Cuervos Quotes

We've searched our database for all the quotes and captions related to Cuervos. Here they are! All 100 of them:

She was thinking of doing a little Cuervo therapy.
Kelly Moran (Tracking You (Redwood Ridge #2))
—¡Mírame! —exigí. Algo confuso, obedeció. —Mírame como siempre lo hacías mientras buscabas aquello que tanto anhelabas de mí. Él abrió los ojos claramente impactado. Clavó su felina mirada en la mía durante un largo instante en el que dejé brotar todo el amor que me inspiraba. Una chispa encendió el claro verdor de su mirada. Lo había visto. —Sí —confirmé emocionada—, lo has conseguido, maldito. Me has robado el corazón. Te amo tanto que este tiempo sin ti ha sido la tortura más cruel. Y, déjame advertirte algo: si vuelves a tocar a otra mujer, te juro que te arrancaré los genitales y se los daré de comer a los cuervos.
Lola P. Nieva (Los tres nombres del lobo (Lobo, #1))
No hay nada en este mundo que desee más. Lo intento desde el primer día que te vi, con todas mis fuerzas. Quiero odiarte, necesito odiarte...
Maria Martinez (El encanto del cuervo)
Si, los cuervos son traviesos, les gusta jugar trucos en nosotros, pero también son extremadamente fieles a su especie. Cuando un cuervo esta luchando, buscara a su especie para sobrevivir. Se cuidan unos a otros como a una familia, lazos de sangre o no.
Julie Hockley (Crow's Row (Crow's Row, #1))
Yo no soy el chico bueno y perfecto de la peli. Lo siento, es lo que hay y creí que lo sabías. Hago apuestas, soy capaz de darle una paliza a un tío si creo que la merece o romperle el brazo al que se atreva a tocarte. No suelo poner la otra mejilla, y quien me la juega lo paga caro. Lo que ves es lo que hay.
Maria Martinez (El encanto del cuervo)
Abby, cada palabra es cierta y lo sabes, está en tus recuerdos por mucho que intentes ignorarlos, pero al final lo recordarás. Incluso quién eres en realidad. Ojalá estuvieras loca de verdad, al menos eso podría manejarlo.
Maria Martinez (El encanto del cuervo)
Mr. Cuervo and I - and all of his Mexican cousins are no longer on speaking terms
K.A. Tucker (Five Ways to Fall (Ten Tiny Breaths, #4))
la voluntad de los favoritos del príncipe. Así lo ha dispuesto la naturaleza: Cada uno se pitra por sus propios descubrimientos. ¡Al cuervo le ríe su cría y a la mona le gusta su hija!
Thomas More (UTOPÍA (Spanish Edition))
Still nothing. No calls of outrage from the family and not one call or text from that asshole telling me how sorry he is. Well, fuck him, Tate thought, dropping the phone back to where it had been, as he lifted the bottle of Cuervo to his lips. Actually, don't fuck him. He'd like it too much.
Ella Frank (Try (Temptation, #1))
Y, entonces, abrí la puerta de par en par, y ¿qué es lo que vi? ¡Las tinieblas y nada más!
Edgar Allan Poe (El cuervo)
Como una bandada de cuervos posados en las ramas del árbol del ahorcado, así las amigas de Angustias estaban sentadas, vestidas de negro, en su cuarto, aquellos días.
Carmen Laforet (Nada)
Ningún esfuerzo convierte a un cuervo negro en un halcón blanco. Anwar-i-Suhaili
Idries Shah (The Dermis Probe)
Cuervos sobre la llanura sembrada de muertos, como en las viejas baladas.
Ismail Kadare (El cortejo nupcial helado en la nieve)
Los versos que resuenan en su cerebro le parecen graznidos de cuervos; le gustaría arrancarse la memoria.
Robert Walser (Historias)
¿En qué piensas cuando hueles nuestras velas, mi niña? «En Invernalia —le podría haber respondido—. Huelen a nieve, a humo y a agujas de pino. Huelen a los establos. Huelen a las risas de Hodor, y a Jon y a Robb entrenándose juntos en el patio, y a Sansa cantando alguna canción idiota sobre alguna bella dama. Huelen a las criptas donde están sentados los reyes de piedra; huelen a pan caliente en el horno; huelen al bosque de dioses. Huelen a mi loba y huelen a su pelaje; es casi como si la tuviera al lado.»
George R.R. Martin
En su cimbreo rojo rubí oye el cuervo cantar a los muertos, apenas conoce el precio, apenas la fuerza, el poder se alza y el Círculo se cierra. Del orgulloso león de faz de diamante, vela el súbito hechizo la luz brillante. Con el sol que agoniza él cambia la suerte, y el final revela, del cuervo, la muerte. De los Escritos secretos del conde de Saint Germain
Kerstin Gier (Saphirblau (Edelstein-Trilogie, #2))
¡Ay, si hoy viviera Cuervo y oyera en lo que se convirtió esto! ¡Wow! «Wow» es la interjección de asombro que está hoy de moda. La tomaron del inglés. Suena como un perro ladrando. Hasta las interjecciones están anglizadas. Nos putiaron el idioma.
