Consuela Quotes

We've searched our database for all the quotes and captions related to Consuela. Here they are! All 60 of them:

These girls with old gents don't do it despite the age—they're drawn to the age, they do it for the age. Why? In Consuela's case, because the vast difference in age gives her permission to submit, I think. My age and my status give her, rationally, the license to surrender, and surrendering in bed is a not unpleasant sensation. But simultaneously, to give yourself over intimately to a much, much older man provides this sort of younger woman with authority of a kind she cannot get in a sexual arrangement with a younger man. She gets both the pleasures of submission and the pleasures of mastery.
Philip Roth (The Dying Animal)
Si quieres olvidarme date prisa, no me consuela tu amistad, tu duda...
Joaquín Sabina
Benny McClenahan arrived always with four girls. They were never quite the same ones in physical person but they were so identical one with another that it inevitably seemed they had been there before. I have forgotten their names — Jaqueline, I think, or else Consuela or Gloria or Judy or June, and their last names were either the melodious names of flowers and months or the sterner ones of the great American capitalists whose cousins, if pressed, they would confess themselves to be.
F. Scott Fitzgerald (The Great Gatsby)
Caminar no consuela. Caminar hace pensar. Cada paso argumenta.
Pascal Quignard (Las solidaridades misteriosas)
Solo en las malas novelas la gente piensa siempre lo correcto, dice siempre lo correcto, todo efecto tiene su causa, hay simpáticos y antipáticos, buenos y malos, al final todo te consuela
Elena Ferrante (The Story of the Lost Child (Neapolitan Novels, #4))
En algunos instantes, después de prolongados sufrimientos, lo que más anhelaba -aunque le habría dado vergüenza confesarlo-era que alguien le tuviese lástima como se le tiene lástima a un niño enfermo. Quería que le acariciaran, que le besaran, que lloraran por él, como se acaricia y consuela a los niños.
Leo Tolstoy (La muerte de Iván Ilich)
Estar con ella me consuela un poco aunque me gustaría que supieses que vuelo hasta ti en sueños cada noche...
Elena Castillo Castro (Mientras el corazón siga latiendo)
Lejos un trino. El ruiseñor no sabe que te consuela.
Jorge Luis Borges (Poesia Completa)
Es preciso dejar que los demás tengan razón —respondía a los insultos— pues eso los consuela de no tener otra cosa.
André Gide (The Immoralist)
Has no one ever explained to you,” Consuela said, “that there is no such thing as linear time? What people call the past, the present, the future—it’s all happening at the same time.
Charles de Lint (The Wind in His Heart)
—Cuando te hayas consolado (siempre se consuela uno) estarás contento de haberme conocido. Serás mi amigo y tendrás ganas de reír conmigo. Algunas veces abrirás tu ventana sólo por placer y tus amigos quedarán asombrados de verte reír mirando al cielo. Tú les explicarás: "Las estrellas me hacen reír siempre". Ellos te creerán loco. Y yo te habré jugado una mala pasada... Y
Antoine de Saint-Exupéry (El principito)
—Así que te recomiendo que te abroches bien abrochado el cinturón de seguridad. —Señor Komatsu. Cuando se viaja en un avión que se va a estrellar el cinturón no sirve para nada. —Pero consuela.
Haruki Murakami (1Q84 (1Q84, #2))
¡Desdichada el alma temeraria que se imaginó que alejándose de ti puede conseguir algo mejor! Se vuelve y se revuelve de un lado para otro, hacia la espalda y boca abajo y todo le es duro, pues la única paz eres tú. Y tú estás ahí, para librarnos de nuestros desvaríos y hacernos volver a tu camino; nos consuelas y nos dices: ¡Vamos! ¡Yo los aliviaré de peso, los conduciré hasta el fin y allí los liberaré!
Augustine of Hippo (Confesiones de San Agustín)
Tú enjugas con blandura sus lágrimas, para que lloren todavía más y en su llanto se gocen. Porque tú, Señor, no eres un hombre de carne y sangre; eres el creador que los hiciste y que los restauras y consuelas.
Augustine of Hippo (Confesiones de San Agustín)
Entérate de que me consta que me has tratado horriblemente, ¿te enteras?, horriblemente. Si te figuras que no lo sé, eres una necia, y si te imaginas que me consuelas con palabras dulces, eres una idiota, y si piensas que no me tomaré venganza de ello, pronto te convencerás de lo contrario.
