Roger Ver Quotes

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Es apasionante ver cómo los textos se hablan entre sí. Cómo a partir de una palabra piensas en un párrafo de otro libro que has leído antes. Considera la literatura como una obra colectiva que mana continuamente, renaciendo cada vez de sus reflujos. Si llega a entrar en sintonía con la vida, entonces has dado con la obra maestra.
Marc Roger (De lessen van meneer Picquier)
Tarangu salta. Quedan 220 kilómetros hasta la meta. Pero qué puto chiflado, qué delicia. Lo curioso es que Merckx no acaba de fiarse. A ver si este aún me la acaba liando. Y arranca también. Falta un mundo hasta la meta del día de los homenajes, el de las fotos bebiendo champán y fumando pur(it)os. Y miren ustedes qué risas. El líder y el quinto de la general escapados durante cincuenta kilómetros. Primero solos. Luego en quinteto. Al final el grupo los coge, porque aquello era una locura y no iba a ningún lado. O sí. Vuelve a atacar Fuente, se vuelve a ir. Cuando quedan ciento cincuenta a meta. Kilómetros, no metros, que eso lo hace ese ciclista en quien todos ustedes están pensando. En fin. Molteni, equipo de Merckx, empieza a tirar para coger a Tarangu, y caza un ratito más tarde. Hasta Milán… tranquilidad, al fin. Victoria de Marino Basso por delante de Roger de Vlaeminck. «Si Merckx no se pone a perseguirme llego a meta con diez minutos de ventaja y gano el Giro». Sí, José Manuel, sí.
Marcos Pereda Herrera (Arriva Italia: Gloria y miseria de una nación que soñó ciclismo)
El régimen de López Obrador ha sido bautizado como el gobierno de la 4T, es decir, de la Cuarta Trasformación. Las tres anteriores fueron la independencia de España, la reforma liberal y la revolución de 1910. Posiblemente estas grandes trasformaciones son las tres máscaras que adopta como estilo de gobierno el presidente. Más concretamente, podemos ver que usa las máscaras de Morelos, Juárez y Madero para representar un cuarto episodio supuestamente tan trascendental como los tres anteriores. Tenemos aquí a un personaje que declara su humilde servidumbre ante una nación que debe ser independiente, aunque no haya ya un enemigo colonialista al que vencer. También encarna la severa austeridad y la gran tenacidad de un reformista liberal que se enfrenta a los molinos de viento de un conservadurismo inventado. Asimismo, retoma la espiritualidad mística y moralista de un luchador por la democracia contra una dictadura imaginaria. Allí están las tres máscaras, completamente fuera de su contexto original, que fueron terribles tiempos de guerra: ya no hay una España colonial de la cual independizarse. Tampoco vemos una Iglesia ultraconservadora a la que es necesario arrebatar de sus manos muertas las propiedades que acapara. Imposible, además, ubicar una larga dictadura que sea preciso derrocar. Pero sí aparecen los enemigos fantasmales que hay que combatir o reducir: el reino de España, los conservadores y los neoporfiristas. El combate contra estos tres fantasmas se transforma en un estilo de gobierno. La historia tachonada de grandes héroes que invoca López Obrador elude su lado amargo, incómodo e irónico: la independencia acaba degradada por un ridículo emperador, la reforma liberal desemboca en la dictadura y la revolución acaba en manos de burócratas autoritarios. Me temo que la transición a la democracia acabe naufragando gracias a un demagogo populista.
Roger Bartra (Regreso a la jaula: El fracaso de López Obrador (Spanish Edition))
Si observamos el funcionamiento de Morena podemos ver que opera como un conjunto de tribus, a la manera en que funcionaba su matriz original, el PRD. Contra lo que su nombre indica, no se trata de un movimiento ni impulsa una regeneración. En realidad, se trata de un conglomerado de pandillas o facciones que, agrupadas en torno de un cacique, busca la restauración del antiguo régimen priista.
Roger Bartra (Regreso a la jaula: El fracaso de López Obrador (Spanish Edition))
No me esperaba gran cosa de la revelación de su lado oscuro: dos controles positivos para testosterona en 1999 y 2002, atrapado luego entre las redes de la Operación Puerto, dirigida por la Guardia Civil en 2006. Nada fácil de explicar. Me equivoqué, Botero fue el primero en lanzarse. Sobre la testosterona: Después de un primer control positivo en 1998 en el Tour de Romandía me hice exámenes en el Instituto Complutense de Madrid y, al ver los resultados, la UCI admitió que mi tasa elevada de testosterona era normal. Fijaron un umbral en 9 de manera arbitraria, todavía ignoro por qué. En todas las carreras que disputé en 1999, Tour de Valencia, París–Niza, Semana Catalana, di positivo. En Lausanne, nuevos exámenes volvieron a demostrar que todo era natural. Pero la UCI de todas maneras presionó para que me sancionaran y la Federación Colombiana me suspendió seis meses. Creo que el presidente de la UCI de esa época quiso demostrar su autoridad con un corredor principiante que no tenía los recursos para defenderse.
Guy ROGER (Egan Bernal y los hijos de la cordillera: Viaje al país de los escarabajos)
El laboratorio de Coldeportes perdió su certificación a causa de irregularidades, y lo que más me entristece es ver que somos el segundo país del mundo con la mayor cantidad de casos positivos detrás de Costa Rica. Es
Guy ROGER (Egan Bernal y los hijos de la cordillera: Viaje al país de los escarabajos)
Los altos funcionarios seguramente no roban como antes, pero el sistema que alienta la corrupción no ha cambiado. Ello ha resultado evidente, por ejemplo, en las aduanas portuarias y fronterizas, en las cuales ahora se coloca a militares como correctivo. Habrá que ver si el efecto no acaba contaminando a los militares de los vicios que se supone deben eliminar. No hay peor pesadilla que un ejército permeado por la corrupción, algo que ocurría en los viejos tiempos del priismo de hace cuarenta o cincuenta años.
