Blanco Y Negro Quotes

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La memoria imprime en blanco y negro, los grises se pierden por el camino.
Isabel Allende (Portrait in Sepia)
No hay medias tintas ni tonos grises en un mundo creado en blanco y negro.
Benito Taibo (Persona normal)
La suerte es una actitud.
Elísabet Benavent (Valeria en blanco y negro (Valeria, #3))
Meterse en la piel y el alma de otro (en este caso de otra) es un privilegio que viene de la mano con la literatura y que te permite descubrir las inmensas cantidades de tonos de gris que hay en una vida que aparentemente está allí en blanco y negro.
Benito Taibo (Corazonadas)
No tienes un futuro negro, Ginger. Tienes un futuro inmenso. Una página en blanco delante de ti. Y puedes escribir lo que tú quieras".
Alice Kellen (Nosotros en la Luna)
La vida es un libro en blanco y negro y nosotros salimos a llenar unas hojas" Life is a book in white and black and we have to go out and to fill the pages
Herman Zapp
La vida es cruel, las drogas matan y el fuego quema.
Elísabet Benavent (Valeria en blanco y negro (Valeria, #3))
Él era un hombre en blanco y negro. Y ella era el color.
Fredrik Backman (Un hombre llamado Ove (Spanish Edition))
«Reducir la diferencia de resultados escolares entre blancos y negros —declararon los autores de un estudio— haría más para promover la igualdad racial que cualquier otra estrategia que cuente con un amplio apoyo político.»
Steven D. Levitt (Freakonomics)
Lo que puedo ver hasta ahora es que la vida consiste de bien y mal, negro y blanco. Y todo lo que está en medio es una lucha por dominar al otro. La vida es una lucha. Y odio que todo termine en nada. Ese día, en el que simplemente ya no estás aquí. No más sonrisas, no más lagrimas, no más nada. Poof. Luces fuera
Courtney Cole (If You Stay (Beautifully Broken, #1))
Crezco por igual en las regiones vastas y en las estrechas, crezco por igual entren los negros y los blancos.
Walt Whitman (Hojas de hierba (Spanish Edition))
Algunos dicen que este mundo está gobernado por la eterna batalla entre el bien y el mal, negro y blanco. Pero yo digo que no. La guerra es entre el negro, el blanco y el gris.
L.A. Serröt (Gris)
Me dolía todo y en el mundo hacía frío y hasta las estrellas me parecían malvadas, agudos trozos de blanco que sobresalían de todo aquel negro.
Annabel Pitcher (Ketchup Clouds)
Me había enamorado de ella en blanco y negro, cuando aún no tenía ni diez años.
Neil Gaiman (Objetos frágiles (Bestseller (roca)) (Spanish Edition))
Él era un hombre en blanco y negro. Y ella era el color. Todo el color de Ove.
Fredrik Backman (Un hombre llamado Ove (Spanish Edition))
Como en mi película favorita, Olivia me llevaba a un lugar más allá del arcoíris. A su lado la vida era a todo color, y me había hecho darme cuenta de que antes de ella yo vivía en un mundo en blanco y negro.
Alejandra Beneyto (Pregúntame si me importas: 1ªparte (Pregúntame 1: parte 1) (Spanish Edition))
y los gatos, siempre inevitablemente los minouche morrongos miaumiau kitten kat chat cat gatto grises y blancos y negros y de albañal, dueños del tiempo y de las baldosas tibias, invariables amigos de la Maga que sabía hacerles cosquillas en la barriga y les hablaba un lenguaje entre tonto y misterioso, con citas a plazo fijo, consejos y advertencias.
Julio Cortázar (Rayuela)
Creo que el mundo se acabará en blanco y negro, como una película antigua. (El cabello negro como ala de cuervo, cielo, la piel tan blanca como la nieve.) Es posible que mientras tengamos colores podamos seguir adelante. (Labios tan rojos como la sangre, sigo recordándomelo.)
Neil Gaiman (Objetos frágiles (Bestseller (roca)) (Spanish Edition))
En un mundo perfecto todas las madres querrían a sus bebés y los extraños abrirían sus puertas a los no amados. En un mundo perfecto todo sería blanco o negro, bueno o malo, y todos sabrían la diferencia. Pero este no es un mundo perfecto. El problema es la gente que piensa que lo es
Neal Shusterman (Unwind (Unwind, #1))
Existen kilómetros de película con todo tipo de aparatos que se enfrentan en los cielos del mundo entero desde septiembre de 1939 hasta final de la segunda Guerra Mundial. Y todos se parecen. Una mancha imprecisa, oscura, surge de la niebla de la película en blanco y negro, destella, se parte en trozos, humea y después se desintegra
Pierre Bergounioux (B 17 G)
Había una fecha grabada en la base, 1234, y unas palabras alrededor de ella: NEPHILIM: FACILIS DESCENSOS AVERNI. —¿Se supone que eso es la Copa Mortal? —preguntó. Jace asintió. —Y ése es el lema de los nefilim, de los cazadores de sombras, ahí en la base. —¿Qué significa? La amplia sonrisa de Jace fue un destello blanco en la oscuridad. —Significa: Cazadores de sombras. Les sienta mejor el negro que a las viudas de nuestros enemigos desde 1234. —Jace… «Significa —dijo Jeremiah—: El descenso al infierno es fácil.»
Cassandra Clare (City of Bones (The Mortal Instruments, #1))
Se sintió, de pronto, intolerablemente atacada Por la caótica algarabía de los pájaros Y la camada de hojas. ... ¡Ah, cómo añoró entonces el invierno! Esa época escrupulosamente austera en su orden De blanco y negro, de hielo y roca, En la que cada sentimiento tiene sus límites, Y la helada disciplina del corazón Es exacta como un copo de nieve.
Sylvia Plath
Desde temprana edad eran conscientes del escaso valor que el mundo daba a los libros, de manera que no perdían el tiempo con ellos. Mientras que yo, incluso ahora, persisto en creer que esos signos negros trazados en papel blanco son de la mayor importancia, y que si continúo escribiendo lograré atrapar el arco iris de la conciencia y guardarlo en un tarro.
Jeffrey Eugenides (Middlesex)
Porque los colores nacen de la luz, no de la oscuridad, y eso es lo que ellos son: colores. Verde... Azul... Negro... Marrón... Blanco.
Martín Blasco (La oscuridad de los colores)
Porque no todo es blanco o negro. Por más que te esfuerces, no puedes seguir siempre por el mismo camino sin desviarte. Y eso no significa que seas mala persona.
T.J. Klune
Me dan miedo los gatos blancos porque son igual de malos que los gatos negros, pero no hay manera de mirarlos y que no te apetezca acariciarlos.
Chus Fernández (Paracaidistas)
pon lo tuyo en concejo, y unos dirán que es blanco y otros que es negro.
Miguel de Cervantes Saavedra (Don Quixote)
Cuando yo tenía 19 años la pureza era un gran tema. El mundo estaba dividido entre católicos y protestantes, o entre republicanos o demócratas o entre blancos y negros, o aun entre hombres y mujeres, yo lo veía dividido entre la gente que se había acostado con alguien y la gente que no lo había hecho, y ésta parecía ser la única diferencia verdaderamente significativa entre una persona y otra
Sylvia Plath (The Bell Jar)
Ven noche, ven, Romeo, ven tú, día en la noche, descansando en las alas de la noche, más blanco que nieve nueva sobre los lomos de los grajos. Ven, dulce noche, rostro negro de los amores, y tráeme a mi Romeo. Cuando me muera, tómalo y córtalo en estrellas, en fragmentos pequeñitos. Hará tan deliciosa la cara de los cielos que estará el mundo entero prendado de la noche y ya no adorará al sol extravagante.