Emily Brontë (Cumbres Borrascosas)
Y aquel velo era el velo de los sueños, de los dulces sueños que hacen ver la vida de color de rosa. Y con él envolvió a los cuatro hombres flacos, barbudos e impertinentes. Los cuales cesaron de estar tristes, porque penetró en su pecho la esperanza, y en su cabeza el sol alegre, con el diablillo de la vanidad, que consuela en sus profundas decepciones a los pobres artistas.
Rubén Darío (Azul...)
Comprendía el poder cicatrizador de la belleza. Frente a un cuadro no somos juzgados, el intercambio es puro, la obra parece entender nuestro dolor y nos consuela a través del silencio, permanece en una eternidad fija y tranquilizadora, su único objetivo es colmarnos mediante las ondas de lo bello. Las tristezas se olvidan con Botticelli, los miedos se atenúan con Rembrandt y las penas se reducen con Chagall.
David Foenkinos (Hacia la belleza)
Y se arrojan a tus brazos y lloran en tu regazo después de sus caminos inaccesibles19. Y Tú, accesible, enjugarás sus lágrimas20. Y lloran más y gozan con los llantos porque Tú, Señor, no una persona sin más, carne y sangre21, sino Tú, Señor, que los has hecho, los rehaces y consuelas. ¿Y dónde estaba yo cuando te buscaba? Y Tú estabas ante mí. Yo, en cambio, también me había apartado de mí, y no me encontraba: ¡cuánto menos a ti!
Augustine of Hippo (Confesiones)
Tu luz emana desde tu esencia, por eso la importancia de conocerte bien, si eres amoroso abraza, besa, consuela, sé un regalo para los demás, si eres autentico no te reinventes para agradar a nadie, deja que brille tu autenticidad, si eres libre y debes partir cuando el viento cambie bríndate a todos como si fuera el ultimo día, si eres apasionado haz lo que más te guste y lo harás muy bien,  si eres responsable brillará tu integridad y si eres honesto lo hará tu verdad, desarrollar y mostrar tu verdadera forma de ser  te abrirá grandes caminos hacia la felicidad.
Alfredo Miranda IV (VOLVERÍA PARA MATARLA (divorcio inminente): SI TE QUIERES DIVORCIAR, YA LO HICISTE O ESTAS A PUNTO DE HACERLO ¡MAS TE VALE LEER ESTO! LA NOVELA MAS VENDIDA ENTRE PAREJAS (Spanish Edition))
was Innes who damaged the tiles, although none of the current residents of the house know this. On a wet day in the late 1920s, a seven-year-old Innes stole a metal tray from the kitchen and carried it all the way up to the top of the stairs and proceeded to toboggan down, skidding over the carpet, from landing to landing, riding the swells and troughs of the stairs, until he arrived with a resounding crash in the hallway. The impact of the edge of the tray with the Victorian tiles caused a long, snaking crack; Innes hurtled forward to collide with the sharp corner of a coat rack. His screams brought Consuela running from the kitchen, brought his mother down from the drawing room above. There was a lot of blood on the tiles that day, red among the blue and white. He had to have two stitches in his forehead and there would be a small, vertical scar there for the
Maggie O'Farrell (The Hand That First Held Mine)
[Stephen Dedalus] Entraba y salía de interminables capillas en las que algún anciano dormitaba, algún empleado limpiaba el polvo o alguna mujer se arrodillaba. Mientras caminaba a paso lento por el laberinto de calles, devolvía con orgullo las miradas de tonta maravilla que recibía y observaba de soslayo los grandes torsos vacunos de los policías que se volvían para analizarlo una vez los había pasado. Estos vagabundeos endurecían las raíces de su ira ya bien arraigada, y cada vez que se topaba con un grueso cura sudado bajo sus ropas negras haciendo su ronda matinal por esas colmenas de piadosos reptantes para atestiguar la estabilidad de su parálisis, maldecía con ira la farsa del Catolicismo, la farsa de su isla: una isla donde los habitantes confían y venden su espíritu al mejor postor, una isla en la que todo el poder y la riqueza están en manos de los guardianes de las llaves del otro mundo, una isla en la que César confiesa a Cristo y Cristo confiesa a César, engordando ambos de la mano su tripa y su bolsillo como puercos a costa del hambre de una plebe a la que consuela fácilmente con palabras y frases vulgares como: el Reino de Dios está en cada uno de vosotros.
