Olvides Quotes

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Nunca olvides qué eres, porque desde luego el mundo no lo va a olvidar. Conviértelo en tu mejor arma, así nunca será tu punto débil. Úsalo como armadura y nadie podrá utilizarlo para herirte.
George R.R. Martin (A Game of Thrones (A Song of Ice and Fire, #1))
Bienvenida" Se me ocurre que vas a llegar distinta no exactamente más linda ni más fuerte ni más dócil ni más cauta tan solo que vas a llegar distinta como si esta temporada de no verme te hubiera sorprendido a vos también quizá porque sabes cómo te pienso y te enumero después de todo la nostalgia existe aunque no lloremos en los andenes fantasmales ni sobre las almohadas de candor ni bajo el cielo opaco yo nostalgio tu nostalgias y cómo me revienta que él nostalgie tu rostro es la vanguardia tal vez llega primero porque lo pinto en las paredes con trazos invisibles y seguros no olvides que tu rostro me mira como pueblo sonríe y rabia y canta como pueblo y eso te da una lumbre inapagable ahora no tengo dudas vas a llegar distinta y con señales con nuevas con hondura con franqueza sé que voy a quererte sin preguntas sé que vas a quererme sin respuestas.
Mario Benedetti
Que lo que quieres no haga que se te olvide lo que mereces.
Elísabet Benavent (La magia de ser Sofía (La magia de ser... #1))
No importa tener miedo, Sara. El miedo es bueno,El miedo nos hace ser valientes, si no tuvieramos miedo, ¿ que tendria de valiente un acto? El miedo nos activa y nos ayuda a sobrevivir, no lo olvides nunca, El miedo te hace sentir viva, Sara.¿ No lo sientes ahora?...
Neïra (Valiente Vera, pequeña Sara)
¿Por qué me lo cuentas ahora? -Porque no quiero que olvides lo distintas que son nuestras circunstancias. Si mueres y yo vivo, no quedará nada para mí en el Distrito 12. Tú lo eres todo para mí -me dice-. Nunca volvería a ser feliz. [pp. 367]
Suzanne Collins (Catching Fire (The Hunger Games, #2))
No existe un lugar al margen del mundo, pero hay momentos que hacen que te olvides completamente de él.
Chris Pueyo (El chico de las estrellas)
Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no escucha música, quien no halla encanto en si mismo. Muere lentamente quien destruye su amor propio, quien no se deja ayudar. Muere lentamente quien se transforma en esclavo del habito, repitiendo todos los días los mismos senderos, quien no cambia de rutina, no se arriesga a vestir un nuevo color o no conversa con desconocidos. Muere lentamente quien evita una pasión Y su remolino de emociones, Aquellas que rescatan el brillo en los ojos y los corazones decaidos. Muere lentamente quien no cambia de vida cuando está insatisfecho con su trabajo o su amor, Quien no arriesga lo seguro por lo incierto para ir detrás de un sueño, quien no se permite al menos una vez en la vida huir de los consejos sensatos… ¡Vive hoy! - ¡Haz hoy! ¡Ariesga hoy! ¡No te dejes morir lentamente! ¡No te olvides de ser feliz!
Martha Medeiros
A veces basta con mirar las cosas de frente para que empiecen a existir,a veces lo que parece imposible está al alcance de la mano
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
—Siempre que te acercas a una respuesta, el Universo juega contigo para que olvides la pregunta.
Albert Espinosa (El mundo azul. Ama tu caos (Spanish Edition))
La eternidad no hace que se olvide lo que has perdido, sólo que soportes la pérdida.
Cassandra Clare (City of Heavenly Fire (The Mortal Instruments, #6))
Le amaba como amamos sistemáticamente aquello que se nos escapa.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Y querría muchas cosas más pero el alfabeto no es suficientemente largo.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Cuando aceptas la maravilla la aceptas sin concesiones. Y toda maravilla tiene dos caras, Ariadna. No lo olvides nunca.
José Antonio Cotrina (La canción secreta del mundo)
Te amo. Lo suficiente como para camuflarte en mi piel. Nunca pares. Nunca olvides.
Colleen Hoover (Never Never: Part Three (Never Never, #3))
Recuerda esto, hijo mío, aunque olvides todo lo demás: un poeta es un músico que no sabe cantar. Las palabras tienen que encontrar la mente de un hombre si pretenden llegar a su corazón, y la mente de algunos hombres es lamentablemente pequeña. La música llega al corazón por pequeña o acérrima que sea la mente de quien la escucha.
Patrick Rothfuss (The Name of the Wind (The Kingkiller Chronicle, #1))
No olvides nunca que puedes tener al mejor compañero a tu lado, pero serás infeliz si no estás enamorada de tu propia vida.
Augusto Cury
Prometo rozar tu alas cuando olvides que sabes volar.
Chris Pueyo (Aquí dentro siempre llueve)
Sé que querías decirme que siempre me recordarías, Cassia, pero tengo miedo de que me olvides.