William Shakespeare (Romeo and Juliet)
Tashi dice que quiere enfrentarse al pelotón de fusilamiento vestida de rojo. Le recuerdo que su sentencia está siendo apelada. También cabe la esperanza de que los Estados Unidos hagan valer la ciudadanía norteamericana de Tashi. Es igual, quiero ir de rojo, dice, pase lo que pase. Estoy harta del blanco y el negro. Ninguno va primero. El rojo, el color de la sangre de mujer, los precede a ambos. De modo que cosemos.
Alice Walker (Possessing the Secret of Joy)
Él le hacía una librería y ella la llenaba de libros de gente que escribía páginas enteras sobre sentimientos. Ove no entendía aquello que no era capaz de ver y tocar. El hormigón y el cemento. El vidrio y el acero. Las herramientas. Cosas que se podían calcular. Comprendía los ángulos rectos y las instrucciones claras. Los modelos de construcción y los planos. Cosas que se pudieran dibujar en un papel. Él era un hombre blanco y negro. Y ella era el color. Todo el color de Ove.
Fredrik Backman (A Man Called Ove)
Dicen que lo parió un fatigado vientre irlandés, pero se crió entre negros. En ese caos de catinga y de motas gozó el primado que conceden las pecas y una crencha rojiza. Practicaba el orgullo de ser blanco; también era esmirriado, chúcaro, soez.
Jorge Luis Borges (Cuentos completos)
De súbito me vi agarrando la cruz de granito de Cuatro Postes. Apenas me atrevía a darme la vuelta y tender la vista sobre la ciudad nevada. Cuando lo hice, un sentimiento amplio, inconcreto, me resbaló por la espalda. La ciudad, ebria de luna, era un bello producto de contrastes. Brotaba de la tierra dibujada en claroscuros ofensivos. Era un espectáculo fosforescente y pálido, con algo de endeble, de exinanido y de nostálgico. La torre de la Catedral sobresalía al fondo como un capitán de un ejército de piedra. En su derredor las moles, en blanco y negro, de la torre de Velasco, del torreón de los Guzmanes, del Mosén Rubí... Ávila emergía de la nieve mística y escandalosamente blanca, como una monja o una niña vestida de primera comunión. Tenía un sello antiguo, hermético, de maciza solidez patriarcal. La villa, centrada en plena y opulenta civilización, era como una armadura detonando en una reunión de fraques. Imaginé que no otra, en todo el mundo, podía ser la cuna de Santa Teresa. Porque su espíritu impregnaba, una por una, cada una de sus piedras y sus torres.
Miguel Delibes (La sombra del ciprés es alargada)
La inmadurez te dificulta mucho la gestión de todos esos asuntos con los que las mujeres nos encontramos haciendo malabarismos en nuestra vida. Y cuanto más te ayuden los demás, cuanto más arropada estés, más tardarás en salir del cascarón, donde confieso que se estaba muy calentito.
Elísabet Benavent (Valeria en blanco y negro (Valeria, #3))
¡FELICES FIESTAS!!! Durante mucho tiempo y a pesar de mi esfuerzo intelectual no podía encontrar mejor deseo para las Fiestas que “SALUD, AMOR y DINERO” (en conjunto y en ese orden). Daba vueltas y vueltas y terminaba siempre cayendo en ese trío perfecto. Tener Dinero sin amor, ni salud, no se lo deseo a nadie, es casi un castigo divino. Tener Amor, sin salud, ni dinero, es complicado. Y tener Salud, sin amor, ni dinero, es la nada misma (la salud solo se valora cuando no se tiene). Tener los tres, era ¡la gloria! Sin embargo, en los últimos años, le puse más foco a la FELICIDAD. Si uno logra ser feliz, no importa mucho con qué y cómo se consigue. Al final de cuentas, también se puede ser un infeliz teniendo salud, dinero y amor. Y si uno se siente infeliz, casi nada tiene sentido. Este año, me gustaría aprovechar MI DESEO contra un feroz virus que está esta haciendo estragos en nuestra Sociedad: LA INTOLERANCIA HACIA EL QUE PIENSA DIFERENTE. La vida en blanco o negro no es real, es solo un ardid ficticio de los inseguros. No creo que sea un buen negocio impostar seguridad a cambio de que pierdas el sublime disfrute de la diversidad de tu entorno. ¿Sientes que destrozaste al “enemigo” en la discusión y que impusiste por knok out “tu” incuestionable verdad? Lamento informarte que si con ello dañaste la relación que tenias... ¡perdiste! Poquísimas discusiones justifican dañar una relación. Recuerda siempre: muchas veces se pierde más ganando y viceversa. La intolerancia es una agresión que destruye. El problema de “ser el dueño de la verdad” es que esa “verdad” solo existe dentro de tu mente. Deja las verdades absolutas para las religiones y anímate a navegar conmigo en los desafiantes mares de los colores. POR TODO ESTO, QUERIDOS AMIGOS, NOS DESEO UN MUNDO MÁS TOLERANTE, EN DONDE LA DIFERENCIA NO SEA GENERADORA DE ENEMIGOS, SINO DE FUENTES INAGOTABLES DE OPORTUNIDADES. SI ENTRE TODOS LO LOGRAMOS, SIN DUDAS HABRÁ MAS FELICIDAD, MÁS SALUD, MÁS AMOR Y MÁS RIQUEZA. ¡FELICES FIESTAS! POR UN 2018 REPLETO DE REALIZACIONES PERSONALES. GONZALO
Gonzalo Guma
A medida que crezcas, verás a los blancos estafando a los negros, todos los días de tu vida, pero te diré una cosa, y no la olvides: siempre que un hombre blanco abusa de un negro, no importa quién sea, ni cuán rico sea, ni cuán distinguida haya sido la familia de que procede, ese hombre blanco es basura.
Harper Lee (Matar a un ruiseñor)
algún día diré vuestro nacer latente: negro corsé velludo de moscas deslumbrantes, A, al zumbar en torno a atroces pestilencias, calas de umbría; E, candor de pabellones y naves, hielo altivo, reyes blancos, ombelas que tiemblan. I, escupida sangre, risa de ira en labio bello, en labio ebrio de penitencia;
Arthur Rimbaud
Cuanto más se esforzaba la gente de color por convencerlos de lo buenos que eran, de lo inteligentes y cariñosos, de lo humanos que eran, cuanto más se esforzaban los negros en persuadir a los blancos de algo que a sus ojos estaba fuera de toda duda, más profunda e intrincada crecía la selva en su interior.
Toni Morrison (Beloved)
Los individuos muy autoexigentes utilizan un estilo dicotómico en su manera de procesar la información. Para ellos, la vida es en blanco y negro, sin tener en cuenta los matices: “Soy exitoso o soy fracasado”, “Soy capaz o incapaz”, “Soy inteligente o bruto”. Esta forma de pensar es errónea, porque no hay nada absoluto ni rigurosamente extremo. Si miramos el mundo de esta forma dejaremos de percibir los grises y los puntos medios. Cuando aplicas este estilo binario a la existencia, tu vocabulario se reducirá a palabras como: nunca, siempre, todo y nada. Chocarás con una realidad muy distinta de lo que imaginas.
Walter Riso (Enamórate de ti: El valor imprescindible de la autoestima (aprendiendo a quererse a sí mismo) (Biblioteca Walter Riso) (Spanish Edition))
Desde la mesa Julián acompañó al jardín al académico, a quien trató con dulzura y sumisión, llegando a participar del fervor que aquel mostraba por el éxito de Hernani.. —¡Si estuviésemos en los tiempos de las órdenes de prisión firmadas en blanco...!—observó Julián. ¡No se habría atrevido a escribir eso! —gritó el académico.
