Cuba Libre Quotes

We've searched our database for all the quotes and captions related to Cuba Libre. Here they are! All 10 of them:

Well, this is us, Jack. Cuban cane rum and yanqui Coca-Cola; Cuba Libre, 'free Cuba'. Only we call this cocktail 'ha-ha' now, because there's no Cuba and no freedom. Salad!
Jaxy Mono (Rum & Coke)
Miranda es el venezolano más célebre de esos tiempos y el primero que tuvo una conciencia exacta de los destinos de una América hispana libre. Caraqueño, mayor que Simón Bolívar con treinta y tres años, de noble cuna y muy apuesto, ha hecho de su vida el más ardiente y constante apostolado en pro de la independencia americana. Ingresa a los veintiún años al ejército español en España, y se destaca predominantemente en Marruecos y en Cuba. Toma parte, luego, en la guerra libertaria de los Estados Unidos y alcanza el grado de teniente coronel en la acción de Pensacola, convirtiéndose en singular amigo de Washington y de sus generales. Ante ellos –según testimonio de John Adams, presidente norteamericano más tarde– "adquirió la reputación de hombre que había hecho estudios clásicos, que poseía conocimientos universales y era consumado en el arte de la guerra; pasaba por ser muy sagaz, de imaginación inquieta y de una curiosidad insaciable; su tema constante era la independencia de la América del Sur".
Alfonso Rumazo González (Simón Bolívar (Spanish Edition))
Kennedy también aceptó el compromiso informal de no invadir Cuba, pero con condiciones: no solo la retirada de los misiles, sino también la finalización o, al menos, «una gran disminución» de cualquier presencia militar rusa (a diferencia de Turquía, en las fronteras de la Unión Soviética, donde no podía contemplarse nada semejante). Si Cuba dejaba de ser un «campamento armado, probablemente no invadiremos», en palabras del presidente. Añadió que si deseaba quedar libre de la amenaza de invasión, Cuba debía terminar su «subversión política» (expresión de Sheldon Stern) en Latinoamérica.23 La «subversión política» había sido un tema constante en la retórica de Estados Unidos durante años, invocada, por ejemplo, cuando Eisenhower derrocó el Gobierno parlamentario de Guatemala y precipitó ese país torturado a un abismo del cual todavía tiene que salir.
Noam Chomsky (¿Quién domina el mundo? (Spanish Edition))
Haití se ha independizado de Francia; la Nueva Granada ha quedado libre en la batalla de Boyacá dirigida por Bolívar, y Venezuela en la de Carabobo, asimismo comandada por el Libertador. Sucre ha conquistado la liberación del Ecuador en Pichincha. Al sur de América, las provincias del Río de la Plata y Chile, han sido también convertidas en Repúblicas autónomas. La propia España, por su parte, ha expulsado, con la ayuda de los ingleses, a las tropas napoleónicas y ha redactado una Constitución Liberal –Cortes de Cádiz, 1812–, en que han intervenido delegados americanos; pero esta novedad se presenta demasiado tarde y no logra detener la lucha por la independencia del Nuevo Mundo hispano. Por esos años, hay aspectos estrictamente negativos: algunos grandes han sido sacrificados: Francisco de Miranda muere en Cádiz, prisionero de los españoles (era mayor que Robinson con veinte años); en México han perecido, ajusticiados por la monarquía hispana, los clérigos libertadores Miguel Hidalgo y José María Morelos. Cuba no ha encontrado vía para su liberación. Robinson es testigo de la expansión del pensamiento político liberal en Europa. Pero, cerrado el ciclo napoleónico en Waterloo (1815), esa doctrina empieza a tambalear. Metternich encarna la reacción. Empiezan las rebeliones en Nápoles, Rusia, Francia, Portugal, Alemania, Grecia. Se hace, así, un contraste, se plasma la dicotomía: mientras en el Viejo Mundo aparece y se ensancha la crisis, con mengua del liberalismo, en América hispana este credo avanza y se fortalece, en tanto que se multiplican los éxitos bélicos contra España.