Ally Condie (Crossed (Matched, #2))
La verdad no podrá ser derrotada nunca, Sarene. Aunque la gente la olvide temporalmente. -Eventeo-
Brandon Sanderson (Elantris (Elantris, #1))
Pero no olvide tampoco que lo primero que se aprende en el Ejército es a ser hombres. Los hombres fuman, se emborrachan, tiran contra, culean. Los cadetes saben que, si son descubiertos, se les expulsa. Ya han salido varios. Para hacerse hombre hay que correr riesgo, hay que ser audaz. Eso es el Ejército, Gamboa, no sólo la disciplina.
Mario Vargas Llosa (La ciudad y los perros)
La clase trabajadora es más numerosa que la dirigente, y más fuerte. Dependen de nosotros para todo. Les proporcionamos la comida, construimos sus casas, les hacemos la ropa, y sin nosotros se mueren. No pueden hacer nada a menos que se lo permitamos. Nunca lo olvides.
Ken Follett (La caída de los gigantes)
Todos somos parte del mundo, hija. Nosotros somos el mundo. Si dañamos a Tara, nos dañamos a nosotros mismos. No lo olvides nunca. Ten fe en ti misma y no te rindas.
Laura Gallego García (Las hijas de Tara)
Te figuras que existe algo llamado la naturaleza humana, que se irritará por lo que hacemos y se volverá contra nosotros. Pero no olvides que nosotros creamos la naturaleza humana.
George Orwell (1984)
Te lo entrego no para que recuerdes el tiempo, sino para que de vez en cuando lo olvides durante un instante y no agotes tus fuerzas intentando someterlo. Porque nunca se gana una batalla dijo. Ni siquiera se libran. El campo de batalla solamente revela al hombre su propia estupidez y desesperación, y la victoria es una ilusión de filósofos e imbéciles.
William Faulkner (The Sound and the Fury)
Ahora conozco las penas del amor: unas penas tan extrañas que te quieren matar pero no te matan nunca.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
«Mira desde los cielos y ve cómo nos hemos convertido en el desprecio y la burla de las naciones; somos contados como ganado y llevados al matadero para ser degollados y destruidos o para ser golpeados y acusados. Sin embargo, a pesar de todo esto, no hemos olvidado Tu nombre; te lo imploramos: no nos olvides…»
Leon Uris (Éxodo)
Nada que temer, nada que cambiar Por ti me olvide de quien yo era en realidad Contigo me quede, como un diamante sin brillar No quiero ser así, espejo de tu vanidad Prefiero ser de mí Sin nada que temer, nada que cambiar Na na na Yo me siento así Bella y auténtica Na na na No seré por ti Una fuerte mental, no no [Chorus] Dices, que soy imperfecta, Que tu eres mi dueño, Quien no te madura todo el tiempo. Dices que hablo cosas tontas, Que no te merezco, Quien te crees que eres, dime quien. Te pido por favor, Que no me quieras controlar, Entregame tu amor, Sin condiciones nada mas. Permíteme vivir, soñando ésta realidad No ves que soy asi, distinta sin igual Na na na Yo me siento así Bella y auténtica Na na na No seré por ti Una fuerte mental, no no [Chorus] Dices, que soy imperfecta, Que tu eres mi dueño, Quien no te madura todo el tiempo. Dices que hablo cosas tontas, Que no te merezco, Quien te crees que eres, dime quien. [Bridge] Dices que soy una niña, Que me tienen consentida. Dices que soy diferente, Ciertamente, ciertamente. Soy lo que me gusta ser, No me intentes detener. Mírame bien, no estoy hecha de papel. Dices! [Chorus] Dices, que soy imperfecta, Que tu eres mi dueño, Quien no te madura todo el tiempo. Dices que hablo cosas tontas, Que no te merezco, Quien te crees que eres, dime quien. Eue soy imperfecta, Que tu eres mi dueño, Quien no te madura todo el tiempo. Dices que hablo cosas tontas, Que no te merezco, Quien te crees que eres, dime quien.
Selena Gómez
Uno de estos días, te enamorarás, hijo. No te conformes con cualquier persona. Elige a la chica que no sea fácil, una por la que tengas que luchar, y después nunca dejes de pelear. Nunca... —Toma un suspiro profundo—, dejes de luchar por lo que quieres. Y nunca... —Frunció el ceño—, olvides que mami te ama. Incluso si no puedes verme. —Una lágrima cayó por su mejilla—. Siempre, siempre te amaré.
Jamie McGuire (Walking Disaster (Beautiful, #2))
No olvides, Eragon, que nadie se ve a sí mismo como un villano y son pocos los que toman decisiones sabiendo que se equivocan.
Christopher Paolini (Eldest (The Inheritance Cycle, #2))
La vida es un regalo; no te olvides de vivirla.
Nicola Yoon (Everything, Everything)
Dicen que las mujeres muy bellas son inolvidables, espero que aprendas a vivir sin ella, aunque no la olvides.