Stendhal (ROJO Y NEGRO (Spanish Edition))
medida que vayas creciendo, verás a hombres blancos engañar a hombres negros todos los días, pero deja que te diga algo, y no lo olvides: siempre que un hombre blanco le hace eso a un hombre negro, no importa quién sea, cuánto dinero tenga o cuán distinguida sea la familia de la que procede, ese hombre blanco es basura. Atticus
Harper Lee (To Kill a Mockingbird Matar a un ruiseñor (Spanish edition))
El caso es que todos nos ponemos la máscara, el antifaz, la capa, las botas, para de vez en cuando no pasar inadvertidos. Para no ser uno del montón. Pasar de ser el tipo tímido de lentes que no mataría ni una mosca, para, instalado en su papel, ser capaz de salvar al universo. Se trata, simplemente, de hacer actos extraordinarios a pesar de ser, solamente, personas ordinarias. Pero, habrá que decirlo, este país es muy raro, porque la delgada línea que divide a ídolos de pobres diablos se rompe constantemente. El portero que para el penalti es un héroe, el que no, es un pendejo. No hay medias tintas ni tonos grises en un mundo creado en blanco y negro.
Benito Taibo (Persona normal)
Entonces Constantino y la intérprete rusa y todo aquel montón de hombres negros y blancos y amarillos discutiendo allá abajo detrás de sus micrófonos rotulados parecieron alejarse en la distancia. Vi sus bocas subir y bajar sin sonido, como si estuvieran sentados en la cubierta de un buque que partía, dejándome en medio de un enorme silencio.
Sylvia Plath (The Bell Jar)
significado de los cuatro colores de la bandera de UAE (United Arab Emirates): el negro es el petróleo, el rojo la unidad, el blanco la neutralidad y el verde la fertilidad, aunque también simboliza el color del Islam (la tradición cuenta que Mahoma llevaba un manto verde y por eso la mayoría de los países de religión musulmana incluyen este color en sus banderas).
Asunta López (Cartas desde Dubai)
El negro, el blanco, el marrón, el rojo, el amarillo, el hetero, el homo, el trans, el pobre, el rico, el analfabeto, el analfabeto, el débil, el fuerte, todos son mis hermanos y hermanas. Mi vida es su vida Y hasta el último aliento en mi cuerpo, los estaré sirviendo a todos con todo el poder en mis venas. Y más allá de la muerte, mis ideas te servirán por la eternidad.
Abhijit Naskar (I Am The Thread: My Mission)
Cada uno de mis dos 'yo', el blanco y el negro, debían competir uno contra el otro, y cada uno de ellos adquiría por su parte una ambición, un afán de ganar, de vencer; como yo negro me ponía nervioso después de cada jugada, ansioso de saber qué haría ahora el yo blanco. Cada uno de mis yo se exaltaba cuando el otro cometía un error y se exasperaba simultáneamente por la propia torpeza.
Stefan Zweig (Novela de ajedrez (Spanish Edition))
Hoy en Estados Unidos se están produciendo y masacrando al año por este sistema de producción desalmada 50 millones de vacas, terneros y cerdos, 200 millones de pavos y 6.000 millones de pollos para que los dueños de los Burger King, los McDonald’s y los Wendy’s inflen sus bolsas y los comedores de carne, negros y blancos, cristianos y musulmanes, tengan carburante para sus almas inmortales.
Fernando Vallejo
A menudo se usa la historia como una serie de cuentos morales para aumentar la solidaridad de grupo o, cosa más defendible, según mi punto de vista, para explicar el desarrollo de instituciones importantes como los parlamentos y conceptos como la democracia y de ese modo la enseñanza del pasado se ha convertido en algo fundamental a la hora de debatir la forma de inculcar y trasmitir valores. El peligro es que ese objetivo, que puede ser admirable, acabe por distorsionar la historia, ya sea convirtiéndola en un relato simplista en el cual sólo hay blanco y negro, o bien representándola como si todo tendiese hacia una sola dirección, ya sea el progreso humano o el triunfo de un grupo en particular. La historia explicada de este modo aplana la complejidad de la experiencia humana y no deja espacio para las distintas interpretaciones del pasado.
Margaret MacMillan (The Uses and Abuses of History)
¡Sentimientos liberales! ¡Pero a mí no me vengas con monsergas de justicia! ¡Vete a Tennessee montado en un pollino y ponte a convencer a esos palurdos sudistas de que en realidad son negros pintados de blanco y de que sus esclavos son blancos pintados de negro! ¡Vete a Europa y ponte a decirles que los derechos de los esclavos del imperio son tan inalienables como los de la reina de Bélgica! ¡Ah, terminarás pobre, canoso y ronco en las reuniones del partido! ¡Te escupirán, te dispararán, te lincharán, te aplacarán con medallitas y los paletos te despreciarán! ¡Te crucificarán! Ingenuo y soñador Adam. Quien osa desafiar a esa hidra de cien cabezas que es la naturaleza humana lo termina pagando con espantosos sufrimientos, ¡y su familia también! ¡Y cuando exhales el último suspiro, sólo entonces, te darás cuenta de que tu vida no ha sido más que una minúscula gota en un océano infinito! Y sin embargo, ¿qué es un océano sino una multitud de gotas?
David Mitchell (Cloud Atlas)
Entre el río Jordán y el mar lloran las viudas y los huérfanos, es una antigua costumbre suya, para eso son viudas y huérfanos, para llorar, después todo se reduce a esperar el tiempo de que los niños crezcan y vayan a una guerra nueva, otras viudas y otros huérfanos vendrán a relevarlos, y si mientras tanto han cambiado las modas, si el luto, de blanco, pasó a ser negro, o viceversa, si sobre el pelo, que se arrancaba a manojos, se pone ahora una mantilla bordada, las lágrimas son las mismas, cuando se sienten.
José Saramago (The Gospel According to Jesus Christ)
Una vez que uno veía el rostro de un dios en esa confusión de blancos y negros, ya la suerte estaba echada: nunca más podía dejar de verlo. Otros podrían reírse y decir que no era nada, apenas un montón de manchas sin sentido, a mí que me den una de esas pinturas rutinarias hechas por un buen artesano en un día cualquiera, y siempre verás allí el rostro de Cristo Nuestro Señor que te está mirando. Lo había visto una vez, en un salto guestáltico en el que lo consciente y lo inconsciente se mezclaban en un sobrecogedor momento de comprensión. Desde entonces, uno lo vería siempre. Estaría condenado a verlo.
Stephen King (The Shining (The Shining, #1))
Es la vieja doble moral estadounidense. Decir una cosa y hacer otra diferente. Y por supuesto este país fue fundado bajo una doble moral. Es parte de nuestra historia, es una doble moral muy básica: Un grupo dueño de esclavos que querían ser libres. ¿Estoy en lo cierto? Qué absurdo. Lo que hicieron fue matar a un montón de ingleses blancos, para seguir poseyendo a sus esclavos negros, para luego exterminar a los indios rojos, ir hacia el oeste para robarle territorio a los mexicanos marrones y finalmente tener un lugar de donde despegar, volar y lanzar bombas nucleares sobre los japoneses amarillos. ¿Saben cuál debería ser el lema de este país? '¡Danos un color y nosotros nos deshacemos de él!.
George Carlin
Nada más infeliz que el hombre que lo inquiere todo girando de aquí para allá, que escruta, como dice el poeta, «las profundidades de la tierra», que indaga por conjeturas lo que acontece en el alma ajena, sin acabar de entender que le bastaría sólo aplicarse al dios que habita en su interior y venerarle como es debido. Este culto consiste en conservarse puro de pasiones; de temeridad y de disgusto por aquello que procede de los dioses y de los hombres. Porque lo que viene de los dioses es digno de respeto, por ser obra de sí virtuosa; y lo que viene de los hombres nos es caro a causa del parentesco, si bien a veces no deja de ser, en cierto sentido, objeto de compasión, por su ignorancia del bien y del mal, ceguera no menor que la que nos impide poder discernir lo blanco de lo negro.
