuestros actos de justicia, no son más que trapos sucios. Como las hojas del otoño, nos marchitamos y caemos, y nuestros pecados nos arrasan como el viento. 7 Sin embargo, nadie invoca tu nombre ni te ruega misericordia. Por eso tú te apartaste de nosotros y nos entregaste[*] a nuestros pecados.
Anonymous (Santa Biblia NTV (Spanish Edition))
Amor Armada (El Soneto) El dolor fortalece el corazón, La catástrofe fortaleció la integridad. La estrechez de miras arruina la existencia, En las personas encontraremos la felicidad. Las nubes son sólo heraldos del sol, Las heridas de hoy son la corona del mañana. Cuéntame de tu dolor, quiero escuchar, El apego es un ungüento para la humanidad. Sí, estoy ebrio, pero no de vino, sino de cultura. Estoy bajo la influencia, no de drogas, sino de idiomas. No quiero alcohol, no quiero cocaína. Mártir para el mundo, ¡soy Amor Armada!
Abhijit Naskar (Abigitano: El Divino Refugiado (Spanish Edition))
En una crisis, un civil se pregunta: ¿cómo puedo salvar a mi familia?; un político se pregunta: ¿cómo puedo salvarme a mí mismo?; un humanitario se pregunta: ¿cómo puedo salvar al mundo?
Abhijit Naskar (Generacion Justicia: Día de Los Vivos, Abigitano 2)
Hay amor en el mundo cuando el amor es tu mundo.
Abhijit Naskar (Generacion Justicia: Día de Los Vivos, Abigitano 2)
Invertir en un nuevo futuro para la agricultura significa invertir más y de manera más sensata para que los mil millones de productores en pequeña escala de todo el mundo (muchos de ellos mujeres) puedan disponer de la tierra y los recursos que necesitan para cultivar suficientes alimentos para ellos mismos y para otros.
Kate Kilpatrick (Cultivar un futuro mejor: Justicia alimentaria en un mundo con recursos limitados)
Según la natural lealtad de nuestro corazón, estamos siempre hablando de nuestra propia bondad y nuestros méritos, tenazmente apegados a la idea de que debe haber algo de bueno en nosotros para merecer que Dios se ocupe de nuestras personas. Pero Dios que bien conoce todos nuestros engaños, sabe que no hay bondad ninguna en nosotros y declara que "no hay justo, ni aun uno" (Romanos 3:10). Él sabe que "todas nuestras justicias son como trapos de inmundicia" (Isaías 64:6); y por lo mismo el Señor Jesús no vino al mundo para buscar bondad y justicia entre los hombres, sino para llevar consigo bondad y justicia para entregárselas a las personas que carecen de ellas. No vino porque éramos justos, sino para hacemos justos, justificando al impío.
Charles Haddon Spurgeon (Solamente por gracia (Spanish Edition))
En un mundo que prefiere la seguridad a la justicia, hay cada vez más gente que aplaude el sacrificio de la justicia en los altares de la seguridad. En las calles de las ciudades, se celebran las ceremonias. Cada vez que un delincuente cae acribillado, la sociedad siente alivio ante la enfermedad que la acosa. La muerte de cada malviviente surte efectos farmacéuticos sobre los bienvivientes. La palabra farmacia viene de phármakos, que era el nombre que daban los griegos a las víctimas humanas de los sacrificios ofrendados a los dioses en tiempos de crisis.
Eduardo Galeano (Upside Down: A Primer for the Looking-Glass World)
La obra de Juan el Bautista, y la de aquellos que en los últimos días saldrán con el espíritu y el poder de Elías para despertar a la gente de su apatía, en muchos sentidos es la misma. Su obra es la clase de obra que debe hacerse en este tiempo. Cristo vendrá por segunda vez a juzgar al mundo con justicia.—The Southern Work, 21 de marzo de 1905.