Fernando Vallejo (Peroratas)
Los dos ejércitos entrechocaron con un estruendo ensordecedor. Picas entrecruzadas con lanzas, martillos contra escudos, espadas contra yelmos, mientras por encima revoloteaban los hambrientos cuervos rapaces soltando sus ásperos graznidos, en un frenesí desatado por el olor de la carne fresca.
Christopher Paolini (Eldest (Inheritance, #2))
Te lo prometo, Matthias. Te llevaré a casa. —Nina —dijo él, presionando la mano de ella sobre su corazón—. Ya estoy en casa.
Leigh Bardugo (Reino de ladrones (Seis de cuervos, #2))
Para aprender no se necesitan maestros: libros sí.
Fernando Vallejo El cuervo blanco
Hay que contar siempre con lo peor, y luego hay que hacer contra ello todo lo que se pueda.
Michael Ende
I have shamed Mr. Cuervo
K.A. Tucker
Ando como el que va por su destino oyendo un clima oscuro de relojes, de manos, de preguntas, de papeles, de ensangrentados cuervos y cordeles.
Vicente Gerbasi (Los espacios cálidos)
Durante la década de 1980 el gobierno de Estados Unidos crió a los cuervos que hoy le sacan los ojos.
Anabel Hernández (Los señores del narco (Edición revisada y actualizada) (Spanish Edition))
los cobardes, como los cuervos: se alimentan de los valientes muertos.
David Mitchell (The Thousand Autumns of Jacob de Zoet)
En una bandada de blancas palomas, un cuervo negro añade más belleza incluso que el candor de un cisne
Giovanni Boccaccio (Decameron (French Edition))
«¿Cuánto vale una corona si un cuervo puede cenar carne de rey?»
George R.R. Martin (A Feast for Crows (A Song of Ice and Fire, #4))
Las ramas apenas mostraban fragmentos de lo que ocurría allí arriba, y parecía envolverlo, lo atrapaba entre sus brazos puntiagudos y lleno de cuervos
José Manuel Saquete Fuenmayor (Etenra I (Spanish Edition))
Halló la espada y la armadura enterradas a diez pasos bajo tierra, enredadas en las raíces de un árbol oscuro partido en la antigüedad por un rayo certero, donde habían anidado diez cuervos de garras blancas.
Colectivo Juan de Madre (Bajo la Influencia (Libro de Remezclas, Versiones y otras formas de Plagio))
Reva had an interesting method of mixing her drinks. After each sip of Diet Mountain Dew, she’d pour a little Jose Cuervo into the can to take up the space her sip had displaced, so that by the time she finished, she was drinking straight tequila.
Ottessa Moshfegh (My Year of Rest and Relaxation)
Reva had an interesting method of mixing her drinks. After each sip of Diet Mountain Dew, she’d pour a little Jose Cuervo into the can to take up the space her sip had displaced, so that by the time she finished, she was drinking straight tequila. It was fascinating to me.
Ottessa Moshfegh (My Year of Rest and Relaxation)
Creo que el mundo se acabará en blanco y negro, como una película antigua. (El cabello negro como ala de cuervo, cielo, la piel tan blanca como la nieve.) Es posible que mientras tengamos colores podamos seguir adelante. (Labios tan rojos como la sangre, sigo recordándomelo.)
Neil Gaiman (Objetos frágiles (Bestseller (roca)) (Spanish Edition))
Caminas por el patio de la horca, tienes una soga al cuello y un cuervo en cada hombro, esperando para arrancarte los ojos, y el árbol de la horca tiene unas raíces muy profundas, pues va desde el cielo hasta el infierno, y nuestro mundo no es más que la rama de la que pende la soga.
Neil Gaiman (American Gods)
I have often raised an eyebrow at hearing him sing, as I push a cart down some Safeway aisle, of the spiritual complexities induced by he admixture of Cuervo Gold, cocaine, and nineteen-year-old girls (in the hands of a man of, shall we say, a certain age). At which point I look around Frozen Foods and wonder: "Is anyone else hearing this?
William Gibson (Distrust That Particular Flavor)
Escudriñando con atención estas tinieblas, durante mucho tiempo quedé lleno de asombro, de temor, de duda, soñando con lo que ningún mortal se ha atrevido a soñar;
Edgar Allan Poe (El cuervo)
El agua que bebo, la comida que como, la ropa que uso, la cama donde duermo; todo está determinado por la política, sea ésta buena o mala. La
Ngũgĩ wa Thiong'o (El brujo del cuervo)
Es necesario marcharse, antes de que la Culpa una sus filas a las de la Piedad y juntas asalten el castillo de la Tentación.
Ismael Martínez Biurrun (Mujer abrazada a un cuervo)
mi alma, fuera del círculo de esta sombra que yace flotante sobre el suelo, no podrá volver a elevarse. ¡Nunca más!