Marcus Aurelius (Meditaciones (Meditations - Spanish Edition))
—La muerte es lo más fácil del mundo. La gente cree que matar cuesta trabajo. Pero eso es únicamente lo que desean creer. En realidad es lo más sencillo que hay. No hay más que coger el periódico por la mañana, ¿y qué es lo que trae? Maridos que matan a sus esposas. Esposas que matan a sus maridos. Padres que matan a sus hijos. Hijos que se matan entre ellos. Negros que matan a blancos. Blancos que matan a negros. Matamos en secreto, matamos a hurtadillas, matamos en público, matamos con intención, matamos por accidente. Matamos con pistolas, cuchillos, bombas, rifles..., los instrumentos obvios. Pero ¿qué pasa cuando impedimos el envío a Etiopía de un cargamento de grano subvencionado por el gobierno federal? Que estamos matando, igualito que si hubiéramos cogido una pistola y se la hubiéramos puesto en la sien a un niño de vientre hinchado.
John Katzenbach (Retrato en sangre)
El blanco habló de otro país más allá del mar donde una mujer poderosa se sentaba en el trono, mientras los hombres y las mujeres bailaban a la sombra de su autoridad y benevolencia. Ella estaba dispuesta a extender su sombra para cubrir a los agikuyu. Se rieron de este hombre excéntrico, cuya piel estaba tan escaldada que el negro de fuera se había pelado. El agua caliente le debía de haber afectado a la cabeza [...] Más tarde, o eso decían, Waiyaki había sido enterrado vivo en Kibwezi con la cabeza apuntando al centro de la tierra, un aviso viviente para quienes, en años venideros, osaran desafiar la autoridad de la mujer cristiana cuya sombra protectora dominaba ahora tierra y mar. Entonces nadie se dio cuenta: pero mirando hacia atrás pudimos ver que la sangre de Waiyaki contenía una semilla, un grano, que dio origen a un movimiento cuya mayor fortaleza, desde ese día, nacía del vínculo con la tierra.
Ngũgĩ wa Thiong'o (A Grain of Wheat)
Apenas había tenido tiempo de identificarlo como un delfín cuando me encontré en medio de una manada. Se elevaron a mi alrededor suspirando con fuerza, brillantes sus negros lomos al arquearse a la luz de la luna. Debían ser unos ocho, y uno salió tan cerca que con nadar tres brazadas podría haber tocado su cabeza de ébano. Jugando entre saltos y resoplidos cruzaron la bahía, y yo les seguí a nado, contemplando cómo subían a la superficie, respiraban hondo y volvían a zambullirse, dejando sólo un creciente anillo de espuma en el agua arrugada. Finalmente, y como obedeciendo a una señal, se volvieron y enfilaron hacia la boca de la bahía y la lejana costa de Albania; yo me erguí para verlos alejarse, nadando por el blanco surco de luz, con un centelleo en el lomo al elevarse y dejarse caer pesadamente en el agua templada. Tras ellos quedó una estela de grandes burbujas que temblaban y relucían un instante cual lunas en miniatura antes de desaparecer bajo las ondas.
Gerald Durrell (My Family and Other Animals (Corfu Trilogy, #1))
La mayoría de las personas afirman que su jerarquía social es natural y justa, mientras que las de otras sociedades se basan en criterios falsos y ridículos. A los occidentales modernos se les enseña a mofarse de la idea de jerarquía racial. Les sorprende que haya leyes que prohíban a los negros vivir en barrios de blancos, o estudiar en escuelas para blancos, o ser tratados en hospitales para blancos. Sin embargo, la jerarquía de ricos y pobres, que ordena que la gente rica viva en barrios separados y más lujosos, que estudien en escuelas separadas y más prestigiosas y que reciban tratamiento médico en instalaciones separadas y mejor equipadas, les parece perfectamente sensata a muchos norteamericanos y europeos. No obstante, es un hecho comprobado que la mayoría de las personas ricas lo son por el simple hecho de haber nacido en el seno de una familia rica, mientras que la mayoría de las personas pobres seguirán siéndolo durante toda su vida simplemente por haber nacido en el seno de una familia pobre.
Yuval Noah Harari (Sapiens. De animales a dioses: Una breve historia de la humanidad)
En el muro de Facebook hay una opción que te permite añadir "Me gusta" al comentario o la foto de otro internauta. El pictograma es una mano cerrada con el pulgar hacia arriba. También ofrece la posibilidad, en caso de arrepentimiento, de sustituirlo por un "Ya no me gusta". Eso es todo. La red social de Zuckerberg no admite la alternativa de matizar esa adhesión o ese arrepentimiento con algún estado intermedio, quizá titubeante o más gaseoso. Sólo acepta la rotundidad de un sí o un no, del blanco o el negro, con el pulgar hacia arriba o hacia abajo, sin medias tintas. La duda ha sido expulsada de esta arcadia digital y condenada a vagar por el desierto de territorios más lejanos y lentos, es decir, más literarios [...] Ahora bien, pensar consiste justamente en lo contrario. Pensar implica el compromiso radical de ir un paso más allá del "Me gusta" o "No me gusta", de suspender la fase infantil de la imposición caprichosa de nuestros antojos. Aquí no sirve eso tan socorrido del "Porque lo digo yo" y el puñetazo en la mesa. Hay que razonar, justificar, argumentar con palabras de peso nuestro amor, nuestro rechazo, lo cual es complicado e incómodo, ya que puedes equivocarte o quedar en ridículo. O puedes caer en la paradoja de aquel personaje de Monterroso, un escritor cuya esposa, tras desvelar los hábitos de trabajo de él, concluía: «Cuando no se le ocurre nada escribe pensamientos».