Anonymous
—Amigo mío, lo hecho está bien hecho; y mejor andaría el mundo si, en casos dados, no fuesen leguleyos trapisondistas y demás cuervos de Temis, sino duendes, los que administrasen justicia. Y con esto, buenas noches y que Dios y Santa María nos tengan en su santa guarda y nos libren de duendes y remordimientos.
Ricardo Palma (Tradiciones peruanas (Spanish Edition))
Cuando vayas a algún lugar en este mundo que no te satisfaga recuerda que tus ojos no pueden estar en las cosas temporales sino en las cosas eternas; que tú debes perseguir el agradar a Dios, y seguir todo esto que Pablo menciona: la justicia, la piedad y tener amistad con Dios; la fe, el confiar en Dios; el amor, el responder a Dios; la paciencia, el esperar en Dios; la mansedumbre, el ordenar tu vida bajo la mano poderosa de Dios y esperar que él te exalte para su honra y honor.
Hector Hermosillo (El aprendiz: 1 y 2 de Timoteo. Hoy (De lo celestial a lo terrenal) (Spanish Edition))
Y todo esto se da en Santiago tal vez por ser el símbolo de todos los problemas de Chile, de esta estrecha faja entre mar y montaña, que tiene 3.500 kilómetros de largo, que comienza en el norte con el desierto y termina en el sur con los hielos del polo, con el océano Pacífico al oeste y la Cordillera de los Andes al este, que la separan, al igual que el polo y el desierto, del resto del mundo, al que anhela unirse, no sólo en el concierto deportivo sino también en la búsqueda de la verdad y de la justicia, que no es la que los comunistas locales auspician, pero tampoco la que trata de darle la actual clase dirigente.
Anonymous
A finales de 2009 hubo un pequeño alboroto mediático en España al descubrirse que la Junta de Extremadura, en manos de los socialistas, había organizado, dentro de su plan de educación sexual de los escolares, unos talleres de masturbación para niños y niñas a partir de los catorce años, campaña a la que bautizó, no sin picardía,El placer está en tus manos. Ante las protestas de algunos contribuyentes de que se invirtiera de este modo el dinero de los impuestos, los voceros de la Junta alegaron que la educación sexual de los niños era indispensable para «prevenir embarazos no deseados» y que las clases de masturbación servirían para «evitar males mayores». En la polémica que el asunto provocó, la Junta de Extremadura recibió las felicitaciones y el apoyo de la Junta de Andalucía, cuya Consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, anunció que en Andalucía comenzaría en breve una campaña similar a la extremeña. De otro lado, un intento de acabar con los talleres de masturbación mediante una acción judicial que puso en marcha una organización afín al Partido Popular y bautizada, con no menos chispa, Manos Limpias, fracasó de manera estrepitosa pues la Fiscalía del Tribunal de Justicia de Extremadura no dio curso a la denuncia y la archivó. ¡A masturbarse, pues, niños y niñas del mundo! Cuánta agua ha corrido en este planeta que todavía nos soporta a los humanos desde que, en mi niñez, los padres salesianos y los hermanos de La Salle —colegios en los que estudié— nos asustaban con el espantajo de que los «malos tocamientos» producían la ceguera, la tuberculosis y la imbecilidad. Seis décadas después ¡clases de paja en las escuelas! Eso es el progreso, señores. ¿Lo es, de veras? La curiosidad me acribilla el cerebro de preguntas. ¿Pondrán notas? ¿Tomarán exámenes? ¿Los talleres serán teóricos o también prácticos? ¿Qué proezas tendrán que realizar los alumnos para sacar la nota de excelencia y qué fiascos para ser desaprobados? ¿Dependerá de la cantidad de conocimientos que su memoria retenga o de la velocidad, cantidad y consistencia de los orgasmos que produzca la destreza táctil de chicos y chicas? No son bromas. Si se tiene la audacia de abrir talleres para iluminar a la puericia en las técnicas de la masturbación, estas preguntas son pertinentes.