Edgar Allan Poe (El cuervo)
«Otros amigos ya han volado lejos de mí; hacia la mañana, también él me abandonará como mis antiguas esperanzas». El pájaro dijo entonces: «¡Nunca más!».
Edgar Allan Poe (El cuervo)
Nunca más".
Edgar Allan Poe (El Cuervo)
Estremeciéndome al rumor de esta respuesta lanzada con tanta oportunidad, exclamé: «Sin duda lo que ha dicho constituye todo su saber, que aprendió en casa de algún infortunado, a quien
Edgar Allan Poe (El cuervo)
Por colinas, caballos veloces aplastaban la nieve profunda… A un lado un templo sagrado solitario asomaba al camino. ………………… Mas de pronto estalló la nevasca, y la nieve cayó a grandes copos. En el ala azabache un silbido, sobrevuela un cuervo el trineo. ¡El gemido auguraba desdichas! Los caballos de andar presuroso oteaban las sombras lejanas, y alzando sus crines… ZHUKOVSKI
Alexander Pushkin (La tempestad de nieve (Spanish Edition))
¿Qué dios loco y cruel le daría ojos a un hombre y luego le diría que los tuviera siempre cerrados, que no contemplara nunca toda la belleza que hay en el mundo? Solo un dios monstruoso, un demonio de la oscuridad.
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
No me aflige que mi cuota de mundo tenga poco de terrenal en ella: ni que años de amor, en un segundo de rencor, se esfumen sin dejar huella. No lamento que los desvalidos sean, querida, más dichosos que yo, pero sí que sufras por mi destino, siendo pasajero como soy.
Edgar Allan Poe (El Cuervo y todos los poemas [ilustrado] (Spanish Edition))
Cada vez que un extraño le preguntaba cómo se llamaba el perro, Laura respondía algo diferente: Fénix, Brillo, Espina, Cuervo, Colibrí. Creía que llamarlo de distintas maneras lo protegía; que así era menos probable que alguien se lo llevara de la puerta del supermercado o de otra parte. Cuando lo llamaran ¡Ánima! o ¡Nardo! o ¡Cardo! , él no volvería la mirada. Quien lo quisiera para sí o lo quisiera para mal tendría que hacer fuerza. Al final podía prevalecer y llevárselo, pero no llevarse el nombre verdadero, que la seguiría acompañando solo a ella.
Carolina Sanín (Los niños)
You said somewhere that you would like to write in one of the Nordic languages because they have more vowels, and vowels are more serious.’ You: ‘Did I say that? But Latin languages have more vowels than Nordic ones! I think what I meant was that I would like to write in one of those ancient northern tongues which were almost entirely made up on vowels. I’ve always felt it had something to do with the climate. They were hot languages, insulated by all those heaped up vowels.’ Me: ‘Ancient Hebrew only had consonants. Presumably so that there was no risk of them accidentally writing the secret name of God.’ You: ‘Or perhaps that was to do with the climate too. Consonants were more open and airy, more suited to a language of the desert.’ ‘You also said that you hated sans serif typefaces.’ ‘Oh, yes, they’re terrible! All those naked letters, reduced to their stark scaffolding. No-one can possibly recognise their mother tongue when printed in a Futura typeface. It lacks maternal warmth, it lacks friendliness.’ ‘I fear Cuervo may be right: we are somewhat unscientific.’ ‘And prejudiced too. Vowels can be dispensed with. A text written solely using vowels would be illegible, but in a text using only consonants, one could guess the vowels. A text in which X replaced all the Os, as in that story by Poe, might prove difficult to read, but would, ultimately, be decipherable.
Luis Fernando Verissimo (Borges and the Eternal Orangutans)
Vuelto a mi cuarto, mi alma toda, toda mi alma abrasándose dentro de mí, no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza. “Ciertamente —me dije—, ciertamente algo sucede en la reja de mi ventana. Dejad, pues, que vea lo que sucede allí, y así penetrar pueda en el misterio. Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio, y así penetrar pueda en el misterio.” ¡Es el viento, y nada más!
Edgar Allan Poe (El Cuervo y Otros Cuentos)
Creo que con lo expuesto aquí queda demostrado que en el exterminio de millones de hombres, y en su destierro al Gulag, hubo una coherencia fría y meditada y un incansable tesón. Que en nuestro país las cárceles nunca estuvieron vacías, sino repletas o incluso atiborradas. Que mientras vosotros andabais gratamente ocupados con los inofensivos secretos del átomo, estudiabais la influencia de Heidegger en Sartre, coleccionabais reproducciones de Picasso, viajabais en coche-cama a los balnearios o terminabais de edificar vuestra dacha en las afueras de Moscú, los "cuervos" recorrían incansablemente las calles y la Seguridad del Estado llamaba, con los nudillos o el timbre, a las puertas. Y creo que con lo expuesto queda demostrado también que los Órganos jamás vivieron de la sopa boba.