Eloy Tizón (The Art of Fiction)
Díjele que entre nosotros existía una sociedad de hombres educados desde su juventud en el arte de probar con palabras multiplicadas al efecto que lo blanco es negro y lo negro es blanco, según para lo que se les paga. El resto de las gentes son esclavas de esta sociedad. Por ejemplo: si mi vecino quiere mi vaca, asalaria un abogado que pruebe que debe quitarme la vaca. Entonces yo tengo que asalariar otro para que defienda mi derecho, pues va contra todas las reglas de la ley que se permita a nadie hablar por si mismo. Ahora bien; en este caso, yo, que soy el propietario legítimo, tengo dos desventajas. La primera es que, como mi abogado se ha ejercitado casi desde su cuna en defender la falsedad, cuando quiere abogar por la justicia -oficio que no le es natural- lo hace siempre con gran torpeza, si no con mala fe. La segunda desventaja es que mi abogado debe proceder con gran precaución, pues de otro modo le reprenderán los jueces y le aborrecerán sus colegas, como a quien degrada el ejercicio de la ley. No tengo, pues, sino dos medios para defender mi vaca. El primero es ganarme al abogado de mi adversario con un estipendio doble, que le haga traicionar a su cliente insinuando que la justicia está de su parte. El segundo procedimiento es que mi abogado dé a mi causa tanta apariencia de injusticia como le sea posible, reconociendo que la vaca pertenece a mi adversario; y esto, si se hace diestramente, conquistará sin duda, el favor del tribunal. Ahora debe saber su señoría que estos jueces son las personas designadas para decidir en todos los litigios sobre propiedad, así como para entender en todas las acusaciones contra criminales, y que se los saca de entre los abogados más hábiles cuando se han hecho viejos o perezosos; y como durante toda su vida se han inclinado en contra de la verdad y de la equidad, es para ellos tan necesario favorecer el fraude, el perjurio y la vejación, que yo he sabido de varios que prefirieron rechazar un pingüe soborno de la parte a que asistía la justicia a injuriar a la Facultad haciendo cosa impropia de la naturaleza de su oficio. Es máxima entre estos abogados que cualquier cosa que se haya hecho ya antes puede volver a hacerse legalmente, y, por lo tanto, tienen cuidado especial en guardar memoria de todas las determinaciones anteriormente tomadas contra la justicia común y contra la razón corriente de la Humanidad. Las exhiben, bajo el nombre de precedentes, como autoridades para justificar las opiniones más inicuas, y los jueces no dejan nunca de fallar de conformidad con ellas. Cuando defienden una causa evitan diligentemente todo lo que sea entrar en los fundamentos de ella; pero se detienen, alborotadores, violentos y fatigosos, sobre todas las circunstancias que no hacen al caso. En el antes mencionado, por ejemplo, no procurarán nunca averiguar qué derechos o títulos tiene mi adversario sobre mi vaca; pero discutirán si dicha vaca es colorada o negra, si tiene los cuernos largos o cortos, si el campo donde la llevo a pastar es redondo o cuadrado, si se la ordeña dentro o fuera de casa, a qué enfermedades está sujeta y otros puntos análogos. Después de lo cual consultarán precedentes, aplazarán la causa una vez y otra, y a los diez, o los veinte, o los treinta años, se llegará a la conclusión. Asimismo debe consignarse que esta sociedad tiene una jerigonza y jerga particular para su uso, que ninguno de los demás mortales puede entender, y en la cual están escritas todas las leyes, que los abogados se cuidan muy especialmente de multiplicar. Con lo que han conseguido confundir totalmente la esencia misma de la verdad y la mentira, la razón y la sinrazón, de tal modo que se tardará treinta años en decidir si el campo que me han dejado mis antecesores de seis generaciones me pertenece a mí o pertenece a un extraño que está a trescientas millas de distancia.
Jonathan Swift (Los viajes de Gulliver)
El amor son estímulos químicos y pasajeros que pruebas una vez y no experimentas más. El amor es morir de sobredosis la primera vez que pruebas la heroína. Una droga de adictos y sobrios. Blancos y negros. Una adicción que maneja y deja ser manejada.
Pablo Poveda Sánchez (Motel Malibu (Spanish Edition))
Un vil empresario rige aquel mundillo de la farándula, desdeñando a los maestros del ingenio. Más noble, más digno, menos impuro, es Peter Wald. El negro tiene el alma blanca y muchos de aquellos blancos tienen el alma negra.
Alberto Insúa
La primera bengala criminal en un espectáculo público fue trovada por Spinetta en “La bengala perdida”, canción incluida en el disco Téster de violencia (1988): “Tu “jeep” no arranca más/ ni siquiera un milagro,/ lo haría salir/del barro no volverá/adentro queda un cuerpo/la bengala perdida se le posó/ allí donde se dice “gol”/ dejaron todo bajo el vendaval/ y huyendo del lodo,/no se supo más”. Recuerdo todavía una foto en blanco y negro de la sexta edición del diario Crónica: el cadáver de un muchacho llamado Roberto Basile yacía extendido sobre los escalones de la tribuna alta visitante con una oscura mancha de sangre estampada en su cuello. Fue un 3 de agosto de 1983. Ese día se jugaba un partido entre Boca Juniors y Racing Club en la Bombonera del barrio de La Boca. El “misil” (una especie de bengala náutica) había sido disparado desde la segunda bandeja de la tribuna que habitualmente ocupa la “12”, la tristemente célebre barra brava de Boca, por entonces liderada por José Barrita, apodado “El Abuelo”. La bengala se incrustó en la garganta de Basile, provocándole una muerte prácticamente instantánea. El partido continuó como si no hubiese pasado nada: Boca y Racing empataron 2 a 2. Tres barras de Boca estuvieron detenidos apenas 10 meses, luego de los cuales quedaron en libertad, siendo sobreseídos en la causa por homicidio culposo. Este crimen quedó impune, como quedarían tantos otros en estadios, teatros y discotecas argentinas. En aquel entonces todavía estaba lejos la trágica noche de Cromañón, cuando en esa disco del barrio de Once perecerían dos centenares de jóvenes en 2005. “Cultura y poder”/son esta “porno bajón”/por un “color”/ solo por un “color”/no somos tan malos,/ya la cancha estalla en nada/sin darme cuenta,/voy cayendo en cruz/ hacia el cenit,/el cielo ya no tiene mis pies/ y la espiral,/que me habrá de llevar/no es mejor,/que todas esas vueltas que di/buscando un amanecer. Si bien Spinetta sigue usando aquí imágenes de cuño surrealista, el hecho policial es la motivación del texto. Como en los “cantares de ciego” españoles o la literatura de cordel, Spinetta toma la noticia y la reescribe en un lenguaje poético: “‘Tití’ portando/un dulce exocet/que busca de piel en piel/de las tribunas se puede regresar/tan solo hace falta,/ser de masa gris”, dice transfigurando el registro periodístico en poesía. Cerca del final de la canción, apela a una sentencia rotunda: “no quiero un valle de “catacumbas”/nunca más
Sandra Edith Gasparini (Iniciado del alba : seis ensayos y un epílogo sobre Luis Alberto Spinetta (Spanish Edition))
Rápidamente aparece su imagen contrastada con la del otro ídolo juvenil del momento, Raphael. Una fotografía en blanco y negro. Austeridad, contención, profundidad, elegancia, frente a manierismo, superficialidad, exhibicionismo y mal gusto.
Carles Gamez (Serrat entre la A y la Z. Del Mediterráneo al Pacífico)
moriré en familia». «¡No quiero esta vida!», llora como si a esas palabras de rabieta infantil le pudiera seguir un mundo de colores. Pero ese no es el suyo, el suyo está pintado con rotuladores en blanco y negro y no tiene espacio ni para grises, ni para matices. Los miles de pedazos del espejo
Carla de la Vega (En el harén de Estambul)
Gandalf había asistido a un gran concilio de los magos blancos, señores del saber tradicional y la magia buena; y que habían expulsado al fin al Nigromante de su oscuro dominio al sur del Bosque Negro.
J.R.R. Tolkien (El Hobbit)
Los extranjeros traían «venados» que los soportaban «tan alto como los techos». Por todas partes venían envueltos sus cuerpos, «solamente aparecen sus caras. Son blancas, son como si fueran de cal. Tienen el cabello amarillo, aunque algunos lo tienen negro. Larga su barba es ...»9. Moctezuma creyó que era el dios Quetzalcóatl quien volvía. Ocho presagios habían anunciado, poco antes, su retorno. Los cazadores le habían traído un ave que tenía en la cabeza una diadema redonda con la forma de un espejo, donde se reflejaba el cielo con el sol hacia el poniente. En ese espejo Moctezuma vio marchar sobre México los escuadrones de los guerreros. El dios Quetzalcóatl había venido por el este y por el este se había ido: era blanco y barbudo. También blanco y barbudo era Huiracocha, el dios bisexual de los incas.Y el oriente era la cuna de los antepasados heroicos de los mayas10.
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1. LOS SOMBREROS En una mesa hay tres sombreros negros y dos blancos. Tres señores en fila india se ponen un sombrero al azar cada uno y sin mirar el color. Se le pregunta al tercero de la fila, que puede ver el color del sombrero del segundo y el primero, si puede decir el color de su sombrero, a lo que responde negativamente. Se le pregunta al segundo que ve solo el sombrero del primero y tampoco puede responder a la pregunta. Por último, el primero de la fila que no ve ningún sombrero responde acertadamente de qué color es el sombrero que tenía puesto. ¿Cuál es este color y cuál es la lógica que uso para saberlo?