Anonymous
Justicia e injusticia no son facultades ni del cuerpo ni del espíritu. Si lo fueran, podrían darse en un hombre que estuviera solo en el mundo, lo mismo que se dan sus sensaciones y pasiones.Son, aquéllas, cualidades que se refieren al hombre en sociedad, no en estado solitario
Anonymous
Puesto que este bautismo comporta un reconocimiento de la culpa y una petición de perdón para poder empezar de nuevo, este sí a la plena voluntad de Dios encierra también, en un mundo marcado por el pecado, una expresión de solidaridad con los hombres, que se han hecho culpables, pero que tienden a la justicia. Sólo a partir de la cruz y la resurrección se clarifica todo el significado de este acontecimiento.
Pope Benedict XVI (Jesús De Nazaret (Jesus de Nazareth) (Spanish Edition))
Si alguna vez te conviertes en la mitad de ti mismo, muchacho, y te lo deseo, comprenderás cosas que escapan a la normal inteligencia de los cerebros enteros. Habrás perdido la mitad de ti y del mundo, pero la mitad que quede será mil veces más profunda y valiosa. Y también tú querrás que todo esté demediado y desgarrado a tu imagen, porque belleza y sabiduría y justicia existen sólo en aquello que está hecho a trozos.
Italo Calvino (Il visconte dimezzato)
yo no me avergüenzo del evangelio, no lo puedo hacer porque el evangelio es la historia de Jesús, escrita con Su sangre; es buenas nuevas de salvación; es el único camino de la salvación para el hombre; es la oferta de Dios para un hombre perdido; es el poder de Dios en acción; es la benevolencia de Dios para pecadores; y es la justicia (carácter moral de Dios) revelada por fe y para fe. Por tanto, ‘no me avergüenzo del evangelio”.
Miguel Núñez (Enseñanzas que transformaron el mundo: Un llamado a despertar para la iglesia en Latino América. (Spanish Edition))
Nada es justo. A lo máximo que se puede aspirar es a que sea lógico. La justicia es una rara enfermedad en un mundo por lo demás sano como un roble.
Carlos Ruiz Zafón
La justicia no es cuestión de hombres. Existe la justicia de las leyes ciegas y crueles y luego hay, quizás, alguna justicia más elevada, pero ésa no la entiendo. Siempre he tenido la sensación de que vivo en este mundo al margen de la justicia.
Milan Kundera
nuestros pecados, purifícame de todas mis faltas y renueva mi corazón para que brille cada vez más en mí la imagen del hombre nuevo creado según la justicia y la santidad. Por tu Sangre, signo de reconciliación con Dios y entre los hombres, haz de mí un instrumento dócil de comunión fraterna. Por el poder de tu Sangre, prueba suprema de tu caridad, dame la valentía de amarte así como a mis hermanos, hasta dar mi vida. Oh Jesús redentor, ayúdame a llevar mi cruz de cada día, para que mi pequeña gota de sangre, unida a la tuya, participe en la redención del mundo. Oh Sangre Divina, cuya gracia vivifica el Cuerpo Místico: haz de mí una piedra viva de tu Iglesia. Dame la pasión por la unidad entre los cristianos. Pon en mi corazón un gran celo por la salvación de mi prójimo. Suscita en la Iglesia muchas vocaciones misioneras para que sea dado a todos los pueblos conocer, amar y servir al verdadero Dios. Oh Preciosísima Sangre, símbolo de liberación y de vida nueva, concédeme perseverar en la fe, la esperanza y la caridad para que, marcado con tu sello, pueda dejar el exilio de esta vida, entrar en la tierra prometida del paraíso y cantar con todos los redimidos tus alabanzas en la eternidad. Amén».
María Vallejo-Nágera (De María a María: Puerta del Cielo (Spanish Edition))
Ese «banquete de la vida» no se puede disfrutar sin la paz, cuya realización se consigue, en efecto, a través de la justicia social y la práctica de las virtudes propias de la convivencia, que la mutua dependencia ha de poner en juego. Esa invitación de Dios al «banquete de la vida» establece la conexión entre la solidaridad y la virtud de la caridad, «que es signo distintivo de los discípulos de Cristo».