Isabel Allende (Retrato en sepia)
Nunca olvides que, en mano de Dios, simplemente eres un granito de arena.
Omran Omais
«Amo quien fuiste y quien eres, porque si hay algo cierto en esta vida, mo anam, es que nací solo para amarte. Cuando mi corazón se silencie con mi muerte, nunca olvides que mi alma te seguirá amando.»
Caroline March (No todo fue un sueño (Spanish Edition))
Señor Furia, susúrreme palabras de amor. —Te amo, Rafaela. Te amo de esta manera inefable que es difícil de comprender. Durante estos nueve años, jamás te olvidé. Estabas en mi cabeza en cada maldito minuto de cada maldito día. Tu recuerdo era una maldición. Te confieso que quería deshacerme de él porque estaba volviéndome loco. La noche en que Elisabetta y yo nos comprometimos, tu rostro me perseguía como un fantasma y tu voz me repetía: No me olvide, señor Furia. No me olvide, señor Furia. ¡Rafaela, nunca vuelvas a dejarme! Ya no podría soportarlo. —¡Nunca, amor mío! Prométeme que moriremos juntos. —Lo prometo.
Florencia Bonelli (Me llaman Artemio Furia)
El amor y el odio son sentimientos fáciles de confundir: ni uno ni el otro tienen la menor piedad.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
A veces basta con mirar las cosas de frente para que empiecen a existir.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Te querría en cualquier cuerpo, en cualquier mundo, con cualquier pasado. No lo olvides nunca.
Claudia Gray (A Thousand Pieces of You (Firebird, #1))
—Haces que me olvide de todo —susurró a su oído y notó como ella se estremecía. —No parece un mal don —replicó ella con la voz entrecortada.
Altea Morgan (De Bombay a ti)
No olvides que la belleza está en el exterior porque florece desde el interior, y que quien se mira y se sonríe, encuentra la belleza y la libertad en sí mismo.
Andrea Compton (Y luego ganas tú: 5 historias contra el bullying)
Está cerca que tú te olvides de todo y también lo está que todos te olviden.
Marcus Aurelius (Meditaciones)
No digo que se lo merezcan. Y no te pido que olvides ni que finjas que no ocurrió nada. Sólo te pido que lo pienses.
Sylvain Reynard (Gabriel's Redemption (Gabriel's Inferno, #3))
Ser diferente y pensar diferente hace que la persona sea inolvidable. La historia no recuerda el olvidable. Honra la minoría única la mayoría no puede olvidar.
Suzy Kassem (Rise Up and Salute the Sun: The Writings of Suzy Kassem)
Estas pláticas que yo tengo con mi conciencia son a veces muy largas, duran días enteros; por eso no resulta que me ponga a contártelas en esta pobre carta. De verdad, cuídate mucho, come y duerme bien y sueña con los angelitos y no en esta cosa maligna que soy yo. Pero no me olvides.
Juan Rulfo (Cartas a Clara)
— Míralo por el lado positivo. Encuentro que eres muy valiente. Y... ¡te quiero! — ¿Puedes decirlo otra vez, por favor? ¿Y luego besarme para que me olvide de todo lo demás? — Puedo intentarlo.
Kerstin Gier (Smaragdgrün (Edelstein-Trilogie, #3))
Alguien elogió la locura Yo elogiaré tu alegría: la humildad de no pretender arreglar el mundo (el mundo empieza y termina contigo) que te levantes cantando (¿cómo puedes cantar?) que te acuestes cantando que no conozcas el rencor que no tengas miedo a la muerte Que te haga ilusión un teléfono un vestido nuevo una receta de cocina la visita de una lejana desconocida Que todo lo olvides todo Que te rías —un año después— de tus amores absolutos Que jamás te preguntes el sentido de la existencia Allí donde solo los verdaderamente humildes pueden ser alegres.
Cristina Peri Rossi (Aquella noche)
Sé diferente. Ser original. Nadie se acordará de una flor específica en el jardín cargado con miles de la misma flor amarilla, pero recordará el que logró cambiar su color a púrpura. Ser diferente y pensar diferente hace que la persona sea inolvidable. La historia no recuerda el olvidable. Honra la minoría única la mayoría no puede olvidar.
Suzy Kassem (Rise Up and Salute the Sun: The Writings of Suzy Kassem)
Si la juventud supiera, si la vejez pudiera.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Aunque olvides todo lo demás, acuérdate de esto: la inspiración que viene de fuera de uno mismo es igual que el calor en el horno. De él salen panecillos mediocres. Pero la inspiración que proviene de tu interior es como un volcán: puede cambiar el mundo.
Alan Bradley (The Weed That Strings the Hangman's Bag (Flavia de Luce, #2))
—Tatiana... Tatiana... Ta... tiana... —Calla, por favor. —No lo olvides. Dondequiera que estés, si puedes mirar al cielo y ver la constelación de Verseo, si ves su sonrisa y oyes cómo el viento estelar susurra tu nombre, sabrás que te estoy llamando para que vuelvas a Lazarevo. —No tendrás que llamarme, soldado —dice Tatiana, apoyando la cara en el brazo deAlexander—. Nunca me iré de aquí.