James Joyce (Stephen Hero)
Cuanto más tacaño fuera, hoy en día, en espíritu y saber, un tal mercader de cueros, cuanto más clara su propia intuición le hiciera ver su triste figura, tanto más alabará un sistema que no le exige la fuerza y el genio de un gigante, sino que se contenta con la astucia de un alcaide y llega incluso a ver con mejores ojos esa especie de sabiduría que la de Pericles. Además de eso, un paleto así no precisa atormentarse con la responsabilidad de su acción. Él está fundamentalmente exento de esa preocupación, porque, cualquiera que fuere el resultado de sus locuras como estadista, sabe muy bien que, desde hace mucho tiempo, su fin está escrito: un día tendrá que ceder el lugar a otro espíritu tan pequeño como el suyo propio. Una de las características de tal decadencia es el hecho de aumentar la cantidad de "grandes estadistas" en la proporción en la que se contrae la escala del valor individual. El valor personal tendrá que volverse menor a medida que crece su dependencia de las mayorías parlamentarias, pues tanto los grandes espíritus rehusarán ser esbirros de ignorantes y parlanchines, como inversamente los representantes de la mayoría, esto es, de la estupidez, odiarán a las cabezas que destaquen. Siempre consuela a una asamblea de papanatas, consejeros municipales, saber que tienen a su cabeza un jefe cuya sabiduría corresponde al nivel de los presentes. Cada cual tendrá el placer de hacer brillar, de cuando en cuando, una chispa de su ingenio, y, sobre todo, si Pedro puede hoy ser jefe, ¿por qué no lo puede ser Pablo mañana? Pero, últimamente, esa invención democrática hizo surgir una actitud que hoy se ha transformado en una verdadera vergüenza, como es la cobardía de gran parte de nuestros llamados "líderes". ¡Qué felicidad poder esconderse, en todas las verdaderas decisiones de alguna importancia, detrás de las llamadas mayorías!
Adolf Hitler (Mi Lucha)
SIRÁCIDES30 Sir30:1El que ama a su hijo, le azota sin cesar, para poderse alegrar en su futuro. Sir30:2El que enseña a su hijo, sacará provecho de él, entre sus conocidos de él se gloriará. Sir30:3El que instruye a su hijo, pondrá celoso a su enemigo, y ante sus amigos se sentirá gozoso. Sir30:4Murió su padre, y como si no hubiera muerto, pues dejó tras de sí un hombre igual que él. Sir30:5En su vida le mira con contento, y a su muerte no se siente triste. Sir30:6Contra sus enemigos deja un vengador, y para los amigos quien les pague sus favores. Sir30:7El que mima a su hijo, vendará sus heridas, a cada grito se le conmoverán sus entrañas. Sir30:8Caballo no domado, sale indócil, hijo consentido, sale libertino. Sir30:9Halaga a tu hijo, y te dará sorpresas juega con él, y te traerá pesares. Sir30:10No rías con él, para no llorar y acabar rechinando de dientes. Sir30:11No le des libertad en su juventud, y no pases por alto sus errores. Sir30:12Doblega su cerviz mientras es joven, tunde sus costillas cuando es niño, no sea que, volviéndose indócil, te desobedezca, y sufras por él amargura de alma. Sir30:13Enseña a tu hijo y trabaja en él, para que no tropieces por su desvergüenza. Sir30:14Vale más pobre sano y fuerte de constitución que rico lleno de achaques en su cuerpo. Sir30:15Salud y buena constitución valen más que todo el oro, cuerpo vigoroso más que inmensa fortuna. Sir30:16Ni hay riqueza mejor que la salud del cuerpo, ni contento mayor que la alegría del corazón. Sir30:17Mejor es la muerte que una vida amarga, el descanso eterno que enfermedad permanente. Sir30:18Manjares derramados sobre boca cerrada, eso son las ofrendas de alimentos puestas sobre una tumba. Sir30:19¿De qué le sirve el sacrificio a un ídolo? ¡ni lo comerá ni lo olerá! Así aquel a quien persigue el Señor, Sir30:20que mira con sus ojos y gime. Escomo un eunuco que oprime a una virgen y gime. Sir30:21No entregues tu alma a la tristeza, ni te atormentes a ti mismo con tus cavilaciones. Sir30:22La alegría de corazón es la vida del hombre, el regocijo del varón, prolongación de sus días. Sir30:23Engaña tu alma y consuela tu corazón, echa lejos de ti la tristeza; que la tristeza perdió a muchos, y no hay en ella utilidad. Sir30:24Envidia y malhumor los días acortan, las preocupaciones traen la vejez antes de tiempo. Sir30:25Un corazón radiante viene bien en las comidas, se preocupa de lo que come.