Robert Hugh Benson (Señor del mundo (Astor) (Spanish Edition))
—No creo que usted haya estado alguna vez en el Radch. No creo que conozca a muchos radchaais personalmente o que los conozca bien. Usted lo analiza todo desde el exterior y lo único que ve es conformismo y lavados de cerebro. Filas y filas de soldados idénticos con armaduras plateadas, sin voluntad ni mente propias. Es verdad que incluso el radchaai más humilde se considera infinitamente superior a cualquier no ciudadano. Lo que las personas como Seivarden piensan de ellas mismas es insoportable. —Strigan resopló sarcástica—. Pero son personas y tienen opiniones diferentes sobre las distintas cuestiones. —Sí, pero sus opiniones no tienen valor. Anaander Mianaai establece cómo tienen que ser las cosas y así es como son. Yo estaba convencida de que esta cuestión era más complicada de lo que ella creía. —Sí, pero esto no hace más que aumentar la frustración que sienten. ¡Imagíneselo! Imagínese lo que es que el propósito de su vida sea conquistar otros mundos y expandir el espacio radchaai. Lo único que usted percibe es muerte y destrucción a una escala inimaginable, pero lo que ven los radchaais es la expansión de la civilización, la expansión de la justicia y la corrección y un beneficio para todo el universo. La muerte y la destrucción son los efectos secundarios e inevitables de este bien único y supremo. —La verdad es que no estoy muy de acuerdo con ese punto de vista. —Y yo no le pido que lo haga. Solo le pido que se detenga y observe durante un instante. Imagínese que no solo su vida, sino también las vidas de todos los de su casa y las de sus antepasados durante mil años o más han servido a ese fin, a esa idea. Es la voluntad de Amaat. Dios lo desea. El universo mismo lo desea. Entonces, un día, alguien le dice que estaba equivocada y, a partir de entonces, su vida nunca vuelve a ser como la había imaginado. —Esto le sucede a la gente continuamente —repuso Strigan mientras se levantaba de la silla—. Con la diferencia de que la mayoría de nosotros no nos engañamos diciéndonos que nuestro destino es extraordinario. —Esa diferencia es significativa —señalé yo.
Ann Leckie (Ancillary Justice (Imperial Radch, #1))
Debo empezar por unas disculpas ("mal comienzo", decía mi abuela). ¿De qué tenemos que pedir perdón? ¿De qué nos van a perdonar? ¿De no morirnos de hambre? ¿De no callarnos en nuestra miseria? ¿De no haber aceptado humildemente la gigantesca carga histórica de desprecio y abandono? ¿De habernos levantado en armas cuando encontramos todos los otros caminos cerrados? ¿De no habernos atenido al Código Penal de Chiapas, el más absurdo y represivo del que se tenga memoria? ¿De haber demostrado al resto del país y al mundo entero que la dignidad humana vive aún y está en sus habitantes más empobrecidos? ¿De habernos preparado bien y a conciencia antes de iniciar? ¿De haber llevado fusiles al combate, en lugar de arcos y flechas? ¿De haber aprendido a pelear antes de hacerlo? ¿De ser mexicanos todos? ¿De ser mayoritariamente indígenas? ¿De llamar al pueblo mexicano todo a luchar de todas las formas posibles, por lo que les pertenece? ¿De luchar por libertad, democracia y justicia? ¿De no seguir los patrones de las guerrillas anteriores? ¿De no rendirnos? ¿De no vendernos? ¿De no traicionarnos? ¿Quién tiene que pedir perdón y quién puede otorgarlo? ¿Los que, durante años y años, se sentaron ante una mesa llena y se