M.S. Collins (75 fantásticos acertijos de lógica: Explicación y respuesta con un solo click (Spanish Edition))
patológica. Echando la culpa al negro es como el blanco trata de mantenerse sin dispersión. El negro está en la triste situación de ser usado para todo, hasta para la propia inseguridad psicológica del blanco. Por desgracia, una simple irrupción de violencia no hará más que dar al blanco la justificación que desea. Le convencerá de que es de verdad,
Thomas Merton (Conjeturas de un espectador culpable (Servidores y Testigos nº 127) (Spanish Edition))
Las razas son desiguales como los individuos. Cualquiera sea a razón — insuficiencia originaria o evolución posterior mal dirigida — el hecho es que ciertos conjuntos étnicos se muestran hoy en día incapaces de crear una civilización y hasta de asimilar la que se les suministra. ¿Podrán hacerlo en el porvenir? Lo ignoramos, y aun en este caso subsistiría su actual inferioridad : el niño no es el igual del adulto, y menos aún cuando se trata de un niño atrasado. Notemos, por otro lado, que ciertas razas llamadas primitivas son en realidad degeneradas, sin que el nivel de su época más brillante se haya jamás elevado muy alto. Pero ¿para qué insistir? Nadie pone en duda los hechos : la gran raza negra no ha producido ni ciencia, ni literatura, ni filosofía, ni teología; su arte no se puede comparar con los de Europa, Asia y América; su organización política ha quedado rudimentaria. Nadie discute tampoco el hecho de que los blancos, dondequiera que hayan aparecido, han constituido un poderoso factor de orden y progreso. ¿Entonces? Los pocos defensores de la igualdad de las razas explotan casos individuales que no significan absolutamente nada. Evidencie tal jefe de tribu africana más inteligencia que un campesino común de Europa y más valor moral que un delincuente chino, y haya sido el negro norteamericano Carver un gran químico y hasta un bienhechor de la humanidad, todo eso implica simplemente que los conjuntos étnicos no están globalmente superpuestos en la escala de los valores y que el primero de los negros no viene después del último de los amarillos o de los blancos. Pero, cuando consideramos una raza, es la comunidad que representa la que nos interesa, con su élite y sus imbéciles, mas en cuanto conjunto orgánico y no como suma de individuos. No vayamos a creer, sin embargo, que la comparación entre conjuntos étnicos sea siempre fácil de hacer y su resultado, siempre indiscutible. El concepto de superioridad es esencialmente relativo a la escala de valores que se acepta o se crea. Si se decreta que la resistencia al calor es criterio más importante que la inteligencia, se deberá admitir la superioridad de la gran raza negra sobre las demás y especialmente sobre la blanca... Rozamos aquí la paradoja. La dificultad, aunque cierta, no se manifiesta sino en casos límite. Cuando se ve, por el contrario, a lo largo de la historia, las grandes razas blanca y amarilla, y sobre todo la primera, dominar en todas partes por donde pasen, crear imperios, culturas y técnicas, no es fácil negarles la supremacía de conjunto, aun cuando su superioridad pueda ser discutida sobre tal o cual punto en particular.
Jacques de Mahieu (Fundamentos de biopolítica)
Echar la culpa al negro: no es solo cuestión de racionalizar y verbalizar. Se ha convertido en una fuerte necesidad emocional del hombre blanco. Echar la culpa al negro (y por extensión al comunista, al agitador exterior) le da al blanco una sensación más fuerte de identidad o, mejor dicho, le protege una identidad seriamente amenazada de disolución patológica. Echando la culpa al negro es como el blanco trata de mantenerse sin dispersión. El negro está en la triste situación de ser usado para todo, hasta para la propia inseguridad psicológica del blanco. Por desgracia, una simple irrupción de violencia no hará más que dar al blanco la justificación que desea. Le convencerá de que es de verdad, porque tiene razón. El negro, en realidad, podría causar un caos en la sociedad blanca con la guerra psicológica si supiera usarla. Ya el arma psicológica de la no violencia se ha mostrado efectiva como ataque a la falsificada imagen que tiene el blanco de sí mismo como ser justo y cristiano.
Thomas Merton (Conjeturas de un espectador culpable (Servidores y Testigos nº 127) (Spanish Edition))
El núcleo del problema racial, tal como yo lo veo, es este: el negro (y también otros grupos raciales, pero el negro sobre todo) resulta víctima de los conflictos psicológicos y sociales que ahora forman parte de una civilización blanca que teme una disgregación inminente y no tiene una comprensión madura de la realidad de la crisis. La sociedad blanca es pura y simplemente incapaz de aceptar realmente al negro y asimilarle, porque los blancos no pueden hacer frente a sus propios impulsos, no pueden defenderse contra sus propias emociones, que son extremadamente inestables en una sociedad sobreestimulada y rápidamente cambiante. Para minimizar la sensación de riesgo y desastre siempre latente en sí mismos, los blancos tienen que proyectar sus miedos en algún objeto exterior a ellos mismos. Claro que la Guerra Fría ofrece amplias oportunidades, y cuanto más inseguros están los hombres, en un bando o en otro, más recurren a paranoicas acusaciones de «comunismo» o «imperialismo», según sea el caso. Las acusaciones no carecen de base, pero siguen siendo patológicas. Aprisionado en este ineludible síndrome queda el negro, que tiene la desgracia de hacerse visible, con su presencia, su desgracia, sus propios conflictos y su propia división, precisamente en el momento en que la sociedad blanca está menos preparada para arreglárselas con un peso extra de riesgo. ¿Cuál es el resultado? Por un lado, la ternura de los «liberales» se precipita, de modo patético pero comprensible, a dar la bienvenida y a conciliar esa pena trágica. Por otro lado, los inseguros se endurecen de modo enconadamente patológico, se tensan las resistencias, y se confirman en el temor y el odio aquellos que (conservadores o no) están decididos a echar la culpa a otro de sus propias deformidades interiores. La increíble inhumanidad de esta negativa a escuchar por un momento al negro, de algún modo, y de esta decisión de mantenerle oprimido a toda costa, me parece que proporcionará casi con seguridad una situación revolucionaria desesperanzadamente caótica y violenta. Cada vez más, la animosidad, la suspicacia y el miedo que sienten esos blancos (y que en su raíz sigue siendo un miedo a su propia miseria interior, que probablemente no pueden sentir tal como es) llegan a hacerse una profecía que se cumple a sí misma. El odio del racista blanco al negro (lo repito, odio, porque aún es una palabra muy suave para indicar lo que hay en los corazones de esa agitada gente) se le hace aceptable cuando lo presenta como un odio del negro a los blancos, fomentado y estimulado por el comunismo. ¡La Guerra Fría y los miedos racistas se ensamblan en una sola unidad! ¡Qué sencillo es todo! Al negro, claramente, se le invita a una sola reacción. Ha tenido innumerables razones para odiar al hombre blanco. Ahora se reúnen y se confirman sólidamente. Aunque no tenga nada que ganar por la violencia, tampoco tiene nada que perder. ¡Y por lo menos la violencia será un modo decisivo de decir lo que piensa de la sociedad blanca! El resultado, sin duda, será muy desagradable, y la culpa caerá de lleno en las espaldas de la América blanca, con su inmadurez emocional, cultural y política, y su lamentable negativa a comprender.