Anonymous (Sagrada Biblia (Spanish Edition))
Nada le gusta más a mi espíritu inmundo que la expulsión del dolor a través del dolor.
Camila Gutiérrez (Ni la música me consuela (Spanish Edition))
Para expulsar esto por lo que sufro mucho, sufriré algo. Para no querer morirme, me voy a tener que morir un poquito.
Camila Gutiérrez (Ni la música me consuela (Spanish Edition))
«Y justo al comienzo de la primavera, será una nueva flor»,
Camila Gutiérrez (Ni la música me consuela (Spanish Edition))
El camino te llevará toda la vida. ¿Por qué hacerlo solo? Es bueno recorrerlo acompañado. Busca entonces al hermano del camino. Con él podrás recorrer la senda de igual a igual. Cuando él esté cansado, tú deberás seguir remando. Cuando tú duermes, él vigilará. Cuando uno tropiece, el otro estará allí para ayudarle. Cuando uno esté enfermo, el otro acudirá en su ayuda. Y un día lejano, al final de vuestras vidas, os sentaréis uno al lado del otro, a contemplar el sol ponerse en el silencioso desierto.
Camila Gutiérrez (Ni la música me consuela (Spanish Edition))
Me siento muy débil y muy fuerte para vivir. Espero lo peor y estoy esperando lo mejor.
Camila Gutiérrez (Ni la música me consuela (Spanish Edition))
–No creo que las cosas fueran mejores. Solo las recordamos así porque nos consuela. –Y porque no nos fijábamos en los problemas. A lo mejor es que no queríamos verlos.
Brandon Sanderson (Tress of the Emerald Sea)
Cuando El Señor nos busca y entramos en una relación con Él tenemos la misma reacción que tuvo el apóstol Tomás: «¡Señor mío y Dios mío!» (Juan 20:28). Tomás, al igual que todos nosotros, tuvo una relación con Cristo en términos humanos, sin embargo, ahora la relación ha cambiado a una como Dios y Salvador, nuestro protector, ¡nuestro todo! En un mundo caído, el único refugio seguro es en un Dios Todopoderoso que es capaz de orquestar todo para nuestro bien (Rom. 8:28). ¿Qué cambió? «Así que de ahora en adelante no consideramos a nadie según criterios meramente humanos. Aunque antes conocimos a Cristo de esta manera, ya no lo conocemos así. Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!» (2 Cor. 5:16-17). Dios se convierte en nuestro abrigo y sombra (v. 1) cuando confiamos en Él; mientras sentimos el frío de la soledad, la falta de amistades porque la gente no piensa igual que nosotros o enfermedades que nos aíslan, nuestro Dios con Su amor inagotable está con nosotros y es nuestro abrigo. Cuando sentimos el calor de la enemistad, las situaciones difíciles, las enfermedades graves, Él es quien nos consuela y nos tranquiliza, trayéndonos aire fresco para manejar la situación con sabiduría. Nuestra confianza en Dios es fundamentada en quien Él es, un Dios fiel. Reconocemos que nada se escapa de un Dios omnisciente, omnipresente y todopoderoso. Todo lo que nos ocurre es orquestado y controlado por Él y entonces Él es el único que puede ser nuestra fortaleza y refugio. ¡Confiamos en que lo que Él hizo en el pasado, lo hará hoy y hasta la eternidad! Es importante entender que Él es nuestro Señor y nuestro Dios; cuando lo hacemos, es nuestro abrigo y sombra. Esto es para aquellos que viven con Él en una relación cercana y para aquellos que confían en Él. Esto implica que lo busquemos a través de estudiar y meditar Su Palabra, así como por medio de la oración. Todos los creyentes buscan las misericordias de Dios, pero no todos habitan en el santísimo. Para tener esta relación se requiere acción de nuestra parte, y el salmista nos anima a buscarlo para tener la confianza de vivir y habitar en Su presencia. «Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre» (Mat. 7:7-8).