saciaron mientras con nosotros se sentaba la muerte, tan cotidiana, tan nuestra que acabamos por dejar de tenerle miedo? ¿Los que nos llenaron las bolsas y el alma de declaraciones y promesas? ¿Los muertos, nuestros muertos, tan mortalmente muertos de muerte "natural", es decir, de sarampión, tosferina, dengue, cólera, tifoidea, mononucleosis, tétanos, pulmonía, paludismo y otras lindezas gastrointestinales y pulmonares? ¿Nuestros muertos, tan mayoritariamente muertos, tan democráticamente muertos de pena porque nadie hacía nada, porque todos los muertos, nuestros muertos, se iban así nomás, sin que nadie llevara la cuenta, sin que nadie dijera, por fin, el "¡YA BASTA!", que devolviera a esas muertes su sentido, sin que nadie pidiera a los muertos de siempre, nuestros muertos, que regresaran a morir otra vez pero ahora para vivir? ¿Los que nos negaron el derecho y don de nuestras gentes de gobernar y gobernarnos? ¿Los que negaron el respeto a nuestra costumbre, a nuestro color, a nuestra lengua? ¿Los que nos tratan como extranjeros en nuestra propia tierra y nos piden papeles y obediencia a una ley cuya existencia y justeza ignoramos? ¿Los que nos torturaron, apresaron, asesinaron y desaparecieron por el grave "delito" de querer un pedazo de tierra, no un pedazo grande, no un pedazo chico, sólo un pedazo al que se le pudiera sacar algo para completar el estómago? ¿Quién tiene que pedir perdón y quién puede otorgarlo? ¿El presidente de la república? ¿Los secretarios de estado? ¿Los senadores? ¿Los diputados? ¿Los gobernadores? ¿Los presidentes municipales? ¿Los policías? ¿El ejército federal? ¿Los grandes señores de la banca, la industria, el comercio y la tierra? ¿Los partidos políticos? ¿Los intelectuales? ¿Galio y Nexos? ¿Los medios de comunicación? ¿Los estudiantes? ¿Los maestros? ¿Los colonos? ¿Los obreros? ¿Los campesinos? ¿Los indígenas? ¿Los muertos de muerte inútil? ¿Quién tiene que pedir perdón y quién puede otorgarlo?
Subcomandante Marcos
Escúchame, ¡escúchame, por favor! No puedo - no puedo hacerlo solo. Necesito te - el mundo necesita te - necesita tu corazón valiente, necesita tu alma amable, necesita tus ojos amorosos. Sin tu ayuda, no hay armonía - sin tu sacrificio, no hay progreso - sin tu conciencia, no hay nada. Recuerda siempre, mi amor - dolor del mundo es nuestro dolor. Cuando el mundo está en peligro, somos su milagro.
Abhijit Naskar (Sin Dios Sí Hay Divinidad: The Pastor Who Never Was)
No basta con que la antorcha de la libertad sea sostenida en alto por una sola mujer, cada ser humano debe sostener la antorcha en alto en todos los rincones del mundo.
Abhijit Naskar
existían hasta hace poco y que lo han cambiado todo. Las redes sociales, Twitter en particular, se han convertido en tribunales morales de los que todo el mundo está pendiente, más poderosos incluso que los tradicionales tribunales de justicia. Hablaremos de la difamación ritual, la cultura de la cancelación, la cultura del victimismo, el exhibicionismo moral y otros temas. Nadie quiere indignar a Twitter, la condena en redes equivale a la excomunión y la muerte social.
Pablo Malo Ocejo (Los peligros de la moralidad: Por qué la moral es una amenaza para las sociedades del siglo XXI (Spanish Edition))
Tu carácter es el reflejo de la disciplina que ejerces sobre tu persona. La templanza es el camino. Templanza en la mente, disciplina en el cuerpo, coraje en el espíritu y justicia en el mundo.