Aleksandr Solzhenitsyn (ARCHIPIELAGO GULAG I)
¡Hurra!, alegres danzantes que perdisteis la panza, trenzad vuestras cabriolas pues el tablao es amplio, ¡Que no sepan, por Dios, si es danza o es batalla! ¡Furioso, Belzebú rasga sus violines! ¡Rudos talones; nunca su sandalia se gasta! Todos se han despojado de su sayo de piel: lo que queda no asusta y se ve sin escándalo. En sus cráneos, la nieve ha puesto un blanco gorro. El cuervo es la cimera de estas cabezas rotas; cuelga un jirón de carne de su flaca barbilla: parecen, cuando giran en sombrías refriegas, rígidos paladines, con bardas de cartón. ¡Hurra!, ¡que el cierzo azuza en el vals de los huesos! ¡y la horca negra muge cual órgano de hierro! y responden los lobos desde bosques morados: rojo, en el horizonte, el cielo es un infierno… Zarandéame a estos fúnebres capitanes que desgranan, ladinos, con largos dedos rotos, un rosario de amor por sus pálidas vértebras: ¡difuntos, que no estamos aquí en un monesterio!
Arthur Rimbaud
Yo voy, lobo estepario, trotando por el mundo de nieve cubierto; del abedul sale un cuervo volando, y no cruzan ni liebres ni corzas el campo desierto. Me enamora una corza ligera, en el mundo no hay nada tan lindo y hermoso; con mis dientes y zarpas de fiera destrozara su cuerpo sabroso. Y volviera mi afán a mi amada, en sus muslos mordiendo la carne blanquísima y saciando mi sed en su sangre por mí derramada, para aullar luego solo en la noche tristísima. Una liebre bastara también a mi anhelo; dulce sabe su carne en la noche callada y oscura. ¡Ay! ¿Por qué me abandona en letal desconsuelo de la vida la parte más noble y más pura? Vetas grises adquiere mi rabo peludo; voy perdiendo la vista, me atacan las fiebres; hace tiempo que ya estoy sin hogar y viudo y que troto y que sueño con corzas y liebres que mi triste destino me ahuyenta y espanta. Oigo al aire soplar en la noche de invierno, hundo en nieve mi ardiente garganta, y así voy llevando mi mísera alma al infierno.
Hermann Hesse (Steppenwolf)
¿En qué momento el hombre se convierte en monstruo? ¿Cuándo se traspasa esa fina línea que separa la supervivencia de la crueldad? No es algo que suceda en un instante. Ocurre de forma gradual, del mismo modo que las gotas de agua llenan un cántaro hasta desbordarlo. Es el resultado de cada golpe que te ha derribado y te ha obligado a levantarte de nuevo, una y otra vez, hasta que algo dentro de ti se acaba rompiendo y no puedes pensar en otra cosa que no sea devolverle al mundo cada uno de esos golpes y demostrarle que los vientos del destino tendrán que soplar más fuerte si quieren doblegarte.
Cris Ortega (La sombra del cuervo rojo (volumen 1))
En su declaración, Reyes dijo no recordar bien qué le dijo a Roberto Izquierdo. De lo que estaba seguro era «que este me dijo que me quedara tranquilo y callado». El Roberto Izquierdo al que se refiere Reyes es Roberto Izquierdo Menéndez, en la actualidad uno de los hombres más ricos de Chile, parte del clan familiar también conocido como Grupo Izquierdo Menéndez, compuesto fundamentalmente por él y sus diez hermanos47. Actualmente, Izquierdo48 se encuentra investigado por el «caso Cascada», debido a que fue parte de las operaciones de la Sociedad Química y Minera (Soquimich), que, tanto la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) como la Fiscalía Centro Norte, han catalogado como «ficticias», debido a que su objetivo fue aumentar las utilidades de la empresa de forma fraudulenta.
Javier Rebolledo (A la sombra de los cuervos: Los cómplices civiles de la dictadura (Spanish Edition))
—Amigo mío, lo hecho está bien hecho; y mejor andaría el mundo si, en casos dados, no fuesen leguleyos trapisondistas y demás cuervos de Temis, sino duendes, los que administrasen justicia. Y con esto, buenas noches y que Dios y Santa María nos tengan en su santa guarda y nos libren de duendes y remordimientos.
Ricardo Palma (Tradiciones peruanas (Spanish Edition))
Festín de cuervos
Anonymous
el día anterior un cuervo blanco había llegado de la Ciudadela con un mensaje, noticias ya anticipadas pero no por ello menos temibles: el anuncio del fin del verano.