B&H Kids Editorial Staff (Un año en los Salmos: 365 devocionales para animar tu vida (Spanish Edition))
He escrito alguna vez que una biblioteca no es un almacén de libros leídos, sino una herramienta, un refugio y un proyecto de vida. Contiene lo que te educó e incluso cambió el carácter, lo que ayuda a comprender el mundo, lo que consuela y protege, lo que entretiene o divierte, lo que aún esperas conocer si vives para que ocurra. Causa melancolía, cuando llegas a una edad, comprender que muchos de esos libros que tienes cerca, que te acompañan a la espera de su oportunidad, quizá no llegues a leerlos nunca. Pero son las reglas. Lo importante es que estén ahí, arropándote como amigos a los que recurrir en caso necesario.
Arturo Pérez-Reverte
La misericordia siempre será más grande que cualquier pecado y nadie podrá poner un límite al amor de Dios que perdona. En la fiesta de la Inmaculada Concepción tendré la alegría de abrir la Puerta Santa. En esta ocasión será una Puerta de la Misericordia, a través de la cual cualquiera que entrará podrá experimentar el amor de Dios que consuela, que perdona y ofrece esperanza.
Pope Francis (Misericordiae Vultus (Spanish Edition))
«Es un gran consuelo en medio de la tribulación acordarnos, cuando llega la adversidad, de los dones recibidos de nuestro Creador. Si acude enseguida a nuestra mente el recuerdo reconfortante de los dones divinos, no nos dejaremos doblegar por el dolor... En efecto, aquel que en el tiempo de los favores se olvida del temor de la calamidad cae en la arrogancia por su actual satisfacción. Y el que en el tiempo de la calamidad no se consuela con el recuerdo de los favores recibidos, es llevado a la más completa desesperación por su estado mental».
Irene Guerrero (Teresa de Jesús.: La dama herida)
El amor no aísla, no te hace perder nada, no te daña. No. El amor protege, nutre, consuela y te hace sentir vivo, y nunca medio muerto.
Ignacio Novo
Women are naturally superior to men, and Mrs Consuela Rosenheim was no exception.
Jeffrey Archer (Twelve Red Herrings)
ISABEL.- Castilla es como esas viejas leonas que se duermen con un grano de incienso entre sus zarpas. Lo huele y se consuela de tantos sinsabores, de tanto día doliente...".
Antonio Gala (Si las piedras hablaran)
Sólo esta carne, que se refugia en la noche recelando para pensar en el cubil del sueño: "me alegraré mañana", y se consuela; sólo esta amarga carne debería morir
Antonio Gala (Enemigo íntimo)
La estereotipación del pensamiento conforta y consuela. El extremista afán de lucir como hombre moderado, arbitrador de divergencias, como personalidad agradable a toda costa, cohíbe e inhibe la curiosidad mental; hacerse solidario de la opinión pública da sensación de seguridad.
Frédéric Bastiat (La ley)
You’re never goin’ to forget Consuela. But in time you’ll put her and her love in a special place inside you. and you’ll go on livin’.
C. Wayne Winkle (Reno Gates: Escape From Danger: A Western Adventure (A Reno Gates Western Book 6))
Avanza entre la gente envuelto en el grueso abrigo de la bondad, así jamás siente frío. Se desprendería de su última camisa antes que entregar este abrigo de la bondad. A veces se imagina horrorizado que pudiera existir una prohibición de pasar por bueno. El sudor le baña la frente y, como si lo acosaran, se precipita al encuentro de sus víctimas, que lo reciben agradecidas y radiantes de alegría. Cuando ha hecho algún bien a dos personas que no se conocen mutuamente, él se preocupa de que se conozcan. Luego se las imagina juntas y hablando sobre él. Más adelante hace que ambas partes le cuenten lo que hablaron y compara las dos versiones con todo detalle. Porque está dispuesto a dejar que lo engañen en todo, excepto en su bondad. Actúa con la máxima modestia cuando hace el mayor de los bienes, tanto más grande será el efecto. Le gusta repasar mentalmente su propia vida y comprueba que no ha habido ningún período en que no haya sido bueno. No puede asistir a ningún sepelio sin identificarse con el difunto, y quizá hasta lo envidie un poco porque todos hablan bien de él. Pero se consuela imaginando todo lo que dirían si él fuera el muerto. Alguna que otra vez se toma en serio esta quimera y hace propagar la noticia de su propia muerte. Se abona entonces a una agencia de prensa y recibe puntualmente todas las necrológicas relacionadas con su persona. Pasa luego unos días felices pegando las necrológicas en un álbum. Pero es justo y no elimina las que le parecen demasiado breves. Luego deja el imponente álbum en su cama, como una almohada, y duerme sobre él. Sueña con su entierro al día siguiente y, cuando todos lo han hecho ya, él también arroja una paletada de bondad en la tumba.