Ousmane Yade (Expándete: Redefiniendo la masculinidad moderna. Despierta y alcanza tus logros)
Al margen de esta memoria y de esta conexión entre el amor recibido y dado ya nada tiene sentido y todo se vuelve frágil, la vida ya no es misterio que revela al Eterno, sino enigma insensato y desmemoriado: más aún, lo llegamos a ser nosotros mismos y las relaciones que construimos, que, si no son misericordiosas, no tienen consistencia alguna, ni raíces ni futuro. Sin misericordia no existe amistad, pareja, familia, ternura, amor, sueños, futuro, pasión, fidelidad... Sin la misericordia explota el absurdo del egoísmo, de la autorreferencialidad, de la esclerocardia, del homo homini lupus, del mundo inhospitalario y sin piedad, de la conflictividad exasperada, de la rigidez que condena, del juicio inflexible que pone la ley por delante y por encima de la persona, de la arrogancia que no es capaz de comprender y compadecer, de la violencia psicológica de quien no perdona; de la justicia que, tras la coartada de la igualdad de todos frente a la ley, confunde al pecador con el pecado; de la rudeza mental que rechaza al diferente. Sin la misericordia, la historia del hombre queda incompleta como un drama que continúa en el tiempo, en busca de un equilibrio perdido, sin el cual es historia maldita. La memoria herida sigue aún dividida entre venganza, resentimiento, revancha, amnesia, reparación, fuga, desesperación... Y ciertos lugares quedan como emblemas de un mal que parecía imposible, pero que ha tenido lugar y que podrá volver a suceder[21].
Amedeo Cencini (LADRÓN PERDONADO. El perdón en la vida del sacerdote (Servidores y Testigos nº 159) (Spanish Edition))
la misericordia no excluye la justicia y la verdad, «ante todo tenemos que decir que la misericordia es la plenitud de la justicia y la manifestación más luminosa de la verdad de Dios»[90].
Pope Francis (Gaudete et exsultate. Exhortación apostólica sobre la llamada a la santidad en el mundo actual (Documentos MC) (Spanish Edition))
Él lo creó todo para que subsistiera*: las criaturas del mundo son saludables, no hay en ellas veneno de muerte ni el abismo* reina sobre la tierra, 15 porque la justicia es inmortal
Anonymous (Biblia de Jerusalén (Spanish Edition))
Otra cosa era entender que no basta con ser justos a sabiendas de que el mundo alrededor es inicuo. Nada es gratuito en la vida, nada bueno se alcanza sin trabajo ni riesgo. Y si en el mundo prevalecía la injusticia era porque muchos hombres, aun siendo justos, seguían creyendo que la justicia es un bien gratuito que otros deben llevarles a su puerta en vez de un trabajoso derecho que es preciso salir a buscar aun a costa de la propia vida.
Francisco Pérez de Antón
Por qué no debemos mezclar ciencia y moral? Porque la ciencia no nos puede decir lo que está bien y lo que está mal. El mundo de ahí fuera es amoral, no hay valores morales en la naturaleza. Como veíamos en el capítulo segundo, la moral es, en palabras de Oliver Scott Curry: «Un conjunto de estrategias biológicas y culturales para resolver los problemas de cooperación y conflicto de las sociedades humanas», es decir, es una adaptación humana para la cooperación. Ningún telescopio ni microscopio va a encontrar nunca valores morales ni ningún escáner va a encontrar derechos humanos en el cerebro. Como dice Harari en De animales a dioses: «No hay dioses en el universo, no hay naciones, no hay dinero, ni derechos humanos, ni leyes, ni justicia fuera de la imaginación común de los seres humanos».9 Por eso es un error hacer que los derechos dependan de los hallazgos científicos. Que hombres y mujeres tengan los mismos derechos no depende de que sus cerebros sean idénticos, y ningún descubrimiento científico puede cambiar nuestro valor moral de que los hombres y las mujeres tienen los mismos derechos. Debemos separar ciencia y moral como se separó en su día Estado y religión.