Anonymous
On the drive over, Richards kept marveling at the transforming power of having a felony to commit. His brother looked more like his "normal" self now than at any time in the previous weeks, that is, like a calm, basically reasonable individual, a manly sort of fellow with a certain presence. They talked about Richards' daughter and along other noncontroversial lines. At the airport Richards stood by quietly, if nervously, while Joel transacted his business at the ticket counter, then passed a blue daypack, containing the kilo of cocaine among other things, through the security x-ray. Richards had planned to stop right here--just say good-bye, go outside and start to breathe again--but for some reason he followed his brother through the checkpoint. In silence they proceeded down a broad, sparsely peopled corridor; Joel, with his daypack slung casually over one shoulder, a cigarette occupying his other hand, had given Richards his fiddle case to carry. Soon they became aware of a disturbance up ahead: a murmurous roar, a sound like water surging around the piles of a pier. The corridor forked and they found themselves in a broad lobby, which was jammed now with Hawaiian travelers, prospective vacationers numbering in the hundreds. Just as they arrived, a flight attendant, dressed like a renter of cabanas on the beach at Waikiki, picked up a mike and made the final announcement to board. In response to which, those travelers not already on their feet, not already formed in long, snaky line three or four people abreast, arose. The level of hopeful chatter, of sweetly anticipatory human excitement, increased palpably, and Richards, whose response to crowds was generally nervous, self-defensively ironic, instinctively held back. But his brother plunged right in--took up a place at the front of the line, and from this position, with an eager, good-natured expression on his face, surveyed his companions. Now the line started to move forward quickly. Richards, inching along on a roughly parallel course, two or three feet behind his brother, sought vainly for something comical to say, some reference to sunburns to come, Bermuda shorts, Holiday Inn luaus, and the like. Joel, beckoning him closer, seemed to want the fiddle case back. But it was Richards himself whom he suddenly clasped, held to his chest with clumsy force. Wordlessly embracing, gasping like a couple of wrestlers, they stumbled together over a short distance full of strangers, and only as the door of the gate approached, the flight attendant holding out a hand for boarding passes, did Richards' brother turn without a word and let him go.
Robert Roper (Cuervo Tales)
On the drive over, Richards kept marveling at the transforming power of having a felony to commit. His brother looked more like his "normal" self now than at any time in the previous weeks, that is, like a calm, basically reasonable individual, a manly sort of fellow with a certain presence. They talked about Richards' daughter and along other noncontroversial lines. At the airport Richards stood by quietly, if nervously, while Joel transacted his business at the ticket counter, then passed a blue daypack, containing the kilo of cocaine among other things, through the security x-ray. Richards had planned to stop right here--just say good-bye, go outside and start to breathe again--but for some reason he followed his brother through the checkpoint. In silence they proceeded down a broad, sparsely peopled corridor; Joel, with his daypack slung casually over one shoulder, a cigarette occupying his other hand, had given Richards his fiddle case to carry. Soon they became aware of a disturbance up ahead: a murmurous roar, a sound like water surging around the piles of a pier. The corridor forked and they found themselves in a broad lobby, which was jammed now with Hawaiian travelers, prospective vacationers numbering in the hundreds.
 Just as they arrived, a flight attendant, dressed like a renter of cabanas on the beach at Waikiki, picked up a mike and made the final announcement to board. In response to which, those travelers not already on their feet, not already formed in long, snaky line three or four people abreast, arose. The level of hopeful chatter, of sweetly anticipatory human excitement, increased palpably, and Richards, whose response to crowds was generally nervous, self-defensively ironic, instinctively held back. But his brother plunged right in--took up a place at the front of the line, and from this position, with an eager, good-natured expression on his face, surveyed his companions.
 Now the line started to move forward quickly. Richards, inching along on a roughly parallel course, two or three feet behind his brother, sought vainly for something comical to say, some reference to sunburns to come, Bermuda shorts, Holiday Inn luaus, and the like.
 Joel, beckoning him closer, seemed to want the fiddle case back. But it was Richards himself whom he suddenly clasped, held to his chest with clumsy force. Wordlessly embracing, gasping like a couple of wrestlers, they stumbled together over a short distance full of strangers, and only as the door of the gate approached, the flight attendant holding out a hand for boarding passes, did Richards' brother turn without a word and let him go.
Robert Roper (Cuervo Tales)
El mago de Oz (Lyman Frank Baum) - Tu subrayado en la página 21 | Location 318-319 | Añadido el sábado, 1 de noviembre de 2014 22:56:49 "—Si tuvieras cerebro serías tan hombre como cualquiera de ellos. El cerebro es lo único que vale la pena tener en este mundo, sea uno cuervo u hombre. ==========
Anonymous
«No hay hombre tan maldito como el que mata a los de su sangre.»
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
El cuerno que hacía sonar era negro, brillante, retorcido; lo tenía que sostener con las dos manos porque su longitud sobrepasaba la altura de un hombre.
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
—Ríete —le rugió. Sin embargo, el bufón gimió—. Ríete —le repitió al tiempo que le agarraba la garganta con una mano y le apuñalaba el vientre con la otra—. ¡Ríete!
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
Los campesinos nos dijeron que tiene el rostro destrozado, lleno de cicatrices, y que sus ojos son espantosos.