Thomas Merton (Conjeturas de un espectador culpable (Servidores y Testigos nº 127) (Spanish Edition))
La imaginación es un demonio persistente, el mundo sería en blanco y negro sin ella,
Anonymous
figuras humanoides blancas y negras que seguían un patrón gestáltico, de manera que si el ojo veía «blanco» no podía ver «negro» de forma simultánea; si el ojo veía «negro», no podía ver «blanco» al mismo tiempo. El truco del dibujo era que todas aquellas figuras tan insensatas como desventuradas se espiaban unas a otras y a la vez no se daban cuenta de que también se las espiaba. Y lo más divertido era que ninguna se diferenciaba en lo más mínimo de las demás: todas eran idénticas.
Anonymous
La palabra «Nosotros» es como cal derramada sobre los hombres, que los solidifica y endurece hasta hacerlos de piedra, y que aplasta todo bajo ella, y aquello que es blanco y aquello que es negro se pierden igualmente en su gris. Es la palabra mediante la cual los depravados roban la virtud de los buenos, mediante la cual los débiles roban el vigor de los fuertes, mediante la cual los necios roban la sabiduría de los sabios.
Ayn Rand (Himno (Spanish Edition))
Hoy en día se descuida el equilibrio y la armonía; sin embargo, son las bases de la sabiduría. Todo se hace en exceso. Le gente parece excesivamente mezquina. Se bebe demasiado, se fuma demasiado, se tienen demasiadas preocupaciones. Hay demasiadas ideas en blanco o negro. Todo o nada. La naturaleza no es así. En la naturaleza hay equilibrio. Los animales destruyen en pequeñas cantidades. Los sistemas ecológicos nunca son eliminados en masa. La humanidad no ha aprendido el equilibrio; mucho menos lo ha practicado. Se guía por la codicia y la ambición; se conduce por el miedo.
Brian L. Weiss
Creo que la desorientación es uno de los signos de la posmodernidad. El ser humano está cada vez más preparado para vivir instalado en la incertidumbre, el desconcierto, la perplejidad. La sociedad de hoy es compleja; está tejida de ingredientes contradictorios que conducen a muchos individuos a no saber a qué atenerse: lo bueno y lo malo, lo excelente y lo perverso, el blanco y el negro… Los nuevos enemigos de la sociedad planean de forma solapada: el aburrimiento, el hastío, la depresión, el cansancio psicológico, el escepticismo, la incultura, la frivolidad... Se
Enrique Rojas (¿Quién eres?)
Para la persona encerrada en la campana de cristal, vacía y detenida como un bebé muerto, el mundo mismo es la pesadilla. Una pesadilla. Yo lo recordaba todo. Recordaba los cadáveres y a Doreen, y la historia de la higuera y el diamante de Marco y el marinero en el parque y la enfermera de ojos estrábicos del doctor Gordon y los termómetros rotos y el negro con sus dos clases de judías y los diez kilos que engordé por la insulina y la roca que se combaba entre el cielo y el mar como una calavera gris. Quizás el olvido, como una bondadosa nieve, los entumeciera y los cubriera. Pero eran parte de mí. Eran mi paisaje.***—¡Un hombre que viene a verte! La sonriente enfermera con su toca blanca asomó la cabeza por la puerta, y durante un segundo de confusión, pensé que estaba realmente de vuelta en el colegio, y esos pulidos muebles blancos y ese blanco panorama de árboles y colinas, una mejora en las gastadas sillas y en el escritorio y en la visión un desnudo patio de mi antigua habitación: «¡Un hombre que quiere verte!», había dicho la chica de guardia por el teléfono del dormitorio.¿Qué había en nosotras, en Belsize, que fuera tan diferente de las muchachas que jugaban bridge, chismorreaban y estudiaban en la universidad a la cual yo iba a regresar? Esas muchachas también estaban sentadas bajo campanas de cristal de cierta clase.—¡Entra! —exclamé, y Buddy Willard, con la gorra caqui en la mano, entró en la habitación.—Bueno, Buddy —dije.—Bueno, Esther. Nos quedamos parados ahí mirándonos el uno al otro. Esperé un toque de emoción, aunque fuera el más tenue resplandor.Nada.Nada, excepto un grande, afable aburrimiento. La forma de Buddy enchaquetada en caqui parecía tan perfecta y tan Pág.145/150
Anonymous
El mejor regalo era imposible. Ni siquiera el espiritismo era capaz de devolver a las personas a la vida. Todo aquello estaba envuelto en misterio, era mitad fraude y mitad milagro; mejor era olvidarse de ello y atenerse a los milagros de verdad, como la fotografía. ¡Un rectángulo de papel en blanco y negro que podía contener tanta vida! Extasiada, volvió a contemplar el retrato. No era suficiente, porque no era él; sin embargo era él, y tendría que bastarle, porque era lo único que tenía. Y sin embargo, otra ironía de la vida, no era él.
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Tuve que ahorrar un poco para mi siguiente obsesión. Los discos de mi padre se me habían quedado cortos, así que finalmente dejé de desayunar durante unas semanas y reuní lo suficiente para una nueva adquisición. Un disco. Era Temptin' Temptations, de los Temptations. En la portada aparecían cinco jóvenes negros vestidos de blanco inmaculado, con chaquetas cortas de un botón y zapatos negros. Recuerdo la primera vez que lo puse en el tocadiscos. Primero un crujido. Y luego, BAM. Una música elegante, evocadora, romántica. Chirriando, algo lejana, tomando la habitación. La canción era «Since I lost my baby». Mirándolo, comprendí. Esa foto pintaba un mundo superior en el que los hombres eran dandis y toda la música era gloriosa, sus trajes nítidos, blancos, sus caras de ébano, sus zapatos relucientes. Donde cada minuto de vida era así: refinado y pleno, hermoso. Sin manchas. Un mundo irreal en el que nadie envejecía y había códigos de honor, y todo era puro y bello. Un mundo que no se parecía en nada a mi pueblo, a mi instituto, a los jugadores de fútbol que me perseguían para mantearme. Mi tía abuela me ha contado muchas veces cómo entraba en mi cuarto y me encontraba dormido al lado del tocadiscos, durmiendo plácidamente en el suelo. Aquellos discos eran mi medicina y mi vaso de leche caliente, mi primer compadre, mi escondite y mi refugio, mis armas. Con el tiempo llegaron las Marvelettes y los Impressions, los Temptations y Betty Harris, Bobby Womack y Al Green, Sam Dees y los Miracles. También Gloria Jones, Kim Weston, Barbara Acklin, Esther Williams, Curtis Mayfield, los 4 Tops, las Supremes, Chuck Jackson, Z.Z. Hill, Tommy Hunt, Billy Stewart, Sly & The Family Stone, Nina Simone, Billy Butler, Gene Chandler, Shirley Ellis y J.J. Jackson. Nunca volví a escuchar otra cosa
Kiko Amat
¿Qué pasaría con su pasado y con su memoria si no los ponía en blanco y negro, a salvo del tiempo y del olvido?
Leonardo Padura (La neblina del ayer)
La gente suele decir que las cosas no son sólo o blanco o negro; Yo (Y) no estoy segura. El blanco y el negro no son más que problemas de luz, de totalidad y de ausencia de la luz. El negro es oquedad y el blanco plenitud, o al menos eso aprendí en la escuela de arte. No importa, el caso es que las cosas que no podemos ver no se ocultan en las mezclas grisáceas ni en el blanco ni en el negro sino en la delgada línea que separa esas dos totalidades. Un lugar que ni siquiera podemos imaginar, un horizonte de no retorno. Es en los límites donde todo se torna invisible.
Verónica Gerber Bicecci (Conjunto vacío)
<> es una expresión que usamos, más o menos quiere decir que trabajan en los dos extremos. Blanco y negro, ¿me entiendes?
William Gibson (Count Zero (Sprawl, #2))
Trabajar con las dos manos" es una expresión que usamos, más o menos quiere decir que trabajan en los dos extremos. Blanco y negro, ¿me entiendes?