Pablo Malo Ocejo (Los peligros de la moralidad: Por qué la moral es una amenaza para las sociedades del siglo XXI (Spanish Edition))
Las historias no deberían vivirse para ser contadas. De hecho, la mayoría como fuegos fatuos-- se agotan en sí mismas. El lenguaje casi siempre está hecho con ese fuego. Se desea hasta que queda una señal que el viento esparce por los confines del mundo. Y tras esto, un cadáver. Entonces cuáles son las que quedan escritas. Quizá las que tratan de hacer justicia. Precisamente cuando los actos no están a la altura de las circunstancias. Cuando todo debe darse por ardido. Cuando la ternura nada habita. O cuando las circunstancias se vuelven inasumibles y aun así no queda otra que asumir. Os lo cuento con lágrimas en los ojos como de recién soñado.
Rodrigo García Marina
Tengo que manifestar mi gratitud al mundo musulmán por el concepto de Guerra Santa. El concepto de la guerra santa para una persona como yo que se define, con razón o sin ella, para bien o para mal, como un guerrero, es muy importante; porque a raíz, a partir del momento en que se introduce este concepto, los militares dejan de ser militares para convertirse en guerreros; la diferencia entre un militar y un guerrero es radical, es abismal: un militar vive de la guerra y, por tanto, fomenta las guerras, las inventa, las promociona; un guerrero, lo único que intenta, por su actividad de Justicia, de Fortaleza y de Templanza, es evitar precisamente los efectos de las guerras
Fernando Sánchez Dragó
Cuando el mundo está en peligro, somos su milagro.
Abhijit Naskar (Sin Dios Sí Hay Divinidad: The Pastor Who Never Was)
El Soneto Sufí Por tu ascension me converti en amante, Por tus derechos me converti en revolución. No me preguntes quien soy, Mírame a los ojos y encontrarás tu reflejo. Nuestro mundo es un mundo nuevo, El alma de este mundo es la conciencia. ¡Sin conciencia todos somos animales, Marcha Adelante, oh concienzudo, con Valentia! No hay otra religion que el amor, No hay otra nacionalidad que la humanidad. La historia del ser humano es una historia de bondad, Si no, la vida es una absoluta futilidad. Somos heroes cuando estamos unidos, Unidos por siempre, ya sea vivos o muertos.
Abhijit Naskar (Generation Corazon: Nationalism is Terrorism)
Si no te gusta el mundo en el que naciste, construye el mundo en el que deseas haber nacido.
Abhijit Naskar (Yarasistan: My Wounds, My Crown)
Eres Dios, eres diablo - Lo que decidas, ¡así será! Human destiny is human decision, Somos la iluminación en toda oscuridad. We are the illumination, We are the answer to our prayer. Karanlık bile korkacak bizden, When we rise as each other's keeper. Dolor del mundo es nuestro dolor. While the apes doze, human builds the road.
Abhijit Naskar (Insan Himalayanoğlu: It's Time to Defect)
Spangskritlish (Sonnet for Tomorrow's Citizen) जाग्रत, उत्तिष्ठ, जगत् स्कन्धे गृहाण, आत्मानं विस्मरतु, संसारस्य अश्रुमार्जयतु। द्वेषं हिंसां च सर्वं परित्यज्य, जाग्रत, उत्तिष्ठ, सुमनुष्य भवतु। Eres Dios, eres diablo - Lo que decidas, ¡así será! Human destiny is human decision, Somos la iluminación en toda oscuridad. We are the illumination, We are the answer to our prayer. Karanlık bile korkacak bizden, When we rise as each other's keeper. Dolor del mundo es nuestro dolor. While the apes doze, human builds the road.