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
—Yo me llamo Pate —respondió—. Como el porquerizo.
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
A los cuervos se les considera emisarios de los dioses, y a su vuelo y graznidos, mensajes cifrados. El cuerpo del difunto, en algunas regiones del Tíbet, se entrega a las aves carroñeras para completar el ciclo de la existencia. El espíritu se representa en el cristianismo mediante una paloma blanca. En el Corán es un ave el símbolo de la inmortalidad del alma. Todas las religiones parecen beber de una fuente, de una base común.
Ramon Villero (El nudo infinito)
—El mundo no tiene corazón. —Entonces hay que cambiar el mundo. Darle
Ngũgĩ wa Thiong'o (El brujo del cuervo)
Por abundantes que fueran los peces en el mar, se necesitaba una red o un sedal y un anzuelo, como mínimo.
Ngũgĩ wa Thiong'o (El brujo del cuervo)
Hay una gran belleza en el hombre vestido de percal y calzado con sandalias, sin más armas que un bastón para andar y su credo de la no violencia, que se enfrenta al poderoso imperio británico, ¿no
Ngũgĩ wa Thiong'o (El brujo del cuervo)
Hay algunos que aman su historia y el color de su piel, y hay otros que odian su historia y el color de su piel...
Ngũgĩ wa Thiong'o (El brujo del cuervo)
If you wanna keep insisting on a chat so badly, I’m gonna need something to lubricate my conversational wheels,” she returned a little breathlessly as her hand tried to reach the clear bottle toward the back of the cabinet.  “So…” “So, I need the help of my three favorite conversationalists,” she bit out, her hand blindly feeling for the familiar bottle. Cal raised an eyebrow, his hands going to his hips.  “Three conversationalists, huh?” he snorted. “Yes,” she snapped.  “Jim, Jack, and their immigrant friend, Jose Cuervo, speak my language and Jose gets downright chatty after the third shot,” she informed him, smiling as she pulled down the last bottle and lined them up on the counter. 
Sarah O'Rourke (Tangled Hearts (Passion in Paradise, #3.5))
Si tienen miedo, las velas los tranquilizan. ¿En qué piensas cuando hueles nuestras velas, mi niña? «En Invernalia —le podría haber respondido—. Huelen a nieve, a humo y a agujas de pino. Huelen a los establos. Huelen a las risas de Hodor, y a Jon y a Robb entrenándose juntos en el patio, y a Sansa cantando alguna canción idiota sobre alguna bella dama. Huelen a las criptas donde están sentados los reyes de piedra; huelen a pan caliente en el horno; huelen al bosque de dioses. Huelen a mi loba y huelen a su pelaje; es casi como si la tuviera al lado.» —
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
—No es más que una espada —dijo con determinación. Pero sí que era algo más. Aguja era Robb, Bran, Rickon, su madre y su padre, hasta Sansa. Aguja era los muros grises de Invernalia y las risas de sus habitantes. Aguja era las nieves de verano, los cuentos de la Vieja Tata, el árbol corazón con sus hojas rojas y su rostro aterrador, el cálido olor a tierra de los jardines de cristal, el sonido del viento del norte contra los postigos de su habitación. Aguja era la sonrisa de Jon Nieve. «
George R.R. Martin (Festin de cuervos (Cancion De Hielo Y Fuego nº 4) (Spanish Edition))
—Déjame acompañarte. Veamos si eres tan interesante como pareces. —¿Y cómo sé yo que no me engañas? El cuervo hizo un movimiento vago con las alas. —Si estuvieses muerta, definitivamente serías aburrida, y no quiero eso. Aunque podría comerme tus ojos. Supongo que confío en que me parezcas más divertida que sabrosa.
Carlos Ruiz Santiago (Peregrinos de Kataik)
Cuervos, halcones y palomas De todos los documentos filtrados a los medios a comienzos de 2012, sin duda el más polémico y espectacular era el que involucraba a los cardenales Darío Castrillón y Paolo Romeo, y en el que se hablaba de una supuesta
Javier García Blanco (Historia negra de los papas (ENIGMAS Y CONSPIRACIONES) (Spanish Edition))
estaba motivada por otras razones de índole política. Sin duda, la presión de las luchas intestinas dentro del reino de san Pedro, con lobos, cuervos y halcones peleando entre sí por el control de la curia, había debilitado y vencido al pontífice de origen alemán. La pregunta que todo el mundo se hizo entonces fue: ¿quién iba a salir victorioso del cónclave que se celebraría en marzo? ¿Los sectores más conservadores de la curia, o una facción progresista,
Javier García Blanco (Historia negra de los papas (ENIGMAS Y CONSPIRACIONES) (Spanish Edition))
El intelectual es un loro; el sabio es un cuervo. Uno es repetitivo; otro es creativo!
Mehmet Murat ildan
Hay muchos que nacen mentalmente analfabetos y tienen un lugar en el mundo. Son como cuervos, cuyas lenguas sólo son capaces de escupir, que aprenden palabras sin saber su significado.
