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el reptil, un hombre,
el buitre, un hombre honesto,
la mosca, un hombre, y el olivo, un hombre
y hasta el ribazo, un hombre
y el mismo cielo, todo un hombrecito!
...
en grupos de a uno, armados de hambre, en masas de a uno,
armados de pecho hasta la frente,
sin aviones, sin guerra, sin rencor,
el perder a la espalda
y el ganar
más abajo del plomo, heridos mortalmente de honor
locos de polvo, el brazo a pie,
amando por las malas,
ganando en español toda la tierra
...
y en que el enfermo pega con su mal, con su pastilla y su hijo
y en que el anciano pega
con sus canas, sus siglos y su palo
y en que pega el presbítero con dios!
¡Tácitos defensores de Guernica!
...
desde el duelo al que fluye el bien satánico,
se ve la gran batalla de Guernica.
...los muertos inmortales, de sentir, de ver, de oír
tan bajo el mal, tan muertos a los viles agresores
...
y al vuelo a cuatro patas, otro paso
y al cielo apocalíptico, otro paso
a los siete metales, la unidad
...
bajo el mal, bajo la cobardía, bajo la historia cóncava, indecible
...
a fatídico coágulo, a bandidos, a infiernazos,
a cielazos,
andando sobre duro vino, en multitud,
sobre la espuma lila, de uno en uno,
sobre huracán estático y más lila,
y al compás de las cuatro órbitas que aman
y de las dos costillas que se matan
”
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