Paullina Simons (Tatiana and Alexander (The Bronze Horseman, #2))
Ahora ya sé que te he perdido, que lo he perdido todo. Y aun así no puedo dejar que te vayas para siempre y me olvides sin que sepas que no te guardo rencor, que yo lo sabía desde el principio, que sabía que te iba a perder y que tú nunca ibas a ver en mí lo que yo en tí. Quiero que sepas que te quise desde el primer día y que te sigo queriendo, ahora más que nunca, aunque te pese. No deseo nada más en el mundo que seas feliz, que todo a lo que aspiras se haga realidad y que, aunque me olvides con el tiempo, algún día llegues a comprender lo mucho que te quise''.
Carlos Ruiz Zafón (The Shadow of the Wind (The Cemetery of Forgotten Books, #1))
Durante un rato nos encontramos mirando la pared, absortos en nuestros pensamientos. Sobre el revoque alguien había pintado con letras negras una secuencia en latín. —¿Qué significa eso? —preguntó Leslie finalmente—. ¿No te olvides de llenar la nevera? —No —dijo Raphael—. Es una cita de Leonardo Da Vinci y los De Villiers se la robaron para usarla como lema familiar. —Oh, entonces seguro que traducido es algo así como «No es que seamos unos fanfarrones, es que realmente somos geniales». O «¡Lo sabemos todo y siempre tenemos razón!». Solté una risita. —«Unce tu carro a una estrella» —dijo Raphael—: eso significa. [...]
Kerstin Gier (Smaragdgrün (Edelstein-Trilogie, #3))
Puedes hacer que la gente olvide antes las murmuraciones siendo excelente en tu trabajo. Si les demuestras tu valía, no habrá rumor en el mundo capaz de contrarrestarlo. Probablemente siempre tengas que trabajar más que los demás para obtener el mismo resultado, pero no me parece que seas de las que se arrugan ante el trabajo duro. ¿Me equivoco?
Sylvain Reynard (Gabriel's Redemption (Gabriel's Inferno, #3))
- ¿Ya hacemos bien en comer sushi delante de tantos tiburones? - recapacitó Sheena. - Tranquila, solo un tiburón te devorará esta noche.
Lisa Suñé (No me olvides (Generación,#1))
Consideraba cada segundo de más a su lado como un segundo menos de sufrimiento.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Y no olvide lo peor: que este país es la hostia, y nosotros, usted,yo, tendremos que espabilarnos igual. El enemigo del pueblo es siempre el poder.
Jordi Sierra i Fabra (Dos días de mayo (Inspector Mascarell, #4))
Es un arma, un asesino. No lo olvides. Puedes usar una lanza como cayado para los paseos, pero eso no va a cambiar su naturaleza.
Madeline Miller (The Song of Achilles)
Entretanto, aférrate a la regla siguiente: no cedas a la adversidad, no confíes en la prosperidad y no olvides nunca el hábito de la fortuna de comportarse como le place. SÉNECA
Ryan Holiday (El obstáculo es el camino: El arte inmemorial de convertir las pruebas en triunfo (Para estar bien) (Spanish Edition))
La amistad lo es todo. La amistad vale más que el talento. Vale más que el Gobierno. La amistad vale casi tanto como la familia. Nunca lo olvides.
Mario Puzo (The Godfather)
Pero un buen beso tiene esas cosas: hace que una chica se olvide de sí misma durante un rato
Ali Hazelwood (The Love Hypothesis)
La eternidad no hace que se olvide lo que has perdido, solo que soportes la pérdida.
Cassandra Clare (City of Heavenly Fire (The Mortal Instruments, #6))
-No olvides este momento-añadió mi padre-, porque de los millares de manos que estreches en tu vida, tal vez no haya ni diez que valgan como la suya.
Edmondo de Amicis (Cuore)
Cuando olvides todo lo que has aprendido, y sólo entonces, estarás en la miseria
Odin Dupeyron (Y colorín colorado este cuento aún no se ha acabado)
Habla en francés cuando no te acuerdes de alguna palabra en castellano... acuérdate bien de andar con las puntas de los pies hacia afuera... y no te olvides nunca de quien eres!
Lewis Carroll (Alice’s Adventures in Wonderland / Through the Looking-Glass)
Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.
Casiodoro de Reina (Reina Valera 1960)
No olvides que lo que llamamos hoy realidad fue imaginación.
José Saramago
No olvides que el escritor es el único animal de rapiña que se alimenta de sus entrañas. (Don´t forget that writers are the only predators who feed on their own entrails).
Eduardo Liendo
Los únicos malditos son los hombres; su ambición y egoísmo desmedidos, Pete, no lo olvides jamás.