Alfonso Rumazo González (Simón Rodríguez, Maestro de América (Spanish Edition))
La emisora Radio Ciudad Primada de Cuba Libre era, precisamente, el medio encargado de concretar una realidad virtual más embustera aún que la de ríos, montañas y carreteras de nombres caprichosos, porque estaba construida sobre planes, compromisos, metas y cifras mágicas que nadie se ocupaba de comprobar, sobre constantes llamados al sacrificio, la vigilancia y la disciplina con los que cada uno de los jefes locales trataba de construir el escalón de su propio ascenso
Leonardo Padura (El hombre que amaba a los perros)
La Habana era una locura: yo creo que era la ciudad con más vida de todo el mundo. ¡Qué carajo París ni Nueva York! Demasiado frío... ¡Vida nocturna la de aquí! Verdad que había putas, había drogas y había mafia, pero la gente se divertía y la noche empezaba a las seis de la tarde y no se acababa nunca. ¿Te imaginas que en una misma noche podías tomarte una cerveza a las ocho oyendo a las Anacaonas en los Aires Libres del Prado, comer a las nueve con la música y las canciones de Bola de Nieve, luego sentarte en el Saint John a oír a Elena Burke, después irte a un cabaret a bailar con Benny Moré, con la Aragón, con la Casino de Playa, con la Sonora Matancera, descansar un rato vacilando los boleros de Olga Guillot, Vicentico Valdés, Ñico Membiela... o irte a oír a los muchachos del feeling, al ronco José Antonio Méndez, a César Portillo y, para cerrar la noche, a las dos de la mañana, escaparte a la playa de Marianao a ver el espectáculo del Chori tocando sus timbales, y tú ahí, como si nada, sentado entre Marlon Brando y Cab Calloway, al lado de Errol Flynn y de Josephine Baker. Y después, si todavía te quedaba aire, bajar a La Gruta, ahí en La Rampa, para amanecer metido en una descarga de jazz de Cachao con Tata Güines, Barreto, Bebo Valdés, el Negro Vivar, Frank Emilio y todos esos locos que son los mejores músicos que ha dado Cuba? Eran miles, la música estaba en la atmósfera, se podía cortar con un cuchillo, había que apartarla para poder pasar...
Leonardo Padura (La neblina del ayer)
There would have been no need for Fidel to start a revolution in the first place. It’s a dismal pattern that has been repeated over and over again in the decades since Batista fled, with the United States propping up a string of appalling dictators in Iran, Vietnam, Chile, and Panama, to name a few. The tragedy is that it has almost always led to disastrous results. By betraying its own principles, the United States has also managed to defeat its most basic strategic goals.
Tony Perrottet (Cuba Libre!: Che, Fidel, and the Improbable Revolution That Changed World History)
Bacardi Limited was started in Santiago de Cuba by Facundo Bacardí Massó, a wine merchant. Having immigrated to Cuba from Spain in 1830, he refined the method of making a quality rum, which until then was considered an inferior drink compared to grain whiskey. Filtering the rum through charcoal gave it a smoother taste and made it the drink of choice in the island nation. One hundred years later, the company headquarters moved into an art deco building in Havana. Other than drinking it straight, the favorite way of drinking rum was with Coca-Cola, which is now called a “Cuba Libre.” At the time I was there, the midshipmen bought cases of rum for very little money and brought them back to the ship without anyone objecting. The Navy also routinely flew to Cuba, and brought airplane loads of Bacardi Rum back to Pensacola, on what were called “Rum Runs.” This was not considered smuggling, but rather was thought of as “routine multi-engine training flights for U.S. Navy SNB-5 pilots.
Hank Bracker
The red light district in the old section of San Juan was around Calle Del Cristo. The Army operated a Pro-Station, right in the middle of this area, and its bright blue identifying lights served as the lighthouse to guide us in. We arrived believing that we had safety in numbers, so the three of us went into one of the many rowdy sailors’ bars that had the kind of atmosphere we were looking for. Before long, we were throwing back Cuba Libres and laughing with some young ladies, who had magically appeared and were hanging onto our arms. The loud Latin beat drowned out our conversation, but there was no doubt but that the girls knew what we wanted. I was still hesitant about going through with it. I had thoughts in the back of my head of the recent warnings. I nearly chickened out, but as my brother used to say “the juices were flowing!” “This story is happily continued on page 301 in “Salty & Saucy Maine.
Hank Bracker
Benny called for a round of Cuba Libres, and I gave him some chips to play for me and went to the ladies’ room and never came back.
Joan Didion (Play It As It Lays)