William Gibson (Count Zero (Sprawl, #2))
Era estúpido concebir la vida en términos de blanco o negro: todos éramos víctimas en un momento y verdugos en otro.
Enrique Serna (Fruta verde (Spanish Edition))
Soy un payaso en blanco y negro actuando de espaldas a un público que no hace mas que llorar.
Joaquin G. Gutierrez
Las cafeterías eran un sol particular y si alguien hubiera mirado por debajo de la mesa habría visto muchos zapatos negros exageradamente lustrados, maletines y unos zapatos blancos que colgaban de la silla, los míos.
María José Ferrada (How to Order the Universe)
El punto negro en la parte blanca y el blanco en la parte negra indican la posibilidad de transformación: solo cuando todo parece seguro puede irrumpir lo desconocido de forma brutal e inesperada.
Jordan B. Peterson (12 reglas para vivir: Un antídoto al caos)
Y de repente tu llegaste a mi vida para demostrarme que mi mundo en blanco y negro podía ser de colores y te atreviste a pintarlo convirtiéndolo en perfecto. Te amo, antes, ahora y por toda la eternidad.
D.D. Gianni (Y de repente tú)
El lector del conjunto de esta obra descubrirá más fácilmente por sí mismo los lazos fortísimos que además le unen al sistema comunista mundial, y a su jefe de filas soviético. Muchos fenómenos que han llamado nuestra atención (la «página en blanco», esa nostalgia del reinicio absoluto, de la tabla rasa; el culto y la manipulación de la juventud) pueden encontrarse fácilmente bajo otros cielos.
Stéphane Courtois (El libro negro del comunismo: Crímenes, terror, represión (Spanish Edition))
Para algo soy puertorriqueño, es decir, isleño hasta cierto punto, negro negado y blanco sin serlo. Un híbrido, la mitad de algo, el doble del doble.
Mayra Santos-Febres
Negro no significa peligroso, blanco no significa basura, marrón no significa contrabandista, musulmán no significa terrorista, mujer no significa débil y LGBT no significa enfermo. Estos son los fundamentos que debemos comprender si queremos construir una sociedad justa y humana.
Abhijit Naskar (Boldly Comes Justice: Sentient Not Silent)
Descubriría que su moral no está definida en términos como blanco o negro, bueno o malo. La mayoría se aleja de ese nivel de introspección. Nos hace darnos cuenta de que somos villanos. Al menos en parte. También todos tenemos la capacidad de ser héroes. En algún momento, todos somos el héroe de alguien y el villano de otro. Todo es cuestión de perspectiva. Y eso cambia con tanta frecuencia como los ciclos de la luna.
Kerri Maniscalco (Capturing the Devil (Stalking Jack the Ripper, #4))
Es cierto que la Internacional clama que «Hagamos tabla rasa del pasado» y que Mao se comparaba a un poeta genial que caligrafiaba sobre la famosa página en blanco. ¡Como si a una civilización de una antigüedad de varios milenios se la pudiera considerar una página en blanco!
Stéphane Courtois (El libro negro del comunismo: Crímenes, terror, represión (Spanish Edition))
Las personas que critican constantemente, que en todo y en todos encuentran un motivo de queja, que perciben siempre el punto negro en el mantel blanco, tienen un gran desprecio por sí mismos, una sombra1 tan grande que constantemente la proyectan a su alrededor. Asimismo, quienes ven belleza, bondad y luz en otros están proyectando su propia belleza, bondad y luz.
Martha Alicia Chavez (Tu hijo, tu espejo (Nueva edición) (Spanish Edition))
No es lo mismo ser racista en blanco y negro —un inglés en la India, un belga en el Congo— que ser racista con tal despliegue de matices; se necesita mucha más atención, más mala leche, más interés en el asunto.
Martín Caparrós (Ñamérica (Spanish Edition))
mi mundo seguiría siendo en blanco y negro, sin sabor, sin consistencia, sin olor.
Irene Cao (Yo te siento)
Nuestro watan se conocerá a partir de ahora como Emirato Islámico de Afganistán. Éstas son las leyes que nosotros aplicaremos y vosotros obedeceréis: Todos los ciudadanos deben rezar cinco veces al día. Si os encuentran haciendo otra cosa a la hora de rezar, seréis azotados. Todos los hombres se dejarán crecer la barba. La longitud correcta es de al menos un puño por debajo del mentón. Quien no lo acate, será azotado. Todos los niños llevarán turbante. Los niños de uno a seis años llevarán turbantes negros, los mayores lo llevarán blanco. Todos los niños deberán vestir ropa islámica. El cuello de la camisa se llevará abotonado. Se prohíbe cantar. Se prohíbe bailar.
Khaled Hosseini (Mil soles espléndidos (Spanish Edition))
El filósofo Santayana soñó una vez que veía pasar cuatro caballeros en cuatro caballos, negro, alazán, bayo, y el último era blanco. Los vio pasar empenachados y armados y les dijo: -¿Adónde van? -Vamos a libertar a los pueblos. -¿Libertarlos de qué? -les gritó el filósofo. El hombre coronado del caballo blanco le dijo: -De las consecuencias de la libertad.
Leonardo Castellani (Cómo sobrevivir intelectualmente al siglo XXI (Spanish Edition))
ritual que les promete la hombría, pero estoy aquí para decirles que no es más que una promesa vacía e ilusoria. Es una promesa que jamás podrá ser cumplida, porque nosotros los xhosas, y todos los sudafricanos negros, somos un pueblo conquistado. Somos esclavos en nuestro propio país. Somos arrendatarios de nuestra propia tierra. Carecemos de fuerza, de poder, de control sobre nuestro propio destino en la tierra que nos vio nacer. Se irán a ciudades donde vivirán en chamizos y beberán alcohol barato, y todo porque carecemos de tierras que ofrecerles donde puedan prosperar y multiplicarse. Toserán hasta escupir los pulmones en las entrañas de las minas del hombre blanco, destruyendo su salud, sin ver jamás el sol, para que el blanco pueda vivir una vida de prosperidad sin precedentes. Entre estos jóvenes hay jefes que jamás gobernarán, porque carecemos de poder para gobernarnos a nosotros mismos; soldados que jamás combatirán, porque carecemos de armas con las que luchar; maestros que jamás enseñarán porque no tenemos
Nelson Mandela (El largo camino hacia la libertad)
Son la gente que hace que nuestra economía funcione y nuestra democracia florezca: los profesores, mecánicos, enfermeras, técnicos informáticos, trabajadores de línea de producción, conductores de autobús, carteros, directores de tiendas, plomeros y reparadores que constituyen el vibrante corazón de los Estados Unidos. Y, sin embargo, a pesar de todos los progresos de las últimas cuatro décadas, sigue existiendo una terca distancia entre el nivel de vida de los trabajadores negros, latinos y blancos. El sueldo medio de un negro es el 75 por ciento del sueldo medio de un blanco; el sueldo medio de un latino es el 71 por ciento del sueldo medio de un blanco. El valor medio neto de un ciudadano negro es de unos 6.000 dólares, el de un latino es de unos 8.000 dólares. El de un blanco es de 88.000 dólares. Cuando les despiden o se ven enfrentados a una emergencia familiar, los negros y los latinos tienen menos ahorros a los que recurrir y los padres tienen menos posibilidades de ayudar a sus hijos. Los negros y los latinos de clase media incluso pagan más por sus seguros, es menos probable que sean propietarios de su vivienda y tienen peor salud que los americanos en general. Es posible que las minorías estén cada vez más cercanos a vivir el sueño americano, pero ese sueño puede tornarse rápidamente en pesadilla.
Barack Obama (La audacia de la esperanza: Reflexiones sobre como restaurar el sueño americano)