Santo Tomas Quotes

We've searched our database for all the quotes and captions related to Santo Tomas. Here they are! All 18 of them:

Santo Tomas was based on emigration and was therefore bound to fail, Belgians do not emigrate.
Leopold II
Fredes Salvatore Mendez was on his last legs. He was on his deathbed, on the second floor in the old section of the Hospital Santo Tomas, over on Balboa Avenue." — A Requiem for Fredes Mendez.
Stephen Deck (Land of the Story Tellers: 24 Stories and 7 Poems)
«Toma e lê»
Santo Agostinho
...un animalucho con un bonete en la cabeza, que cortando el hilo a todos los filósofos dijo que el sabía el secreto, y se hallaba en la Suma de Santo Tomas; y mirando de pies a cabeza a los dos moradores celestes, les sustentó que sus personas, sus mundos y sus estrellas habían sido creados para el hombre. Al oír tal sandez, nuestros dos caminantes hubieron de caerse uno sobre el otro pareciéndose de una risa inextinguible.
Voltaire (Micromegas)
Once when I asked a chieftain in a certain province if he was a Christian, he said "I am not yet quite one, but I am making a beginning." I asked him what he knew of being Christian, and he said: "I know how to swear to God, and play cards a bit, and I am beginning to steal.
Fray Domingo de Santo Tomas
Bem lá no íntimo não fazia ideia de como quebrar o medo que lhe tolhia os movimentos nos instantes de puro terror. Tinha consciência de que uma coisa era falar e outra executar, sabia que, nos momentos de aflição, as suas reacções eram imprevisíveis e incontroláveis, a emoção toma conta da mente e a animalidade sobrepõe-se à humanidade. Quantos homens passavam a vida a falar de heroísmo e a preparar-se para o grande teste e fraquejavam quando o momento chegava, enquanto outros, tímidos e calados, na hora das dificuldades tudo pareciam superar? O que era afinal a temeridade senão fingimento? O que era o heroísmo senão um acto resultante do medo social que se sobrepõe ao medo animal? E o que era a bravura senão um momento de pura loucura, um gesto insano feito para benefício alheio e prejuízo nosso?
José Rodrigues dos Santos (A Filha do Capitão)
Jesús prometió que cuando viniera el Espíritu Santo, Él traería convicción de pecado, de justicia y de juicio (Jn. 16:8). Esta promesa de la obra de convicción del Espíritu se cumple en una medida inusual en los avivamientos genuinos. El término convicción se refiere a tiempos en que el Espíritu Santo toma control de la mente y la conciencia de un individuo con el poder de la verdad. Cuando el espíritu de convicción se manifiesta de una manera inusual en toda una región geográfica como ocurrió en el Primer y Segundo Gran Despertar, cientos de miles—a veces millones—de personas son sacudidos de su letargo espiritual. El Espíritu Santo da convicción a multitudes de aquellos que escuchan la Palabra—tanto incrédulos como creyentes—de cualquier mundanalidad en sus vidas. Él presiona la verdad de Dios en sus mentes y conciencias con una intensidad que la mayoría de nosotros no ha experimentado jamás.
Mike Bickle (Crezca en la oración: Una guía definitiva para hablar con Dios (Spanish Edition))
Cada vez que los cristianos empezando por los Apóstoles, discuten con franqueza y diálogo, y no fomentando traiciones ni camarillas internas, siempre comprenden qué es lo que hay que hacer, gracias a la inspiración del Espíritu Santo. El primer Concilio de Jerusalén, estableció, tras no pocas fricciones, las pocas y sencillas reglas que los nuevos conversos al Evangelio debían observar. El problema es que antes se había encendido una lucha intestina entre los llamados cerrados —un grupo de cristianos muy apegados a la ley, que querían imponer las condiciones del judaísmo a los nuevos cristianos—, y Pablo de Tarso, apóstol de los paganos, totalmente contrario a esa constricción. ¿Cómo resuelven el problema? Se reúnen, y cada uno da su opinión. Discuten, pero como hermanos y no como enemigos. No forman grupitos para vencer, no van a los poderes civiles para imponerse, no matan para ganar. Buscan el camino de la oración y del diálogo. Y así, los que estaban en posiciones opuestas, dialogan y se ponen de acuerdo. ¡Eso es obra del Espíritu Santo! La decisión final se toma en concordia. Y, sobre esa base, se escribe la carta que, al final del Concilio, se enviará a los hermanos que provengan de los paganos, en la que lo que se comunica es fruto de un acuerdo entre diversas maniobras y estratagemas que sembraban cizaña. Una Iglesia donde nunca haya problemas de ese tipo me lleva a pensar que el Espíritu quizá no esté tan presente. Y en una Iglesia donde siempre se discute y hay grupúsculos donde se traicionan los hermanos unos a otros, ¡ahí no está el Espíritu!