Miguel Ángel Naharro
Siempre y cuando uno no olvide que lo que antes era invisible -la cuota de intimidad de cada uno, la vida interior de todos- ahora es expuesto en la escena pública, uno comprenderá que quienes procuran la invisibilidad están condenados al rechazo, a la exclusión, condenados a ser sospechosos de algún crimen. La desnudez física, social y psíquica está a la orden del día.
Zygmunt Bauman (Consuming Life)
Parece ser que a veces se sueña lo que más se desea en el mundo. Puede sonar extraño pero nunca había soñado con tu vuelta. La creía posible y no soñaba con ella. Me pregunto si este sueño es una señal, la señal de que yo también te abandono. De que necesito soñar, puesto que ya no espero.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Los recuerdos son material sensible, volátil. Los recuerdos son partículas en constante y creciente alteración. Los recuerdos han hecho arder neuronas. Los recuerdos pueden hacer que lo olvides todo.
Rodrigo Fresán (El fondo del cielo)
He visto su mirada estas noches. He visto la botella de vino que se vaciaba demasiado deprisa y sus brazos alrededor de mi cuerpo intentado agarrarse pero sin encontrar dónde hacerlo puesto que ya no soy nada.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Ese aleteo de mariposa, incorrecto, que con el tiempo puede transformarse en un ciclón, si es tocado por los buenos corazones a lo largo de su recorrido, podrá llegar al fin de su vuelta convertido en brisa fresca. No lo olvides nunca, toda buena acción no sólo tiene el resultado que ves, sino que hace su aleteo mucho más allá de lo que ves, sus efectos van mucho más allá, en el mundo invisible, en el futuro de tus hijos. Su influencia se multiplica. No te conformes nunca con los ciclones que producen las malas acciones, sino combátelos con tus acciones amorosas. Pequeñas o grandes, todas tienen un valor y una influencia en el mundo intangible.
Viviana Rivero (Lo que no se dice)
Reposa como un guerrero lo hace siempre antes del combate, pero no olvides que tu corazón está junto a tu tesoro y éste tiene que ser encontrado para que todo lo que descubriste durante el camino pueda adquirir sentido.
Carla Medina (Soñando Despierta)
Cuando me muera y me tengan que enterrar Quiero que sea con una de tus fotografaas Para que no me de miedo estar abajo Para que no se me olvide como es tu cara Para imaginar que estoy contigo Y sentirme un poquito vivo...
Saúl Hernández
Era una estupidez total, yo tenía solo veinticuatro años; pero por no perderla habría hecho lo que fuera, un hijo, una boda, endeudarme durante treinta años, el coquetón piso de tres habitaciones y el monovolumen, por sus preciosos ojos habría acelerado mi vida.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
En cambio, es un triunfo de la vida que la memoria de los viejos se pierda para las cosas que no son esenciales, pero que raras veces falle para las que de verdad nos interesan. Cicerón lo ilustró de una plumada: «no hay un anciano que olvide dónde escondió su tesoro».
Gabriel García Márquez (Memories of My Melancholy Whores)
—Ni siquiera sé por qué vine—dijo ahora con furia después de mirarme intensamente —Simplemente sé que cuando lo supe, tú eras la única persona en la que podía pensar, la primera persona que apareció en mi mente. —Aquí estoy para ti, nunca olvides eso, yo jamás te voy a dejar. —¿Por qué? No deberías hacerlo, yo solo te he hecho sufrir, no me merezco que me apoyes, deberías echarme, odiarme, burlarte de mí desgracia. —Porque yo nuca podría dejarte, ni burlarme de ti, te amo y no importa lo que hagas no voy a dejar de hacerlo. —Lo lamento, pero yo no puedo.
Lolo Mayaya (Play With Me)
Si no quieres que un hombre sea políticamente desgraciado, no lo preocupes mostrándole dos aspectos de una misma cuestión. Muéstrale uno. Que olvide que existe la guerra. Es preferible que un gobierno sea ineficiente, autoritario y aficionado a los impuestos, a que la gente se preocupe por esas cosas.
Ray Bradbury (Fahrenheit 451)
—Por cierto, antes de que se me olvide. —Él rompió el silencio—. Creo que debería decírtelo, es algo que no puedo ocultar y que acabarás por enterarte. Ella se inquietó, por la forma en que lo decía no podía presagiar nada bueno. Lo miró en silencio, esperando que, fuera lo que fuese, no cambiara las cosas. Pero él parecía más ocupado en excitarla y no podía concentrarse si estaba pensando en lo que tenía que decir. Pero es que sus manos... sus manos estaban por todas partes, presionando un pezón, acariciando sus labios vaginales... Por no hablar de su boca, que la besaba en el cuello, en el hombro... Oh, qué delicia. Pero esa inquietud hacía que no pudiera disfrutar al cien por cien. Colocó la mano sobre la de él para detenerlo. —¿Qué eso tan importante que tienes que decirme? —Bah, nada, poca cosa. —Él intentó de nuevo meter la mano entre sus piernas. —¡Habla! —Pues nada, que te quiero —dijo él con ese tono pedante, como si dijera la hora. Ella se quedó inmóvil al escucharlo. ¿Cómo podía ser tan retorcido? Aunque... era «su retorcido» y lo quería por eso; así que sonrió, le dio acceso y buscó una réplica contundente. —Sólo tú puedes decir algo importante de forma tan enrevesada —le respondió alegre.