Taylor Caldwell (A Pillar of Iron)
Los logros se consiguen luchando para estar cada día más cerca de ellos.
F. Maradei (Plumas de Cuervo (La Estirpe Dorada #1))
La historia de la mutación de Licaón en lobo me hizo remontar a un ventoso día de primavera en Arcadia cuando había visto, sobre el mismo casquete de piedra caliza del monte Licaón, una imagen del rey fiera agazapado. Leí la historia de Jacinto y Adonis; de Deucalión y el Diluvio; y de cómo «las cosas vivientes» fueron creadas a partir del tibio fango nilótico. Y, en razón de lo que ahora sabía acerca de los Trazos de la Canción, se me ocurrió pensar que tal vez toda la mitología clásica representaba los vestigios de un gigantesco «mapa de canciones»: que todas las idas y venidas de los dioses y las diosas, las cuevas y los manantiales sagrados, las esfinges y las quimeras, y todos los hombres y mujeres que se transformaron en ruiseñores o cuervos, en ecos o narcisos, en piedras o estrellas… todos ellos se podrían interpretar en términos de una geografía totémica.
Bruce Chatwin (The Songlines)
De pronto, por primera vez en su vida, Caitlin no tuvo miedo de tener miedo. Le agitación de su pecho ya no la molestaba. En cambio, comenzó a serle útil. Le dio la bienvenida al miedo, lo aceptó por completo como una manera de evitar a los cuervos y los zombis a su alrededor.
Billy Phillips (The Color of Fear (Once Upon a Zombie, #1))
Christmases after his death were usually as unpredictable as they were untenable. It depended on how early in the day—or the evening before—her mother decided to start the festivities and who the guests would be—Jim Beam, José Cuervo or Jack Daniel. If the year had been especially successful, Johnnie Walker might replace all the others.
Alex Kava (Black Friday (Maggie O'Dell, #7))
Decía la leyenda que si los cuervos abandonaban la torre, la corona caería e Inglaterra con ella.
Galaxy Craze (The Last Princess (Last Princess, #1))
She’d managed to say the one word that was sure to send me to the bottom of a bottle. I had promised myself I would break off my relationship with Jose Cuervo, but it looked like I would be having a one-night stand with my ex tonight.
Lexi Blake (Ripper (Hunter, #1; Thieves, #6))
—¿Qué me haces? —preguntó lloroso al cuervo. —Enseñarte a volar. —¡No sé volar! —Pues estás volando. —¡No estoy volando, estoy cayendo! —Todo vuelo comienza con una caída —dijo el cuervo—.
George R.R. Martin (Juego de Tronos)
Gone on a Mexican cruise. C.” I chuckled, pretty sure the note meant C had gone ten rounds with Jose Cuervo and was sleeping it off.
Richard LeMieux (Breakfast at Sally's)
«Aprende de los cuervos. El que trata de arrebatar lo que no le pertenece puede perder hasta lo poco que tiene.»
J.J. Benítez (Nazaret (Caballo de Troya #4))
People without a toddler of their own will not understand how someone so cute will make you want to be single, living in a studio apartment with only a bottle of Jose Cuervo to keep you company.
Bunmi Laditan (Toddlers Are A**holes: It's Not Your Fault)
Cuando alguien se iba del pueblo, moríamos un poco, todos nos arrugábamos interiormente y era como si de pronto en nuestra sangre, por la oquedad del dolor que nos abría, se adentrasen lechuzas, cuervos, urracas, autillos, búhos...
Alejandro López Andrada (El viento derruido. La España rural que se desvanece)
UN CRIMINAL El acusado es pálido y lampiño. Arde en sus ojos una fosca lumbre, que repugna a su máscara de niño y ademán de piadosa mansedumbre. Conserva del obscuro seminario el talante modesto y la costumbre de mirar a la tierra o al breviario. Devoto de María, madre de pecadores, por Burgos bachiller en teología, presto a tomar las órdenes menores. Fue su crimen atroz. Hartóse un día de los textos profanos y divinos, sintió pesar del tiempo que perdía enderezando hipérbatons latinos. Enamoróse de una hermosa niña, subiósele el amor a la cabeza como el zumo dorado de la viña, y despertó su natural fiereza. En sueños vio a sus padres ?labradores de mediano caudal? iluminados del hogar por los rojos resplandores, los campesinos rostros atezados. Quiso heredar. ¡Oh guindos y nogales del huerto familiar, verde y sombrío, y doradas espigas candeales que colmarán las trojes del estío!. Y se acordó del hacha que pendía en el muro, luciente y afilada, el hacha fuerte que la leña hacía de la rama de roble cercenada. ................................................ Frente al reo, los jueces con sus viejos ropones enlutados; y una hilera de obscuros entrecejos y de plebeyos rostros: los jurados. El abogado defensor perora, golpeando el pupitre con la mano; emborrona papel un escribano, mientras oye el fiscal, indiferente, el alegato enfático y sonoro, y repasa los autos judiciales o, entre sus dedos, de las gafas de oro acaricia los límpidos cristales. Dice un ujier: «Va sin remedio al palo». El joven cuervo la clemencia espera. Un pueblo, carne de horca, la severa justicia aguarda que castiga al malo.