Elias Canetti (Il libro contro la morte)
¡Oh estas jornadas siniestras Señor… estas jornadas siniestras en que nada me consuela, ni me alienta, ni me eleva!…
León Felipe (Versos y oraciones del caminante)
Nicolas Dufriche, barón de Desgenettes, verdadera eminencia que en otro tiempo había sido médico de María Antonieta, informa a Napoleón de que en el antiguo hospital armenio de la ciudad se encuentran hacinados los enfermos a causa de la peste bubónica que perseguía a las tropas desde el mismo momento de su desembarco en Alejandría. En un gesto muy suyo, luego inmortalizado por Antoine-Jean Gros, Napoleón los visita y –se dice–, pese a las recomendaciones de los galenos, toca y consuela a sus hombres e incluso ayuda a trasladar a un moribundo, gesto decididamente teatral para demostrar que no les persigue la fatalidad, sino una simple enfermedad. En este sentido Napoleón, al imponer sus manos sobre los bubones
Juan Granados (Breve historia de Napoleón)
Todo esto hace suponer que antes de la instauración del culto al Falo, hubo un culto primitivo a la Vulva, que la nueva religión habría destronado: por eso, la exhibición de Baubo consuela a la antigua divinidad.
Séverine Auffret (La gran historia del feminismo: De la Antigüedad hasta nuestros días (Spanish Edition))
Dios intencionalmente permite que atravieses por experiencias dolorosas a fin de equiparte para que ministres a otros. La Biblia dice: «Él nos consuela en todos nuestros problemas de manera que podamos consolar a otros. Cuando otros están en problemas, debemos estar dispuestos a darles a ellos el mismo consuelo que Dios nos ha dado».12
Rick Warren (Una vida con propósito: ¿Para qué estoy aquí en la tierra?)
Aquí me pongo a cantar Al compás de la vigüela Que al hombre que lo desvela Una pena estrordinaria, Como la ave solitaria Con el cantar se consuela.
José Hernández
La muerte es quien consuela y a vivir nos ayuda; es meta de la vida y la sola esperanza que, embriagador elixir, por las venas avanza e impulsa hasta el final de la jornada ruda.
Baudelaire, Charles
Lady Justice is not blind. She is blindfolded. She is a prisoner; her scales are rigged, her promise a lie. There is no such thing as justice, Consuela. The law, our entire system, is designed for men
Emily Kimelman (Fatal Breach (The Sydney Rye Mysteries, #14))
Se dice que, para muchos, la muerte llega como una liberación, y es difícil encontrar un hombre que alguna vez no la haya deseado. La muerte es el símbolo supremo del fracaso: quien fracasa en algo grande, se consuela con el hecho de poder fracasar todavía más y estira la mano hacia aquel enorme manto oscuro que lo recubre todo uniformemente. Pero si no existiera la muerte, nadie podría fracasar realmente en nada; con intentos siempre renovados se podrían remediar debilidades, deficiencias y pecados. Al ser ilimitado, el tiempo nos daría un valor ilimitado. Desde muy temprano nos inculcan que todo se encamina hacia un final, por lo menos aquí, en este mundo conocido. Límites y constricción por todas partes, y enseguida una constricción última, terriblemente penosa. Ensancharla no depende de nosotros mismos. Hacia esa constricción miran todos; independientemente de lo que pueda haber detrás, es considerada inevitable; todos deben inclinarse ante ella al margen de sus propósitos y de sus méritos. Un alma puede ser tan amplia como le plazca: será constreñida hasta que, llegado un momento que ella no determina, quede asfixiada. Quién determina ese momento es un asunto que se deja al criterio de la opinión imperante y no del alma individual misma. La esclavitud de la muerte es el núcleo de toda esclavitud, y si esta esclavitud no fuera reconocida, nadie podría desearla para sí mismo.