Roger Bartra (Regreso a la jaula: El fracaso de López Obrador (Spanish Edition))
Las secuelas desastrosas de la política económica del gobierno han sido ampliamente documentadas, pero no siempre son claramente visibles, pues se ocultan detrás de los efectos catastróficos de la pandemia del covid-19. La masa de ayudas económicas que fluye bajo diversas formas hacia la población pobre, que obviamente es muy bien recibida, dificulta ver la dirección que está tomando la política económica. Hay quienes creen que hay un proyecto comunista oculto encaminado a revolucionar la economía, a la manera cubana o venezolana. Otros sospechan que se busca instaurar una economía mixta como la que preconizaban los gobiernos priistas de los años sesenta y setenta, de Díaz Ordaz a López Portillo. Algunos temen que el proyecto económico esté en manos del exjefe de gabinete, Alfonso Romo, un empresario muy reaccionario que quisiera simplemente modificar la composición de la élite empresarial para convertirla en un grupo de fieles y estimular un capitalismo de amigos y compadres. En todo caso, este empresario sólo aguantó como jefe de gabinete dos años. Poco antes de dejar el puesto, Romo había exaltado la inversión privada como la esperanza para superar la crisis, una idea que aparentemente contradice el discurso del presidente. Aun alguien tan obtuso como Romo se daba cuenta del desastre: “No podemos manejar un país que está decreciendo cercano al 9% […] como si estuviéramos creciendo al 9%”, declaró en obvia crítica a las ideas de López Obrador pocos días antes de separarse del cargo.
Roger Bartra (Regreso a la jaula: El fracaso de López Obrador (Spanish Edition))
Me quedaba tumbada despierta durante horas hasta que al final me daba por vencida y me ponía a ver el canal del tiempo. Por algún motivo, me resultaba relajante: aquella precisión, la forma en que básicamente predecían el futuro. Me gustaba que los meteorólogos pudieran decirle a la gente de todo el país cómo serían sus días y semanas. Preparaban a las personas, las avisaban de que una tormenta podría estar aproximándose. Así no te pillaba por sorpresa y completamente desprevenido cuando se te echaba encima.
Morgan Matson (Amy & Roger's Epic Detour)
Kasparov. En el Campeonato Mundial de Ajedrez de 1990, Kasparov hizo un movimiento terrible y perdió a su reina al comienzo de una partida decisiva. Los grandes maestros del ajedrez alrededor del mundo soltaron un quejido de dolor; el chico malo de los tableros moría atropellado en la carretera (un periodista del New York Times menos elegante dejó ver una sonrisa sarcástica). Pero no había sido un error; Kasparov había sacrificado deliberadamente su pieza más poderosa a cambio de una ventaja psicológica aún más poderosa. Cuando se encontraba acorralado y la situación necesitaba una acción desesperada, Kasparov era letal. Su oponente, Anatoly Karpov, un jugador que seguía el manual al pie de la letra, era demasiado conservador para presionarlo al comienzo de la partida, así que Kasparov se había tirado la presión encima él mismo, abriendo con un Gambito de Dama. Y ganó. Eso era lo que Ann estaba haciendo. En lugar de perseguir a los tarahumaras, decidió apostar por la peligrosa e inspirada estrategia de dejar que los tarahumaras la persiguieran a ella. ¿Quién está más comprometido con la victoria al final: el depredador o la presa? El león puede perder y volver a cazar al día siguiente, pero el antílope solo puede equivocarse una vez. Para vencer a los tarahumaras, Ann sabía que necesitaba más que fuerza de voluntad: necesitaba sentir miedo. Una vez que se colocó delante, cada ramita quebrada la empujaría hasta la meta. «Colocarse al frente implica realizar un maniobra que requiere ferocidad y confianza —anotó una vez Roger Bannister—. Pero el miedo debe jugar una parte… no es posible relajarse y cualquier miramiento debe lanzarse por la ventana.» Ann tenía ferocidad y confianza de sobra. Ahora estaba ahogando los miramientos y dejando que el miedo cumpliera su labor. La ultramaratón estaba por presenciar su primer Gambito de Dama.
Christopher McDougall (Nacidos para correr: La historia de una tribu oculta, un grupo de superatletas y la mayor carrera de la historia)
After running away from the United States government to pursue his antigovernment vision, Roger Ver had chosen to live in a place that was uniquely unreceptive to his brand of antiauthoritarian politics. Japan was a country that was still deeply wedded to traditional hierarchies with an educational system that taught its citizens from a young age to obey authority. This was evident in the country’s rigid business traditions—the bowing and exchanging of cards—and in the spiky-haired punks in Tokyo, who waited patiently for walk signals, even when there were no cars in sight. Roger had picked Japan, not because it would allow him to be around other like-minded people, but because he liked the orderliness of Japanese culture—and the women. He had met his longtime Japanese girlfriend at a gathering in California and even she had almost no interest in politics. As Roger discovered, the deferential culture made Japanese people uniquely skeptical about a project like Bitcoin that aimed to challenge government currencies. Japan was the only place Roger had encountered where people’s response, when he described Bitcoin, was to call it scary—rather than interesting or silly. This was due, Roger believed, to the way in which the virtual currency broke from the government’s mandates about how money should work. One of the only people with whom Roger had gotten any traction in Japan was a local pornography tycoon.
Nathaniel Popper (Digital Gold: Bitcoin and the Inside Story of the Misfits and Millionaires Trying to Reinvent Money)