Noe Casado (Treinta noches con Olivia)
A medida que crezcas, verás a los blancos estafando a los negros, todos los días de tu vida, pero te diré una cosa, y no la olvides: siempre que un hombre blanco abusa de un negro, no importa quién sea, ni cuán rico sea, ni cuán distinguida haya sido la familia de que procede, ese hombre blanco es basura.
Harper Lee (Matar a un ruiseñor)
«No es lo que ha sucedido lo que molesta a un hombre, dado que lo mismo puede no molestar a otro. Es su juicio sobre lo sucedido». En un contexto distinto, Epicteto apunta en una dirección similar: «No olvides que no es el hombre que te envilece o golpea aquel que te insulta, sino tu propio juicio de que este hombre te insulta. Por lo tanto, cuando alguien te irrita, ten por seguro que es tu propia opinión la que te ha irritado. Y comprométete a no dejarte llevar por las impresiones externas, dado que una vez que ganes tiempo y postergues tu reacción, podrás más fácilmente llegar a ser el amo de ti mismo».
Rafael Echeverría (Ontología del lenguaje)
—Empecemos de nuevo —me dijo—. Lo primero que hay que hacer siempre es presentarse, por muy inferior que me creas no olvides que no dejo de ser una persona, quizás una persona que no ha tenido la suerte que tienes tú, que no puede permitirse ese coche, pero una persona, no olvides nunca eso, ¿vale, colega?
Eloy Moreno (El regalo)
¿Tú crees que una relación tiene como objetivo destrozar los sueños del otro?
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Después de todo Blanca, ¿no es ése el sentido del amor: la transformación? Míranos a Sofía, a ti y a mí. Lo bello de nuestra amistad es cuánto hemos transformado una en la otra.
Marcela Serrano (Para que no me olvides)
Más que besarla, más que acostarnos juntos, más que ninguna otra cosa, ella me daba la mano, y eso era amor.
Marcela Serrano (Para que no me olvides)
- Siento como si fuera mi primera vez - confesó Matt. - Que sea nuestra primera vez, cambiemos el pasado ahora - respondió excitada y sincera -. Hazlo realidad.
Lisa Suñé (No me olvides (Generación,#1))
- Por ti, iría al infierno mil veces - acercó sus labios a los de él y lo besó.
Lisa Suñé (No me olvides (Generación,#1))
No creo que alguien que tiene lágrimas dentro pueda ser realmente malo.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
Quedaban sus palabras, adiós, que tengáis suerte, adiós, te quiero más que nunca, adiós, me voy con la alegría de haberte conocido, adiós, habla a mis hijos de mí, de las ideas por las que voy a morir, adiós, busca a un buen hombre, cásate con éñ y sé feliz, pero no me olvides, adiós, mi amor, cuánto te he querido y qué poco tiempo hemos tenido para estar juntos, adiós, hijos míos, sed muy buenos y ayudad mucho a vuestra madre, adiós, cariño, adiós, vida mía, adiós, adiós, adiós, y todas las despedidas eran parecidas, pero todas distintas, distintas as mujeres que no podían terminar de leer en vox alta el papel que temblaba entre sus manos, idéntico el hueco que cada nueva carta abría en mi cuerpo agujereado, incapaz de abrigar tanto adioses
Almudena Grandes (Las tres bodas de Manolita (Episodios de una guerra interminable, #3))
No es solamente necesidad de ternura sino también necesidad de ser tierno para el otro: nos encerramos en una bondad mutua, nos materializamos mutuamente; volvemos a la raíz de toda relación, allí donde necesidad y deseo se juntan. El gesto tierno dice: pídeme lo que sea que pueda aplacar tu cuerpo, pero tampoco olvides que te deseo un poco, ligeramente, sin querer tomar nada enseguida.
Barthes Roland
No olvides que el estado natural del hombre es una postura erguida, una mente intransigente y un paso vivaz capaz de recorrer caminos ilimitados. No permitas que se extinga tu fuego, chispa a chispa, cada una de ellas irremplazable, en los pantanos sin esperanza de lo aproximado, lo casi, lo no aún, lo nunca jamás. No permitas que perezca el héroe que llevas en tu alma, en solitaria frustración por la vida que merecías pero que nunca pudiste alcanzar.
Ayn Rand (La Rebelión de Atlas)
Ya está. La cagaste otra vez. Hoy tampoco pudiste. Olvidate. Quedate en cama, revolcate en tu sueño como un cerdo, no salgas ni veas a nadie. Esta noche, cuando el insomnio te tenga levantado hasta el amanecer y sientas que te estás convirtiendo en un extraterrestre que ya no puede salir al mundo exterior, te vas a acordar de lo que te dije hoy. Ahora, seguí. Ni se te ocurra levantarte: el mal ya está hecho y por lo menos disfrutá –ja– de un par de horitas de sueño más.