Elias Canetti (Il libro contro la morte)
La oración siempre agrada a Dios y es útil para nuestra salvación, sean cuales fueren los sentimientos que tengas durante la misma. Lo dicen los santos Padres. Ninguna oración, ya sea rica o pobre según nuestro juicio, se perderá ante Dios. El consuelo, fervor y dulzura manifiestan que Dios te premia y consuela por el esfuerzo realizado; la pesadez, tristeza y aridez significan que, está purificando y fortaleciendo tu alma, salvándola con esta prueba saludable, disponiéndola a saborear con humildad la futura felicidad.
Anonymous (The Way of a Pilgrim)
Padre de misericordias y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que también nosotros podamos consolar a los que están sufriendo, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios” (2Co 1:3-4 RVC). No tiene sentido recibir una compasión tan maravillosa y responderle a los demás con dureza e insensibilidad.
Paul David Tripp (Guerra de Palabras: Tratando el corazón de tus problemas con la comunicación (Spanish Edition))
[...] Todo lo soporté; pero no pude sufrir la desaprobación del Gobierno, y mucho menos a que me reprendiese en público [...] ¡A mí desairarme! ¡Reprenderme a mí! ¡Ni usted! Me retiré a mi casa, y con la inacción y el silencio respondí. A un sargento que va a buscar forraje se le pone arrestado si en lugar de veinte quintales trae cuarenta. A mí se me escribe, se me consuela, y si algo parece fuera de orden, se me dice privadamente, midiendo las expresiones para no ofender mi delicadeza. Yo no era un empleadillo adocenado de los que obstruyen las antecámaras; yo era el brazo derecho del Gobierno [...] Sucre me reprende como un lacayo. No sé lo que habrá dicho, porque me salí de su palacio sin darle ni pedirle cuenta. Es muy regular que la satisfacción que haya dado a usted haya sido mi acusación. Me ha tratado de caprichoso. Debo perdonárselo, porque no sabe o no quiere distinguir de sentimientos ni de acciones [...] Infante me prestó trescientos pesos; Sucre, quinientos. El
Alfonso Rumazo González (Antonio José de Sucre, Gran Mariscal de Ayacucho (Spanish Edition))
El que no se consuela es porque prefiere el deleitoso y vicioso acíbar del desconsuelo.
Camilo José Cela (La colmena)
People have been leaving behind huge chucks of themselves after death for eons, Consuela – in their diaries and paintings and the notes in their cookbooks and the stories they tell their children. The eneural is the latest in a long line of media that help us capture some bit who we were when we were alive, and give it to the future. It’s the birth of a new artform. One I already love.” She frowns skeptically. “That’s it? My husband is art to you?” I don’t back down. “Art makes life make sense.” “Art is a dead thing trying to tell the living how to live.
Carlos Hernandez
Un día la adornarán de piedras preciosas y se casará con un joven turco, al que sólo habrá visto de lejos, al través de una celosía, y con el que cruzará la palabra por vez primera en el momento de ser su esposa. La llevarán a una casa nueva, en la que vivirá como única señora si su marido no ama las costumbres antiguas, o en la que se confundirá con otras, iguales a ella en derechos, distintas a ella en alma, como si fuese de otro planeta. Su madre se extrañará de sus lágrimas y melancolías. Así vivió ella, así vivieron sus abuelas y todas las honradas damas temerosas de Dios. Pero la madre era feliz, abroquelada en su santa ignorancia: no la habían hecho morder el fruto embriagador de la cultura occidental... Y la infeliz reclusa de las tradiciones de su pueblo, asustada ante el porvenir, y mientras llega el momento del matrimonio, se consuela con la lectura, y devora las novelas francesas que llenan los escaparates de las librerías de la gran calle de Pera.
Vicente Blasco Ibáñez (Oriente)
Pero el hecho de que yo pueda comprobar mi propia condición canallesca no me consuela lo más mínimo de ser un canalla.