Marcelo Larraquy (Código Francisco (Caballo de fuego) (Spanish Edition))
Paradoxo de Epicuro Ao longo dos séculos, muitos teólogos e filósofos tentaram resolver esse trilema. Santo Agostinho, por exemplo, argumentou que o mal não é uma entidade em si, mas uma ausência do bem, e que o livre-arbítrio humano desempenha um papel crucial na existência do mal. Isso sugere que existe algo que Deus não tem controle, que os humanos podem sim se elevarem ao que Deus definiu para eles, os planos divinos. Essa forma de pensar é interessante por usar lógica. Como exemplo, não temos como achar o elétron, entidade moderna; mas você toma choque na tomada e sua tela de aparelhos usam elétrons. Elétrons são ondas de possibilidades, mecânica quântica. Isso se chama princípio da incerteza de Heisenberg. Na prática, nunca vamos “ver” um elétron: quando tentamos ver ele, ele se concentra em um ponto, as ondas de possibilidades desaparecem. Partícula ou ondas?? não sabemos, usamos os dois. No caso dessa forma dele de pensar, sugere o uso da lógica, introduzida por São Tomé.
Jorge Guerra Pires (Ciência para não cientistas: como ser mais racional em um mundo cada vez mais irracional (Vol. II: Religião) (Inteligência Artificial, Democracia, e Pensamento Crítico) (Portuguese Edition))
É necessário ter um bom alinhamento, saber oferecer ajuda ao seu gerente (sim, líderes precisam de ajuda!), aceitar que nem sempre você entenderá as decisões que ele toma e aprender a se comunicar e ter conversas difíceis.
Luciano Santos (Seja egoísta com sua carreira: Descubra como colocar você em primeiro lugar em sua jornada profissional e alcance seus objetivos pessoais (Portuguese Edition))
Más aún, nuestro apóstol habla del único Dios. Él es tan únicamente sabio que salva a los pecadores y los convierte en muestras de su misericordia; tan únicamente sabio que toma a los intolerantes y a los perseguidores y los convierte en apóstoles; tan únicamente sabio que hace que la ira del hombre le alabe y usa la propia maldad del hombre como una superficie para mostrar el brillo de la gloria de su gracia. Al único Dios sabio, lo suficientemente sabio para convertir a un león en un cordero, lo suficientemente sabio para convertir a un pecador en un santo, a un perseguidor en un predicador, a un enemigo en un amigo, a Él sea la gloria.
Charles Haddon Spurgeon (Un gran evangelio para grandes pecadores (Spanish Edition))
1. Apócrifos de la Natividad, como por ejemplo, «El Protoevangelio de Santiago», «El Evangelio del pseudo Mateo» y «El Evangelio de la Natividad de María». 2. Apócrifos de la Infancia, como «El Evangelio de Santo Tomas» y «El Evangelio árabe de la infancia». 3. Apócrifos de la pasión, bajada a los infiernos y resurrección de Jesús, como «El Evangelio de San Pedro» y «El Evangelio de Nicodemo». 4. Apócrifos gnósticos, como «El Evangelio de Valentino».
Edmundo González-Blanco (Evangelios apocrifos (con notas) (Spanish Edition))
Oración en la celda Dame la gracia, Señor, de tener el mundo en nada. Que viva pendiente de Vos y no de las palabras de los hombres. Que me alegre de estar solo. Que no ande buscando placeres mundanos. Que poco a poco me vaya librando de las inquietudes del mundo.
Jorge Benson (Tomas Moro: Un señor, un político, un santo. (Spanish Edition))
interesen sus cuestiones y me molesten sus fantasías. Que me guste pensar en Vos, pedirte ayuda, descansar en Vos, y que sólo trabaje en amarte. Que conozca mi propia maldad y miseria, humillándome en Tu presencia, llorando y purgando mis pecados, y sufriendo con paciencia la adversidad. Que me alegre de adelantar mi Purgatorio, sufriendo, feliz, las tribulaciones, avanzando por el camino estrecho que lleva a la Vida.