Abhijit Naskar (Insan Himalayanoğlu: It's Time to Defect)
Este libro debió de ser dedicado a una de mis personales deidades, mas ella se me ha muerto, dejando este rubro vacío, sin nadie digno de ocuparlo... O quizá sea yo el que ha fenecido o trocado, quedándome poseído en una sempiterna danza solitaria que acusa no querer soltarme nunca, y que agrava, a plenitud, los lastres de la propia existencia. En todo caso, esto tenía dueña y yo habré de velar, hasta que mi hora llegue, que nadie irrumpa en su exclusivo recinto, acaso un jardín, jamás una tumba. A mi entender, el significado de un libro radica en que el propio libro desaparezca de la vista, en que se lo mastique vivo, se lo digiera e incorpore el organismo como carne y sangre que, a su vez, crean nuevo espíritu y dan nueva forma al mundo. Henry Miller, Trópico de Capricornio.
Paul Laurent (Summa ácrata. Ensayo sobre el individuo, su derecho, su justicia)
Los profetas nos llaman a la visión de una realidad subyacente más profunda, a «regocijo más allá de las paredes del mundo, más conmovedor que el dolor» (frase de Tolkien). Al darnos un vistazo del futuro y del presente cósmico, hacen que nos sea posible creer en un Dios que después de todo es justo. La justicia es esencial para los profetas, ya que la reputación de Dios descansa en si puede finalmente traer justicia a este mundo. Como una campana que tañe desde otro mundo, los profetas proclaman que no importa cómo parezcan las cosas ahora, no hay futuro en la maldad, sino solamente en el bien.
Philip Yancey (La Biblia Que Leyo Jesus)
La injusticia no destruirá nuestro mundo, la indiferencia ante la injusticia lo hará.
Abhijit Naskar (Operation Justice: To Make A Society That Needs No Law)
Me decía usted: «La grandeza de mi país no tiene precio. Cuanto contribuya a llevarla a cabo es bueno. Y en un mundo en el que ya nada tiene sentido, quienes, como nosotros, los jóvenes alemanes, tienen la fortuna de encontrarle uno al destino de su nación, deben sacrificárselo todo». Por aquel entonces contaba usted con mi cariño, pero en eso me distanciaba ya de usted. «No», le decía yo, «no puedo creer que haya que supeditarlo todo a la meta perseguida. Hay medios que no se justifican. Y me gustaría poder amar a mi país sin dejar de amar la justicia. No deseo para él cualquier tipo de grandeza, y menos todavía la de la sangre y la mentira. Quiero que la justicia viva con él y le dé vida». «Pues no ama usted a su país», me contestó usted.
Albert Camus (Obras Selectas: El extranjero, La peste, El mito de Sísifo, Cartas a un amigo Alemán)
Vivimos en un mundo donde los bancos destruyen la economía. Los gobiernos destruyen la libertad. Las empresas destruyen el trabajo. Los abogados destruyen la justicia. Los medios de comunicación destruyen la información. Las escuelas destruyen la educación. Y la religión destruye la espiritualidad. CHRIS HEDGES
Borja Vilaseca (Qué harías si no tuvieras miedo: Claves para reinventarte profesionalmente y prosperar en la nueva era)
Rosa quería un mundo donde la justicia no fuera sacrificada en nombre de la libertad, ni la libertad fuera sacrificada en nombre de la justicia.
Eduardo Galeano
¡Levántate Oh Luchador! (El Soneto del Servicio Mundial) Levántate oh luchador, adelante oh amador, ¡Hasta que alcances tu meta, no te pares! Levántate oh luchador, adelante oh amador, ¡Hasta que hagas realidad tus sueños, no pares! Levántate oh luchador, adelante oh amador, Hasta que termine toda injusticia, no pares. Levántate oh luchador, adelante oh amador, Hasta que haya paz en la tierra, no te pares. Levántate oh luchador, adelante oh amador, Hasta que todos sean amantes, no te pares. Levántate oh luchador, adelante oh amador, Hasta que humanidad sea la realidad, no te pares. Un nuevo mundo es la creación de nuevos humanos. No lo olvides, la lucha de uno es la lucha de todos.
Abhijit Naskar (Amantes Assemble: 100 Sonnets of Servant Sultans)