Anonymous
Si fotografías a Pierluca mientras levanta un castillo de arena, no hay razón para no fotografiarlo mientras llora porque el castillo se ha desmoronado, y después mientras la niñera lo consuela mostrándole una concha en medio de la playa. Basta empezar a decir de algo: <<¡Ah! Qué bonito, habría que fotografiarlo">>, y ya estás en el terreno de quien piensa que todo lo que no se fotografía se pierde, es como si no hubiera existido, y por lo tanto, para vivir verdaderamente hay que fotografiar todo lo que se pueda, y para fotografiarlo todo es preciso: o bien vivir de la manera más fotografiable posible, o bien considerar fotografiable cada momento de la propia vida. La primera vía lleva a la estupidez, la segunda lleva a la locura.
Italo Calvino
El mar es una amante traicionera. Te seduce como una sirena con su canto de libertad, pero no te consuela por las noches, no te da calor cuando tienes frío y no responde cuando la llamas pidiendo auxilio.
Laura Esparza (¡Piratas!)
Ahora, cuando estoy llegando al final de mi vida, lo sé con toda certeza: Anton Walter tenía razón. En cada corazón late un mea culpa, y sólo hay que saber cuándo prestará oído el hombre a esas dos palabras que resuenan en lo más hondo de su ser. Durante las noches de insomnio se oyen muy claramente. Esas noches de insomnio en las que, como dice Pushkin, todos «releemos la vida con horror», y nos estremecemos, y maldecimos. En el insomnio, la conciencia no se consuela por no haber participado directamente en los asesinatos y en las traiciones. Porque no sólo mata el que asesta el golpe, sino los que han avivado su odio. De uno u otro modo. Repitiendo irreflexivamente peligrosas fórmulas teóricas. Levantando en silencio la mano derecha. Escribiendo cobardemente una verdad a medias. Mea culpa… Y creo, cada vez más, que dieciocho años de infierno en la tierra no bastan para una culpa como ésta.
Evgenia Ginzburg (Within the Whirlwind)
Se dice que para muchos la muerte llega como una liberación, y es difícil encontrar a un hombre que no la haya deseado alguna vez. Ella es el símbolo supremo del fracaso: quien fracasa en lo grande se consuela pensando que todavía puede fracasar más y alarga la mano para coger aquel terrible manto oscuro que lo cubre todo de un modo uniforme. En cambio, si la muerte no existiera, sería imposible que alguien fracasara realmente en algo; probando una y otra vez podría reparar flaquezas, deficiencias y faltas. Lo ilimitado del tiempo le daría a uno un coraje ilimitado. Desde muy pronto nos inculcan la idea de que todo se acaba, aquí, por lo menos, en este mundo que conocemos. Angostura y fronteras por todas partes, y pronto una última angostura, penosa y sucia; el ensancharla no depende de uno. A esta angostura miramos todos; sea lo que fuere lo que pueda haber detrás, es inevitable; todo el mundo tiene que agacharse, da igual cuáles sean sus propósitos y sus méritos. Un alma puede ser tan grande como quiera: llega un momento, que ella misma no determina, en que la apretarán hasta asfixiarla. Quién determina este momento es cuestión de la opinión que, por casualidad, impere entonces, no es cosa de cada alma. La esclavitud de la muerte es el meollo de toda esclavitud, y si esta esclavitud no fuera reconocida nadie podría desearla para sí mismo.
Elias Canetti (The Human Province)
Su vida entonces, tal cual señala la leyenda, desfiló por delante de sus ojos como una película. Algunos trozos eran en blanco y negro y otros a colores. El amor de su pobre madre, el orgullo de su pobre madre, las fatigas de su pobre madre, abrazándolo por la noche cuando todo en las poblaciones pobres de Chile parece pender de un hilo (en blanco y negro), los temblores, las noches en que se orinaba en la cama, los hospitales, las miradas, el zoológico de las miradas (a colores), los amigos que comparten lo poco que tienen, la música que nos consuela, la marihuana, la belleza revela en sitios inverosímiles (en blanco y negro), el amor perfecto y breve como un soneto de Góngora, la certeza fatal (pero rabiosa dentro de la fatalidad) de que sólo se vive una vez. Con repentino valor decidió que no iba a morir.
Roberto Bolaño (Distant Star)