Carlos Gamerro (Las islas)
De tantos líos que me meto, el tuyo ha sido tan total. Pero ahora busco la forma mejor, de que olvides y olvidarme yo. Ya no encajo, no te engañes, en tu guión. No pares aún que sigue el aplauso, si el mundo paró sólo un instante en mis manos ya no se va a parar más. No quiero seguir ensayando en mi cuarto para hacer un papel, que me negaron los años el tiempo no ha perdonado. Y me he portado, como un actor casi acabado sé que al bajar del escenario me partiré por ti las manos a golpes contra el decorado.
Alejandro Sanz
Creo que ni cuando sea una viejecita hecha y derecha conseguiré comprender por qué las personas se matan unas a otras por nada, es decir, por petróleo, poder, fronteras, dioses que se parecen como dos gotas de agua, lo único que no tienen el mismo nombre.
Delphine Bertholon (Nunca olvides que te quiero)
—Antes de que se me olvide. ¿Te he dicho ya, lucero del alba, lo mucho que te quiero? Ella puso los ojos en blanco. James, por increíble que pareciera, se había empeñado en agasajarla con constantes frases románticas, a cual más cursi. Incluso le sorprendió un día en su despacho leyendo un libro de poesía y copiando versos en un papel para dedicárselos. Samantha sabía que era su forma de castigarla por obligarle a declararse de aquella manera. Ahora tendría que aguantar indefinidamente las cursilerías de su marido.
Noe Casado (A contracorriente (Familia Boston, #2))
-Mi meta en la vida es llegar a ser un adjetivo -dijo-. Que la gente vaya por ahí diciendo: «Eso era tan bankheadiano», o «Un poco demasiado bankheadiano para mi gusto». -Bankheadiano suena bien -dijo Madeleine. -Es mejor que bankheadesco. -O bankheadino. -La terminación en «ino» es horrible la mires por donde la mires. Hay joyciano, shakesperiano, faulkneriano. Pero en «ino». ¿Quién hay por ahí que sea algo terminado en «ino»? -¿Thoma Mannino? -Kafesco -dijo-. ¡Pynchonesco! Mira, Pynchon es ya un adjetivo. Gaddis. ¿Cómo sería para Gaddis? ¿Gaddiesco? ¿Gaddisio? -No, con Gaddis no se puede hacer —dijo Madeleine. -No -dijo Leonard- Ha tenido mala suerte, Gaddis. ¿Te gusta Gaddis? -Leí un poco de Los reconocimientos -dijo Madeleine. Doblaron Planet Street y subieron por la pendiente. -Belloviano -dijo Leonard-. Es superbonito cuando se cambia alguna letra. Con nabokoviano no pasa: Nabokov ya tiene la «v». Y Chéjov también: chejoviano. Los rusos lo tienen fácil. ¡Tolstoiano! El tal Tolstói era un adjetivo a la espera de formarse. -No te olvides del tolstoianismo -dijo Madeleine. -¡Dios mío! -dijo Leonard-. ¡Un nombre! Jamás había soñado con llegar a ser un nombre. -¿Qué significaría bankheadiano? Leonard se quedó pensativo unos segundos. -De o relativo a Leonard Bankhead (norteamericano, nacido en 1959). Caracterizado por una introspección o inquietud excesiva. Sombrío, depresivo. Véase caso perdido. Madeleine reía. Leonard se detuvo y la cogió del brazo, mirándola con seriedad. -Te estoy llevando a mi casa -dijo. -¿Qué? -Todo este tiempo que llevamos andando. Te he estado llevando hacia mi casa. Eso es lo que hago normalmente, al parecer. Es vergonzoso. Vergonzoso. No quiero que sea así. No contigo. Así que te lo estoy diciendo. -Ya me lo había figurado, que íbamos a tu casa. -¿Sí? -Te lo iba a decir. Cuando estuviéramos más cerca. -Ya estamos cerca. -No puedo subir. -Por favor. -No. Esta noche no. -Hannaesco -dijo Leonard-. Testarudo. Dado a posturas inamovibles. -Hannaesco -dijo Madeleine-. Peligroso. Algo con lo que no se juega. -Quedo advertido. Se quedaron de pie, mirándose, en el frío y la oscuridad de Planet Street. Leonard sacó las manos de los bolsillos para encajarse la melena detrás de las orejas. -Puede que suba sólo un minuto -dijo Madeleine.