Antonio Machado (Campos de Castilla)
[...] aquellos grandes nobles no hacían más que alabar sin cabeza las palabras de la reina, lanzándose como una bandada de cuervos ávaros a picotear las migajas de su aprobación.
Esther Sánchez (Reina de hielo y sombras)
vinculadas
Javier Rebolledo (A la sombra de los cuervos (Spanish Edition))
Los cuervos se pelean por la carne de los muertos, se matan por sus ojos. Primero teníamos un rey; luego, cinco. Ahora, lo único que veo son cuervos que se pelean por el cadáver de Poniente.
George R.R. Martin (A Feast for Crows (A Song of Ice and Fire, #4))
Demasiado idiota para aprender y demasiado idiota para rendirme.
Juego de tronos: Festín de cuervos - George R. R. Martin
Todo el mundo miente cuando tiene miedo. Algunos dicen muchas mentiras; otros, pocas. Algunos sólo tienen una gran mentira y la dicen tan a menudo que casi llegan a creerla... Aunque en su interior siempre sabrán que sigue siendo mentira, y eso se reflejará en su rostro.
Juego de tronos: Festín de cuervos - George R. R. Martin
- Mi señor, grandes problemas tuve en la fuente. La encontré con presteza en una zona de hermosos frutales, pero estaba vigilada por esta fiera serpiente. Era amenazadora y tuve miedo de acercarme...
Iván Gimeno San Pedro (Cuentos del cielo. Una iniciación a la astronomía)
Mientras escribía sus cartas, el cuervo escudriñaba con la cabeza prácticamente inmóvil, contemplando con asombro maravillado la punta de la pluma, la tinta que se derramaba letra a letra sobre el papel y que iba dejando palabras y frases a su paso. Parecía como si el negro cuervo estuviera enamorado de Pakize .
Orhan Pamuk
Metaphor: «Tan introducido estáis ya entre los quehaceres del maligno que habéis olvidado hasta de dónde venís, pues aquí os devoran en cuerpo y alma, cual cuervos que no siegan ni siembran, sin granero ni alfolí, pues son como lirios. Y ya veis cómo crecen, que ni hilan y enloquecen» Answer: El texto sugiere que las personas han caído en la maldad y han perdido la conexión con su verdadera esencia. A pesar de su falta de esfuerzo productivo, su influencia malévola se expande y crece. Es una reflexión sobre cómo las personas pueden perderse en la maldad y olvidar quiénes son realmente. En este contexto, el uso simbólico de los lirios en el texto nos remite a una referencia bíblica en el Evangelio de Mateo. Jesús, al hablar de los lirios del campo, enseñó sobre la providencia divina y la importancia de confiar en Dios. Los lirios, aunque no hilan ni trabajan, son vestidos por Dios con belleza y esplendor.
David Silvestre (El Barbero de Verona)
La vida es breve, enamoraos, doncellas... Antes de que la flor carmesí se desvanezca de vuestros labios... Antes de que las mareas de la pasión se enfríen dentro de vosotras... Para aquellos que no conocen el mañana... La vida es breve, enamoraos, doncellas... Antes de que nuestras trenzas de cuervo comiencen a desvanecerse... Antes de que las llamas de vuestros corazones parpadeen y mueran... Para aquellos a quienes el hoy nunca volverá...
Akira Kurosawa (Ikiru)
«Al igual que el arado rompe la tierra, así romperá él las vidas de los hombres, y todo lo que fue se consumirá en el fuego de sus ojos. Las trompetas de la guerra sonarán al compás de sus pasos, los cuervos se alimentarán con su voz, y él llevará una corona de espadas.»
Robert Jordan (La Corona de Espadas)
Conocíamos ya la voz del tiplón, la del sochantre… la de los sepultureros medievales y la del vanidoso cuervo de la conseja. Pero todo no se ha descubierto de una vez… Y en el mundo hay ahora un ruido que no se había escuchado nunca… y un humo negro y acre de carne chamuscada que se agarra a la garganta del tenor y le hace aullar como a un perro leproso… La lepra del mundo, la sangre envenenada y el alma resentida cantan con una lengua espesa y con una laringe rota…
León Felipe (Nueva Antología Rota)
mañana negociaréis la paz. Con esa pluma larga de los abogados y de los estadistas, de los nuncios y de los cancilleres, de los agiotistas y de los banqueros; con esa pluma ubicua —garrocha y pértiga— de los chalanes, de los cuervos y de los coyotes, con esa pluma que hunde su hocico de oro en un pozo de sangre, y en otro de betún… mañana se firmará la paz.
León Felipe (Nueva Antología Rota)