Jorge Benson (Tomas Moro: Un señor, un político, un santo. (Spanish Edition))
Debemos procurar ser guiados por el Espíritu Santo, esto no es sólo importante para la toma de buenas decisiones en nuestra vida diaria, sino para caminar hacia el cumplimiento de los planes de Dios en nuestra vida.
Gonzalo Sanabria (Cómo renovar y fortalecer mi vida de oración: Dios desea hablar contigo (Enseñanzas de Dios nº 4) (Spanish Edition))
Existe la realidad y el reconocimiento de esta realidad es la única filosofía práctica.
G.K. Chesterton
Un animalucho con un bonete en la cabeza, que cortando el hilo a todos los filósofos dijo que el sabía el secreto, y se hallaba en la Suma de Santo Tomas; y mirando de pies a cabeza a los dos moradores celestes, les sustentó que sus personas, sus mundos y sus estrellas habían sido creados para el hombre. Al oír tal sandez, nuestros dos caminantes hubieron de caerse uno sobre el otro pareciéndose de una risa inextinguible.
Voltaire, Micromegas
Admitindo que todos temos de conservar certo equilíbrio, o principal interesse consiste em saber como tal equilíbrio pode ser conservado. Foi esta questão que o paganismo tentou resolver e foi esta a questão que julgo ter sido resolvida pelo Cristianismo, e resolvida de forma deveras estranha. O paganismo declarou que a virtude estava no equilíbrio, e o Cristianismo veio declarar que ela estava no conflito: na colisão de duas paixões aparentemente opostas. [...] A coragem é quase uma contradição em seus termos. Significa um forte desejo de viver, que toma a forma de uma absoluta prontidão para morrer. 'Aquele que perder a sua vida salvá-la-á', este não é um lema de misticismo para santos e heróis: é um conselho diário para alpinistas e marinheiros. Podia estar impresso no guia do alpinista ou num manual de instrução militar. Este paradoxo é todo o princípio da coragem. [...] Um soldado cercado pelos inimigos, se quiser salvar-se, precisa combinar um forte desejo de viver com uma extraordinária despreocupação em relação à morte. Não deve apenas agarrar-se à vida, pois nesse caso seria um covarde e não escaparia. Não deve tampouco esperar pela morte, pois seria então um suicida e também não escaparia. Deve procurar a vida com um ímpeto de furiosa indiferença para com ela; deve desejar a vida como quem deseja água e, no entanto, deve beber a morte como quem bebe vinho. [...] Mas o Cristianismo fez mais: estabeleceu-lhe limites nas terríveis sepulturas do suicida e do herói, apontando a distância que separa aquele que morre por amor à vida daquele que morre por amor à morte. E isto tem mantido, desde então, acima das lanças europeias, o pendão do mistério da Cavalaria: a coragem cristã, que é um desdém pela morte, e não a coragem chinesa, que é um desdém pela vida. Comecei então a compreender que esta dupla paixão era a chave cristã para a ética em toda parte. Em todo lugar o credo tornava moderado o embate contínuo entre duas impetuosas emoções. Tomemos, por exemplo, a questão da modéstia, do equilíbrio entre o mero orgulho e a mera prostração. [...] O Cristianismo procurou, por este mesmo estranho expediente, salvar ambas as poesias [as poesias de ser orgulhoso e de ser humilde]. Separou as duas ideias e exagerou-as ambas. Por um lado, o homem tinha de ser mais presunçoso do que jamais fora e, por outro, tinha de ser mais humilde do que nunca. Considerado como Homem, sou a principal das criaturas; considerado como um homem, sou o maior dos pecadores. [...] A caridade é um paradoxo, como a modéstia e a coragem. Grosseiramente falando, a caridade significa uma dessas duas coisas: perdoar atos imperdoáveis ou amar pessoas que não são dignas de amor. [...] Um pagão sensato diria que existem pessoas a quem devemos perdoar e outras a quem não devemos perdoar. [...] E mais uma vez apareceu o Cristianismo. Chegou impetuosamente com uma espada e separou uma coisa da outra. Separou o crime do criminoso. Ao criminoso devemos perdoar até setenta vezes sete. Ao crime, não devemos perdoá-lo de forma alguma. [...] Devíamos ser muito mais austeros para com o roubo do que tínhamos sido anteriormente, e muito mais compassivos para com o ladrão do que nos mostráramos até então. [...] E, quanto mais eu observava o Cristianismo, mais verificava que ele tinha estabelecido uma regra e uma ordem e que o principal objetivo dessa ordem era possibilitar que as coisas boas se manifestassem com maior ímpeto.
G.K. Chesterton (Orthodoxy)