Jeffrey Eugenides (The Marriage Plot)
Si no quieres que un hombre sea políticamente desgraciado, no lo preocupes mostrándole dos aspectos de una misma cuestión. Muéstrale uno. Que olvide que existe la guerra. Es preferible que un gobierno sea ineficiente, autoritario y aficionado a los impuestos, a que la gente se preocupe por esas cosas. Paz, Montag. Que la gente intervenga en concursos donde haya que recordar las palabras de las canciones más populares, o los nombres de las capitales de los Estados, o cuánto maíz cosechó Iowa el último año. Llénalos de noticias incombustibles. Sentirán que la información los ahoga, pero se creerán inteligentes. Les parecerá que están pensando, tendrán una sensación de movimiento sin moverse. Y serán felices, pues los hechos de esa especie no cambian. No les des materias resbaladizas, como filosofía o psicología, que engendran hombres melancólicos. El que pueda instalar en su casa una pared de TV, y hoy está al alcance de cualquiera, es más feliz que aquel que pretende medir el universo, o reducirlo a una ecuación. Las medidas y las ecuaciones, cuando se refieren al universo, dan al hombre una sensación de inferioridad y soledad. Lo sé, lo he probado. Al diablo con esas cosas. ¿Qué necesitamos entonces? Más reuniones y clubes, acróbatas y magos, automóviles de reacción, helicópteros, sexo y heroína. Todo lo que pueda hacerse con reflejos automáticos.
Ray Bradbury (Fahrenheit 451)
—Recuerda todo lo que has visto en tu vida. Los olores, los sonidos, las luces y las sombras de todo lo que alguna vez tocaste. Recuerda los paisajes que has visitado. Recuerda todo eso, hija, porque ya forman parte de tu pasado. Nunca debes olvidar que vienes de aquí, de este planeta maravilloso. Que fuiste criada con amor bajo un techo azul y diste tus primeros pasos en el verde. No olvides que tus alimentos fueron frutas que cayeron de los árboles y vegetales que crecieron en nuestros suelos —el ascensor se detuvo—. Recuerda el calor del sol en tu frente y el sonido de las cigarras por la noche. Recuerda a la tierra de los insectos y animales más maravillosos que puedas ver jamás. —Papá hizo una pausa. —Tan solo recuerda todo esto.
TOMAS ANDREI
«¡Oh, mentes candorosas! »Para que no se olvide el tema capital, por doquier hemos visto sin haberlo buscado, de lo excelso a lo bajo de la escala fatal, el tedioso espectáculo del inmortal pecado: »la mujer, vil esclava, estulta y orgullosa, que adorándose ríe y se adora bestial; el hombre, ávido déspota de alma licenciosa, esclavo de la esclava y afluente de albañal; »el verdugo gozoso, el mártir sollozante; el festín que sazona el alma y la perfuma; veneno del poder del tirano exultante, y el pueblo, fiel al látigo que lo humilla y abruma; »religiones que se asemejan a la nuestra, odas en pos del cielo; la pura Santidad, tal en lecho de pluma un gazmoño se muestra, buscando en el cilicio la voluptuosidad; »la Humanidad locuaz, que en su genio porfía y loca, hoy como antes, con la luz por testigo, grita a Dios, en su colérica agonía: “Oh tú, mi semejante, maestro, ¡te maldigo!”.
Charles Baudelaire (Les Fleurs du Mal)
Clary Fray. - La voz en su cabeza era divertida, y también conocida. No tenía sonido, pero reconoció la forma de los pensamientos, del modo en que reconoces la forma en que alguien se ríe o respira. “Hermano Zachariah. ” Resignadamente, devolvió la estela a su sitio, y se acercó a él, deseando que Isabelle se hubiera quedado con ella.-Asumo que estás aquí para ver a Jonathan,- dijo, levantando la cabeza de su postura meditativa. Su cara todavía estaba en las sombras debajo de la capucha, aunque pudo ver la forma de unos pómulos angulosos. - A pesar de las órdenes de la Hermandad – “Por favor, llámelo Jace. Es demasiado confuso del otro modo. ” -Jonathan es buen nombre antiguo de Cazadores de Sombras, el primero de los nombres. Los Herondale siempre conservan los nombres en la familia- “Él no fue nombrado por un Herondale,” señaló Clary.“Aunque tiene una daga de su padre. Dice S.W.H. en la hoja. ” -Stephen William Herondale. - Clary dio otro paso hacia las puertas, y hacia Zachariah. “Sabes un montón sobre los Herondale,” dijo.“Y de todos los Hermanos Silenciosos, pareces el más humano. La mayoría de ellos nunca muestran ninguna emoción. Son como estatuas. Pero tú pareces sentir cosas. Recuerdas tu vida. ” -Ser un Hermano Silencioso es estar vivo, Clary Fray. Pero si te refieres a si recuerdo mi vida antes de la Hermandad, lo hago. - Clary respiró profundo.“¿Alguna vez estuviste enamorado? ¿Antes de la Hermandad? ¿Hubo alguien por quien hubieras muerto?” Hubo un largo silencio.Luego: -Dos personas,- dijo el Hermano Zachariah. – Hay recuerdos que el tiempo no borra, Clarissa. Pregúntale a tu amigo Magnus Bane, si no me crees. La eternidad no hace que olvides las pérdidas, solo las vuelve soportables.
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